Iniciado por timanator

Yo era de los que después de un buen polvo y química pedía los datos para montar faena afuera. Este año me dedique a probar cosas nuevas en como me relacionaba con las putas. Generalmente el cliente propone y la puta dispone, pero me di cuenta que como con las mujeres normales es siempre mejor hacerle creer que todo es idea de ella. Como regla ya nunca pido datos… creo que estoy en un 40% de resultados, si todo esta bien dispuesto en la previa, ella propone. Por lo general es un simple “oye, si quieres anota mi numero” o “bajamos y nos tomamos algo?” ese último lo cuento como derrota pero me mantengo siempre fiel a mis reglas, ya después es un manejo diferente pero siempre con la idea de que ella proponga.

No es algo que uno simplemente pueda escribir acá para que todos los puteros la usen, es más formativo. Por ejemplo, un error que siempre cometía era el de como preguntaba por el servicio. Por lo general era un; “ Bueno, y como es la subida?” o “cuéntame, que es lo que vamos a hacer” o el peor “y como es el servicio?” Por lo general eso produce una respuesta que tienen grabada para todos los clientes, es una respuesta estéril que no deja espacio para maniobrar apropiadamente. En mis ensayos me di cuenta que ser algo impertinente y mantener una progresión sexual directa da mejores resultados. Una mejor pregunta es; “que me quieres hacer?” o una variación directa. Suena simple y vago para un contrato verbal pero en mi caso da mejores resultados, cada quien es diferente y pues toda la conversación es lo que cuenta,
ya me ha pasado en varias ocaciones que las viejas garantizan el servicio. Así no lo crea, cuando dejo a la vieja proponer uno de los resultados es que digan; “te lo garantizo, el mejor sexo de tu vida o te devuelvo el dinero.” Es una labor de paciencia y a veces le ganan a uno las ganas pero uno es el de la plata… poco a poco estoy teniendo mejor disciplina con eso y los resultados son mejores. A cada quien le toca experimentar pero ya que le paso pues estudie bien como fue todo por que de pronto no fue exclusivamente el buen polvo que le dio.