Los enemigos del proceso de paz aplauden y de inmediato ponen a los desmovilizados que han salido de las zonas veredales en las filas de la delincuencia.

Es posible que algunos reincidan y con ello pierdan todos los beneficios conseguidos, pero la mayoría van en busca de sus familias y a comenzar el rebusque por su cuenta.

Como se denunció hace rato, las zonas veredales fueron fruto de la improvisación gubernamental, nunca fueron terminadas, muchas no tenías servicios básicos y lo único que ofrecían era hacinamiento y condiciones inhumanas.

Confiemos en que las cooperativas propuestas como modelo empresarial para estos demovilizados se hagan realidad. la guerrilla cumplió; esperemos que el Estado lo haga igualmente.

Al margen: ¿éstos son los que se van a tomar el poder e instaurar un Estado comunista? Apenas unos cuantos miles de votos van a conseguir, una migaja que los pondrá en evidencia: una ridícula minoría agrandada por la extrema derecha para infundir el miedo que necesita para ganar las elecciones.