Transeúntes tomaron fotos de mujeres que posaban desnudas en los Jardines de Cristina, Puerta Jerez y frente al palacio de San Telmo.



Las personas sorprendidas iban mirando las escenas de las modelos que posaban en un coche de caballos y en sillas de maderas en la Puerta de Jerez, luciendo tacones, un cinturón y un bolso.



El Ayuntamiento de Sevilla abrió una investigación a las personas que se encontraban en el rodaje de la película, ya que no se autorizó ninguna grabación con esas características.



Se especula que es una práctica que se ha ido realizando en ciudades europeas, en donde graban a personas desnudas en lugares simbólicos.