Para los buhos, sapos, o los que vienen solo para ver que dato sacan de los senseis les tengo malas e irónicas noticias. Ud es el tipo de lastre o peso muerto que hace que algunos senseis ya no aporten. El foro es lo que ud haga de él, si solo tiene 5 comentarios en 4 años y 2 son para quejarse porque los masters ya no le regalan su información a cambio de nada o porque no le gustan cierto tipo de comentarios o a hacer preguntas que ya han sido respondidas muchas veces o solo pone comentarios para preguntar datos, ud es peor que un 0 a la izquierda.

El único consejo que le puedo dar es que haga el tipo de aportes que le gusta ver, y esa es la única forma que el foro va a ser como a ud le gusta. Por ejemplo a mi no me interesa ver detalles de lo que hizo en la cama entonces poco escribo de eso, no me gusta la gente que solo viene a preguntar datos entonces poco lo hago, no me gusta intentar descifrar comentarios con muchos horrores de horrografía entonces trato de cuidar lo que escribo, etc. Sé el cambio que quieres ver en el mundo!

Por el otro lado, aunque entiendo y comparto las razones de los senseis, el poder de foro también tiene su lado bueno. Si no fuera por el foro las vainas estarían tan paila como en pussy. El club de la culiada tiene 0 influencia en pussy y alla cualquier guaricha rica empieza cobrando 80k cuando el sitio está medio lleno. A comienzo del año pasado en el santa ellas empezaron a cobrar 70k pero los senseis dijeron que no. Y ahí estamos todavía con tarifa oficial.

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Les cuento el cuento de Paula. Costeña morena de atonis/venus, de cuerpo natural ideal para mis gustos. La conocí recién llegada, 50k el polvo más el show de mesa, que delicia como se mueve! Ella no sabía ni dónde había que pagar el rato ni cómo poner un condón. Sin vicios. Más bien reservada en la cama y de polvito normal. Pero le vi algo poco común y es esa actitud, muy buena gente, muy querida y con toda la intención de satisfacer. Traté de canalizar todas las enseñanzas de los senseis, pagué el otro rato para hacer las vainas con calma, traté de explicarle las cosas.

Al par de semanas volví y fue como si hubieran pasado un par de años. Canchera, remilgona, reseca, "asi no", "eso no, que asco", "que asi no!", "concentrate que ya van a tocar la puerta". Con toda la tristeza del mundo tocó voltearla y darle como a cajón que no cierra.

Que piedra