El fiscal general de la Nación, Néstor Humberto Martínez, reavivó hoy la polémica sobre la lista de bienes de las Farc, de dónde saldrán recursos para reparar a víctimas del conflicto armado.
Lo hizo con una carta dirigida al ministro del Interior, Guillermo Rivera, en la que enuncia las inconsistencias que él encuentra en el inventario hecho por la guerrilla e, incluso, se burla de algunos apartes de esa enumeración.
El fiscal reconoce que no es la autoridad competente para calificar si las Farc cumplieron con su obligación de inventariar de manera correcta y verdadera su patrimonio, lo que le corresponderá a la Justicia Especial de Paz, sí dice que es su deber formular algunas advertencias específicas.
En ese sentido, el fiscal dice que bienes como inmuebles, naves y automóviles no están correctamente identificados; se declara sorprendido por que no haya una sola matrícula inmobiliaria de las propiedades rurales ni el RUNT de los vehículos.
Tampoco cree que estén suficientemente identificados los semovientes, pues solo hay identificación del hierro de 130 cabezas de ganado.
El fiscal advierte, así mismo, que la guerrilla incluye en su inventario un apartado de “bienes confiscados a la mafia” por más de 29.000 millones, sin que tengan “título jurídico para enajenar bienes a favor de patrimonio autónomo”, algo similar a los 3.753 kilómetros de vías rurales que declaran haber construido.
Finalmente, el fiscal señala las irregularidades de la llamada “inversión social”, que incluye operaciones a integrantes de sus filas (como de extracción de vena várice, extracción de acceso (sic) en oreja y cirugía de cavidad de pene) y de la lista de enseres y equipos (conformada, entre otros, por botas, traperos, escobas y extractores de naranja y limón).
La última señal lanzada por el fiscal es acerca de la inclusión dentro del inventario de bienes del armamento que ya está en poder de Naciones Unidas.