La sabiduría popular hace mucho lo dijo: "todos los extremos son viciosos". Ni capitalismo salvaje ni comunismo empobrecedor. El mejor ejemplo de la mezcla exitosa de los dos mundos es el modelo económico de los países nórdicos donde empresarios y trabajadores trabajan unidos en pos de la prosperidad general.

Ahora, respecto al negocio materia del artículo de prensa, el modelo adoptado fue el anarquista donde cada quien hace lo que le dé la gana. En el modelo comunista, por el contrario, hay una dictadura de una élite comunista que impone una producción de acuerdo con su ideología y no con las circunstancias del mercado.