Excelente artículo. Ese hubiera sido el camino ideal para seguir en Colombia, pero nuestros Gobiernos nunca se animaron a seguirlo o no quisieron ver otra opciòn distinta a la que siempre manejaron.

Europa era una miseria comparada con Asia e incluso America en el medioevo. Empiezan a distanciarse del resto del planeta cuando a la poblaciòn se le concede el derecho a la propiedad privada...y ni hablar más adelante cuando pudieron patentar y obtener reditos de sus ideas.

Pero aqui el Estado en lugar de jugar a ser el garante de los derechos comerciales se comportò como todo un señor feudal que solo se aparecía para esculcar los bolsillos de quienes buscaban impulsar un proyecto propio.

Y asi nos fue. Y por ello estamos en estas.

¿Que hacer? ¿Reversamos los acuerdos, echamos otra vez la guerrilla al monte y nos encargamos ahora si de poner a toda la comunidad de parte del Estado brindandoles seguridad y respeto? Podría ser una una opciòn valida siempre y cuando cumplamos nuestra parte del trato a los más alejados y necesitados.

Porque a muchos nos queda la incertidumbre de que una vez rotos los acuerdos y reiniciada la guerra, en lugar de seguir los consejos de De Soto, volvamos a comportarnos como naciòn como siempre lo hemos hecho: aislando a quienes se encuentran alejados en la informalidad, negandoles la mano y viendo a ver cuando nos aparecemos por allá, no para ayudar, sino para ver como sacamos provecho de sus necesidades y les quitamos lo poco que tienen. Y de esa manera seguir en guerra hasta el fin de los tiempos.