Poco se habla del tema y se dedicaron a extender su disputa personal en cada tema. Típica muestra de la bravuconería que abunda en los foros de los periódicos y redes sociales.

Hablando del tema, ahora sí, no puedo dejar de sentir una decepción enorme con Fajardo. Cuando fue alcalde de Medellín parecía alguien que hacía las cosas diferentes. Ahora lo veo como uno más del montón luego de su desastrosa gestión como gobernador de Antioquia.

Todo esto nos recuerda que no siempre la mejor opción está dentro del grupo que se define como algo que no es "más de lo mismo". Hay que pensar en propuestas que enruten al país hacia una salida del bache económico en el que estamos y sanear las instituciones para que vuelvan a ser confiables. Desafortunadamente, no las hay, o por lo menos no las veo ahora de entre las existentes.

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