Fue archivada la iniciativa por ser abiertamente inconstitucional. De aprobarse no habría pasado el examen de la Corte Constitucional. Los derechos de las minorías son protegidos por la Constitución del 91 y no dependen de la voluntad de la mayoría sino de los derechos fundamentales consagrados en nuestra Carta, que no pueden ser vulnerados.

Además no existe ningún estudio científico en el mundo que avale la inconveniencia de la adopción por una familia diferente a la tradicional de hombre-mujer. Contundentes fueron los testimonios exitosos rendidos ante la Comisión por quienes fueron adoptados por solteros o familias homoparentales. De igual manera, se demostró que la mayoría de hogares colombianos son encabezados por una sola persona: madres cabeza de familia.