Buenas noches foreros libidinosos. Hace unos días pedí una cita a través de WhatsApp con la susodicha, y honestamente la experiencia fue mucho mejor de lo que esperaba.
Para empezar, hay que decir que el sitio como tal es bastante regular (lastimosamente). Como muchos sabrán queda justo al lado de un Super Inter, aunque extrañamente se parece más a una tienda de barrio (por lo pequeño) que a un típico almacén de los de ellos . Cuando yo entré no había mucha gente ahí. Pero también queda diagonal a una panadería grande (que al momento de llegar si estaba tetiada).
La verdad es que me vi tentado a devolverme ya que todavía no he desarrollado mi confianza puteril, y todavía me siento algo incomodo de que la gente me vea entrando a esos lugares del demonio, jejeje. En cuento a las instalaciones, pues no son bonitas ni mucho menos, diría mas bien que son "normalitas". Aunque para una persona de estrato alto puede ser definida como cuchitril, supongo. Todo es relativo señores.
Lo que si definitivamente no me gustó, es que la cama si se veía como algo anti-higiénica, o como medio sucia. Pero bueno, ya estando allá pues traté de no darle mente a eso. Lo chistoso es que cuando llegué al lugar, un man me atendió y me dijo que esperara a la niña arriba "en nuestras cómodas instalaciones" (según el, jajaja).
Cuando la pelada llegó como a los diez minutos, me llevé una grata sorpresa ya que la niña es bien bonita. Y pues yo la verdad me imaginaba como una vieja regular (debido al precio del servicio). Natalia parece la típica vecina buenota de barrio, pero con cara de depravada sexual
Cuando entramos al cuarto se duchó (que porque venia del Gimnasio), y me preguntó si yo me iba a duchar también, a lo cual yo acepté sin problemas. Me comentó que a veces le toca atender manes que vienen del trabajo todos vueltos mierda, y que aun así se niegan a pegarse un duchaso los muy desgraciados. ¡No sean puercos muchachos ome! jajaja
Por cierto, lo del Gimnasio se le nota bastante ya que tiene todo el cuerpo bien durito, especialmente las piernas y los glúteos. Ya cuando íbamos a empezar la faena, pues la pelada tomó la iniciativa con besos y caricias. Luego comenzó con un oral muy bueno por un rato, hasta que ya mi amigazo estaba bien contento. A lo cual procedió a frotarme su gran culo en el miembro de manera sensual, moviendo todo eso un contoneo sabrocito.
La pelada tiene claro que ese culo es su mejor atributo. Y afortunadamente no solo lo tiene de adorno, sino que también lo menea como una salvaje. Sabe hacer los típicos movimientos de actriz porno, que generalmente las peladas "normales" desconocen.
Lo que si no quiso fue dar besos en la boca, ya que en un par de ocasiones como que trató de desviar la carita. Aunque yo tampoco le insistí, ya que la verdad no es que me llame demasiado la atención. Pero creo que si le hubiera pedido el beso me lo hubiera dado, ya la pelada es bien complaciente.
Al principio del coito como que estaba fingiendo demasiado. Pero es algo que no me molesta para nada, puesto que al fin y al cabo lo hacen para complacerlo a uno. Ya después de un ratico de "voliarle" en la forma, ahí si comenzó a gemir de verdad verdad.
Eso le di matraca de lo lindo, como por 45 minutos seguidos, y la pelada no se cansaba ni se quejaba de nada. Creo que le alcancé a hacer la mitad de las posiciones del Kamasutra más o menos, jejeje.
Eso fue lo vacano también. Que la pelada es bastante inquieta. Eso desde que se inserta el miembro no hace sino sarandiar ese culo pa todos lados, brindando una vista majestuosa de todas esas carnes. Hubo un breve momento, en el que de verdad pensé que me iba fracturar el pene (por la manera tan despiadada como me machucaba).
Ya cuando se iba a acabar el tiempo y ella vio que nada que me venía, se puso las pilas y empezó nuevamente a succionarme la polla de manera vertiginosa. Unos minutos después me quito el condón y me comenzó a pajiar indiscriminadamente. Estuvo un rato dándole y dándole pacientemente y sin desfallecer, hasta que me hizo venir con furia y como mandan los dioses. Eso voló kumis por doquier. Le cayo hasta en la mano y en el brazo, y no puso problemas de nada.
Aunque la verdad también hubo otro detalle maluco. En medio del ajetreo le note un olorcito algo fuerte en el coño. En un par de ocasiones que cogí mi miembro pa metérselo otra vez, la mano me quedó pasada con el "aroma" ese. Tampoco era nada del otro mundo, pero si me pareció mucho más fuerte que "lo normal". Pero bueno, todos los inconvenientes al final no tuvieron importancia, teniendo en cuenta la calidad del servicio (de la culiada pues).
En conclusión, viendo el precio que manejan allá ($60.000 la hora), pienso que es recomendadísimo el servicio con esta mujer. Con las demás no se que tal será, pero supongo que Natalia sera de lo mejorcito del lugar. Igual creo que iré a probar a las demás, por pura curiosidad.
Ahí les pongo la foto que me mandó derechito hasta allá.
Saludos fraternales.