Fue una victoria de esas que sirven para detectar errores –hubo algunos–, para mirar alternativas –hubo varias–, y para sumar confianza y optimismo antes de Copa América Centenario. Colombia venció ayer 3-1 a Haití, en un amisto que no fue sencillo, que resultó intenso, pero que fue muy productivo.

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El partido le permitió a José Pékerman probar un equipo titular en ausencia de dos de sus piezas fundamentales: de James Rodríguez y de Edwin Cardona, que aún no llegan a la Selección. Era, entonces, un desafío encontrar fórmulas y alternativas para gestar juego ofensivo.

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Pékerman incluyó entonces a Dayro Moreno, que tuvo su primer partido desde su regreso a la Selección –había estado en la pasada fecha eliminatoria y no jugó– y fue el socio de ataque de Carlos Bacca. Como no había armador, tuvo a Cuadrado y a Marlos Moreno jugando bien abiertos, explotando las bandas, yendo y viniendo, y con dos volantes internos, Daniel Torres y Sebastián Pérez. Con esa estrategia encaró el juego ante un rival de mucha fortaleza física, que pegó bastante y que generó algunas jugadas de peligro.

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En la primera parte, esa ausencia de un volante creativo se notó, básicamente porque faltó aquel jugador que creara espacios. Pero ante esa ausencia, creció el juego de Pérez, que hizo lo que mejor sabe: recuperar con fortaleza y distribuir con eficacia. Se encargó de llenar esos espacios baldíos. También dejó una buena imagen Marlos, un poco impaciente al comienzo y más seguro después.

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En el primer gol, Cuadrado centró el balón, rastreó al centro del área donde estaba Pérez, solitario y atento. Remató con incomodidad, pero con la fortuna de que su disparó sin potencia lo retomó Dayro en el área chica, lanzándose de media volea para cambiar la trayectoria, engañar al portero, y anotar. Fue el 1-0 (12 PT). Dayro demostró que es el de siempre: un goleador.

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Sin embargo, antes de que llegaran los otros goles, Colombia también sufrió. Sobre todo cuando lo atacaron por arriba. Haití lo hizo dos veces: en una el cabezazo fue arriba; en la otra, tras un tiro de esquina, fue el gol del empate, de Guerrier (34 PT), quien metió un cabezazo liberándose de la marca de Pérez.

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En la segunda parte, Haití, que ya había perdido a un jugador por expulsión (39 PT), se limitó a aguantar un dominio ya incesante de Colombia, que, con varios cambios, encontró todos los espacios y anotó dos goles más. Uno fue de Cuadrado (8 ST), en jugada que inició Marlos y que siguió Dayro. El tercero también lo gestó Marlos, quien pasó el balón a Celis y este cruzó al área para Roger Martínez, quien anotó su primer gol con el equipo mayor.

Este fue un partido para ensayar, y la prueba para Colombia resultó satisfactoria, con goles, con alternativas, con fallas detectadas para corregir, y con jugadores que se muestran y se toman confianza antes del debut en la Copa América, contra EE. UU., este viernes.


PABLO ROMERO
Redactor de EL TIEMPO
@PabloRomeroET