Es interesante lo que se está sabiendo sobre las horas previas a la difusión de los resultados por parte del CNE. Se habla de que hubo una reunión del ministro de defensa con Cabello y Maduro y que el militar los convenció de aceptar los resultados con un poderoso argumento: los militares no iban a tomar partido ante un resultado tan contundente.

La pérdida del apoyo de las fuerzas armadas podría provocar un golpe y tanto el chofer como el matón aceptaron a regañadientes el triunfo de la MUD.

Pero no fue iniciativa del ministro de defensa. Los mandos medios de las fuerzas armadas, oficiales jóvenes, manifestaron su rechazo a salir a las calles a matar venezolanos y el alto mando, pese a haber sido favorecido por Chávez y Maduro, no tuvo alternativa que respaldar a su gente o terminar despojados del poder por ella.

De ahí la inusual rueda de prensa del ministro antes de conocerse los resultados manifestando respaldar los resultados de las votaciones.

Los boliburgueses se quedaron solos y saben que de salir a la calle sus comandos armados, los militares los aplastarán y ellos mismos acelerarían su fin.