"Yo los llamo a ustedes hermanos de Colombia, defender a Venezuela es defender a sus familias, llegó la hora de conformar en todo el país un poderoso movimiento de bolivarioano de colombianos y colombianas en Venezuela en defensa a la paz y al a soberanía", señaló.
Pidió al Gobierno del presidente Juan Manuel Santos que "recupere la sensatez" y señaló que no abrirá la frontera hasta que el ejecutivo nacional no acceda a sus peticiones de combatir el contrabando, la especulación económica y el paramilitarismo.
A pesar de la actuación de la guardia venezolana contra los colombianos en la zona de frontera, Maduro aseguró que su gobierno tiene muy claras las diferencias entre los civiles colombianos y los paramilitares y contrabandistas que afectan la zona.
Maduro justificó la demolición de casas en el barrio de la frontera conocida como La Invasión, al señalar que no puede permitir una base paramilitar en su territorio.
"No soy anticolombiano, soy antiparaco, esa gente era esclavos de paramilitares, cuando averiguamos eran ilegales, ninguno se declaró refugiados, todos dijeron que querían regresarse", señaló.
El mandatario venezolano anunció que en las próximas horas se reunirá con su gabinete para acordar nuevas medidas para enfrentar la supuesta guerra económica que azota a su país.