Desde La Habana la delegación de paz de las Farc insisten en su propósito de lograr un cese bilateral al fuego, aseguran que es la forma más “sensata” de alcanzar el objetivo de una paz duradera, sin embargo, aclaran que no fue por ellos que la tregua de cinco meses terminó, por el contrario, dicen, fueron las consecuencias de acciones armadas y el despliegue militar en todo el país en contra de los integrantes de esa guerrilla, lo que provocó esa ruptura.
Celebran que el Gobierno acudió a la sensatez al momento de enfrentar la crisis ocurrida el pasado jueves en Bogotá con la activación de dos artefactos explosivos, pero advierten que una de sus pretensiones es que no los obliguen a incrementar las acciones armadas.
“Solo aspiramos a que se le garantice al país que no se precipitarán de nuevo circunstancias que nos pudieran conducir a un escalamiento mayor de la confrontación. Porque, está claro que fueron fundamentalmente los ataques con tecnología de punta, el acoso contra nuestras unidades en tregua y el despliegue militar a lo largo y ancho del país, los que no solo afectaron a nuestros combatientes en rebelión sino también a la mesa de diálogos de La Habana, el detonante que condujo a la actual situación de guerra”.
Culparon al saliente ministro de Defensa, Juan Carlos Pinzón, a quien calificaron de irresponsable y vanidoso, de la situación que vive el país.