Alias Julián Bolívar, el paramilitar y financista político que ayer, 22 de mayo, recuperó su libertad por cumplir con los mínimos de la ley de Justicia y Paz sería el jefe de una escuela que su organización criminal creó en los llanos para que sus secuaces aprendieran cómo torturar campesinos para poder robarles la tierra y aterrorizarlos. El descubrimiento de esta escuela fue hecho por el Centro Nacional de Memoria, que esta semana presentará un extenso informe al respecto.