Preciosa la linda veterana y cuerpazo jamonudo que se gasta, lo cierto que esta muy adorablemente sexy, que porte de belleza que posee, esta muy pero que muy buena, sin lugar a dudas, me casaba con ella. Tremendas ganas de probar tus labios
y sentir el sabor de tus besos,
de ver de cerca mi reflejo en tus ojos...
Luego recuerdo mi realidad
y me alejo sin intentarlo y en silencio.
No lo olvides:
Mis manos siempre se abrirán
para dejarte hueco
entre mis dedos.
Eres el beso exacto, a la hora precisa y a la velocidad que me gusta: lento. Lento como cuando tus susurros en mis labios están, lento como cuando te leo de verso en verso tu alma.