En las plazas traseras hay espacio para tres adultos, tanto a lo largo como a lo ancho, y alto, donde solo van a tocar las cabezas de aquellos que excedan largamente el 1,80 m. En relación a la seguridad para estas plazas, hay dos apoyacabezas y cinturones inerciales, quedando en el debe el cinturón de tres puntas y el apoyacabezas para quien viaje en el centro. Tampoco tiene anclajes para sillas infantiles, aunque debería tenerlos.
Ese espacio generoso y amplio para quienes viajen atrás tiene un costo, y se ve reflejado en el baúl. 270 litros es todo lo que el Etios le dará a su dueño, que de precisar más capacidad, se verá obligado a rebatir el asiento trasero de forma enteriza y no 60:40, algo que corresponde más a un producto de 23-24 mil dólares. El auxilio va debajo de una alfombra, y gracias Toyota, es del mismo tamaño y marca que las titulares.
Motor
Mecánicamente el Toyota Etios se vale de un impulsor denominado 2NR-FE. Tiene 1.496 cc de cilindrada, cuatro cilindros, doble árbol de levas a la cabeza, 16 válvulas, inyección electrónica multipunto, y distribución por cadena, es decir, que es libre de mantenimiento en este sentido.
Produce 90 cv de potencia a las 5.600 rpm, y un par máximo de 132 Nm a las 3.000 vueltas. Las prestaciones de velocidad final, aceleración de 0 a 100 km/h, o consumos, no fueron declaradas por la marca, y nosotros en el corto tiempo que pudimos manejarlo, tampoco pudimos registrar cifras de ningún tipo.
A modo de referencia, Toyota Brasil declara 8,06 litros cada 100 kilómetros en ciclo urbano, y 7,46 l/100 km en ruta, aunque estamos ante cifras obtenidas con el motor 1.5, pero con configuración para poder funcionar indistintamente con nafta o etanol. El tanque de combustible carga 45 litros y el peso en orden de marcha es de 945 kg.
Se trata de un propulsor ágil y elástico en su respuesta en baja, ideal para circular en el tránsito diario, bastante silencioso en el
ralentí, y un poco rumoroso recién por encima de las 4.500 vueltas. En ruta viaja a 3.000 rpm a 110 km/h en quinta, como consecuencia de una caja de cambios relacionada corta, y que justamente, le da esa agilidad en ciudad que destaco antes.
Es el primer motor de la era moderna de Toyota que carece de sistema de distribución variable (VVT-i), pero por otro lado presenta algunas soluciones mecánicas curiosas, como ser el múltiple de escape integrado a la tapa de cilindros, para reducir la emisión de gases contaminantes y el consumo de combustible.
Otra de las cosas que Toyota destaca en el Etios es su bajo costo de mantenimiento, y eso se ve reflejado en que por ejemplo el sistema de distribución es por cadena, con tensores hidráulicos, que evita los recambios periódicos, como sí pasa con las correas de distribución.