Corrupto por tradición e inepto por vocación: la tormenta perfecta. Nadie se pregunta si va a caer la pandilla madurista porque eso se da por descontado, el problema es cuándo. De eso dependen los cálculos de cuánto va a demorar recuperar un país que primero vivió la tragedia de una minoría oligárquica que saqueó sus finanzas y ahora vive una tragicomedia de otra minoría no sólo ladrona y corrupta sino inepta, liderada primero por un coronel y luego por un chofer, mientras la derecha huérfana se prepara para asaltar el poder cuando el cartel de los idiotas se caiga. ¿habrá alguna posibilidad de cambiar el curso de la historia? ¿Se podrá soñar en que llegue al poder un movimiento que de verdad le importe Venezuela?