Luego del triunfo por 2 a 0 frente al Ajax en Amsterdam por Champions League, Barcelona llegó a su ciudad para enfocarse en el campeonato local. Aficionados recibieron al equipo y el único criticado fue el defensor Gerard Piqué, quien se encuentra en un mal momento futbolístico.
Uno a uno iban desfilando los jugadores de Luis Enrique. A Lionel Messi lo felicitaban y le decían que era un grande. Pero cuando el central español se dejó ver, un hincha no duró en gritar: “Hay que espabilar un poco, hay que correr más”.