Por Lord Mago.
Hoy, luego de ver como Colombia fue aberrantemente neutralizada por un festival de faltas impunes por parte de los Brasileros, pues faltaron amarillas para castigar la mediocridad de ésta descolorida y desatinada selección de Brasil, no me quedan más que palabras de agradecimiento a la Selección Colombia por haber caído como los grandes, luchando, jugando, buscando goles, presionando, atacando, y haciendo ver más pálido, más desteñida y más desatinada de los que ya se veía a ese equipo Brasilero.
No me voy a detener a criticar el planteamiento inicial de Pekerman, ni que Teofilo e Ibarbo hayan sido intrascendentes hoy. A Colombia por desgracia hoy le faltó la cabeza fría que quizás si tuvo en otros partidos (especialmente contra Uruguay hace una semana) para asimilar, sobrellevar y neutralizar el "uruguayo" juego desplegado hoy por Brasil, y para su desgracia, lo que hizo no le salió del todo bien, porque hay que decirlo, en el futbol también se necesita suerte y hoy a Colombia la diosa fortuna le dió la espalda.
Por otro lado, lo de Brasil es simplemente VERGONZOSO. Que hubiera derrotado a Colombia por una genialidad de Neymar u Oscar, o a punta de soberbios tiros libres como el de David Luiz, vaya y pase, así hemos visto ganar a Brasil muchas veces y llegar incluso a disputar finales, pero que sus únicos argumentos hayan sido la cobardía de utilizar la pierna fuerte y la marrullería, no tiene justificación y mucho menos para un grande e histórico como ellos. O bueno, si la tiene, que Brasil actualmente es un equipo mediocre, sin ideas y sin ese brillo y magia (así sea a punta de individualidades) que los ha caracterizado por décadas.
Ahí si como dice el viejo refrán "quien está quedando mal es usted, no yo", y podrá sonar a "consuelo de tontos", pero Brasil, a pesar de ganar y ser semifinalista del mundial, cada vez está mas mal parado y cada vez queda más mal (y lógicamente, con menos credibilidad) ante el mundo y en particular, ante su afición. La imagen que deja Colombia en este mundial es muy grata, y sí, es muy cierto que al final a quien recuerdan y quien se lleva el reconocimiento absoluto es el campeón, pero los buenos equipos también dejan huellas y se ganan el respeto del mundo del futbol, así como Colombia se lo ha ganado en este mundial.
Del arbitraje mejor ni hablar. Sobraron las faltas y faltaron las tarjetas. Al menos un jugador de Brasil (creo que Fernandinho) fácilmente pudo irse expulsado por doble amonestación. Ante eso no hay buen futbol ni cracks talentosos que valgan.
Hoy nuestra Selección ha dejado un precedente sin par en la historia del futbol nacional. Llegar hasta cuartos de final de la manera en que lo hizo, poner incluso a temblar a los pentacampeones del mundo (y de locales!!!!), tener al hasta el momento goleador y seguramente uno de los 3 mejores jugadores del torneo (ojalá que a la postre sea el mejor, lo merece James), no son solo motivo de reconocimiento y agradecimiento por parte de toda Colombia, sino también debe ser motivo de preocupación para la Federación, pues ha quedado demostrado que con un trabajo serio y comprometido, se consiguen grandes cosas.
Creo que la selección ha dejado una inmensa lección en este mundial, y es que si Colombia quiere seguir figurando a nivel internacional como Selección (en sus diferentes categorías), con el mismo respeto que a pulso y con mucho sudor se ganó durante este mundial, es que absoluta y definitivamente la mediocridad, el conformismo, la chabacanería y la chambonería con que se manejaron las Selecciones Colombia (tanto de mayores como juveniles) hasta hace muy poco, deben ser desterrados para siempre de su entorno y sobre todo, de la cabeza de sus jugadores.
Definitivamente si se hace un trabajo serio desde las selecciones Juveniles, si se les guía por los caminos que Pekerman trazó para este equipo, como lo fueron la humildad, el trabajo en equipo, la abnegación, el sacrificio, seguró que Colombia seguirá dando de que hablar y figurando a nivel internacional.
Esperemos que los dirigentes de la Federación, la corrupta Federación, de una vez por todas se pongan la mano en el considere, dejen de pensar en robarse la plata o en ver que tajada sacan de poner "en vitrina" a X o Y jugador que anda en buen nivel, y empiecen desde ya mismo a hacer un trabajo serio y comprometido con los muchachos que hoy están en la sub17, para que tengamos jugadores de élite, como los que tenemos hoy, disputando los mundiales de 2018, 2022 y los que vengan de ahí en adelante.
Gracias Selección Colombia, gracias infinitas!