En la jornada 23 de la Liga de Turquía se enfrentaba el actual líder del torneo el Fenerbahce ante el Genclerbirligi al que derrotó el equipo local 2-0.
Al margen del marcador, el momento que se robo todas las miradas del partido lo protagonizó el volante del holandés de 33 años Dirk Kuyt, y no porque haya hecho un buen regate de esos que mostraba en el Liverpoool de Inglaterra, sino porque en el equipo rival, un defensor lo atacó en sus ‘partes nobles’ cuando estos disputaban la posesión del balón.
Acto seguido la televisión enfocó a su esposa la cual estaba en la tribuna, y su reacción fue angustia.