La Casa Blanca afirmó que responderá “relativamente pronto” a la petición para que el cantante canadiense Justin Bieber sea deportado, dado que ha superado las 100.000 firmas necesarias para tener que pronunciarse al respecto.
Esa respuesta “se producirá como es nuestro compromiso cuando se supera el umbral” de firmas y llegará “relativamente pronto”, indicó en su rueda de prensa diaria el portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney, al ser interrogado sobre el tema por un periodista de NBC.
Más de 224.000 personas habían firmado hasta el pasado 31 de enero en la petición colgada en la sección "We The People" de la página oficial de la Casa Blanca.
“Nosotros, el pueblo de Estados Unidos, sentimos que no estamos bien representados en el mundo de la cultura pop. Nos gustaría ver al peligroso, insensato, destructivo y consumidor de drogas Justin Bieber deportado y con su permiso de residencia revocado”, dice la petición.
El cantante, de 19 años, “no sólo es una amenaza para la seguridad de nuestro pueblo, sino que es una mala influencia para nuestros jóvenes. Nosotros, el pueblo, queremos que Justin Bieber salga de nuestra sociedad”, añade la petición, creada por un ciudadano anónimo de Detroit el 23 de enero de este año.
La sección “We The People” (Nosotros, el pueblo) funciona desde 2011 y centraliza las inquietudes, peticiones y preguntas ciudadanas a la Administración.
La semana pasada, Bieber fue arrestado en Miami por conducir bajo la influencia de sustancias tóxicas, velocidad excesiva y resistencia a la autoridad.
El ídolo juvenil salió en libertad tras comparecer ante el juez a través de videoconferencia y pagar una fianza de 2.500 dólares. Además, se presentarán formalmente los cargos en su contra el 14 de febrero, en una audiencia a la cual no tiene obligación de acudir en persona.
Bieber ingirió marihuana y el antidepresivo Xanax (Alprazolam) poco antes de su arresto en Miami, según un informe toxicológico preliminar dado a conocer por las autoridades policiales estadounidenses.
El artista suma una serie de escándalos desde hace unas semanas, el último de los cuales ocurrió el 29 de enero cuando la Policía de Toronto (Canadá) lo arrestó en respuesta a un demanda pendiente por estar acusado de agredir al conductor de su limusina el 30 de diciembre de 2013.
Después de presentarse de forma voluntaria ante la Policía canadiense, Bieber fue puesto en libertad tras haber permanecido durante casi dos horas en una comisaría del centro de Toronto y deberá presentarse ante un juez el 10 de marzo.
A principios de enero, la residencia de Bieber en California fue registrada por la Policía tras una denuncia de uno de sus vecinos por vandalismo. Durante dicho operativo, los oficiales hallaron drogas en la mansión del cantante.