A pesar de que a veces roza el fundamentalismo y pierde la objetividad, Paloma Valencia es uno de los dirigentes del Centro Democrático de mostrar. A diferencia de por ejemplo, la señora Cabal, fanática, imprudente y cargada de odios, Paloma Valencia exhibe argumentos juiciosos en sus debates así no los compartamos.

Escuchada desapasionadamente su intervención sigue su línea ideológica y dice unas cuantas verdades:

1. Llama "presidente" a Uribe

Esta es una costumbre curiosa que en los medios también se da. En la W, por ejemplo, Julio Sánchez, cuando entrevista expresidentes, los llama por su antiguo cargo como forma de admiración, respeto o lambonería, vaya uno a saber. Y Paloma recuerda su título por una sencilla razón: es su líder.

2. Están creciendo ideológicamente

Nada que reprochar a esto porque es la verdad. Antes, era un grupo escogido a dedo por Uribe y ahora, después del trajín legislativo y la línea ideológica trazada por su fundador, han ido construyendo su propia imagen de país, lo cual es sano para la democracia, a diferencia de otros partidos que sólo funcionan al vaivén de las urnas. Esto tiene que aplaudírsele al CD. Son un partido de derecha ortodoxa, cuyas creencias se fundan en el antiguo lema del conservatismo extremo: tradición, familia y propiedad.

3. LLevan siete meses trabajando en los proyectos que van a presentar y tienen más coherencia política que los demás partidos, con grupos de trabajo sobre los distintos temas que abordan.

En las reseñas que se han hecho del congreso, se ha destacado al CD como el partido más juicioso y disciplinado y cada proyecto de ley presentado es fruto de investigación y análisis. Se esté de acuerdo o no con sus planteamientos hay que reconocerles que son estudiosos y coherentes con su ideología. Infortunadamente, los demás partidos no pueden decir lo mismo. Con el paso de los años se volvieron un salpicón de intereses regionales, donde cada quien tira para su lado, contradiciéndose todo el tiempo. ¿Alguien sabe cuál es la ideología de a U o de Cambio Radical? Proponen y aprueban según la temperatura burocrática del momento. Los conservadores no se quedan atrás. cuántos puestos me ofreces, cuántos votos te doy. El liberal trata de renovarse, pero los caciques con Serpa a la cabeza, lo mantienen atado al Frente Nacional. Quizás el Polo tenga más coherencia aunque las dos vertientes en que se encuentra dividido tiran la una hacia un socialismo moderno y la otra hacia el fundamentalismo marxista-leninista. ¿Y los verdes? De tumbo en tumbo. No tienen idea de donde están parados. Y si nos vamos a los proyectos de la Unidad Nacional, son el fruto de trabajo de los equipos del gobierno que los parlamentarios se limitan a recoger (con excepciones) para presentarlos a sus colegas. Pobreza ideológica, pobreza investigativa, subordinación al ejecutivo, salvo las envidias entre ellos por las prebendas recibidas que suscitan rebeliones al estilo de los taxistas de Bogotá.

4. El partido conservador es una agrupación de microempresas electorales.

Totalmente de acuerdo, extensivo a los demás partidos. La rapiña regional y la fidelidad de una parte al gobierno funciona con el poder regional. Cada cacique anda con calculadora en mano, sumando y restando apoyos, multiplicando poder y dividiéndolo entre su círculo íntimo. Si uno cae, la esposa, el cuñado, el primo o el hijo ocupan su puesto para conservar el poder y sus prebendas. En estas elecciones, por lo visto, el CD entró a la feria. En su afán por restarle poder a la Unidad Nacional y preparar el terreno para una candidatura exitosa a la presidencia en 2018, la feria de los avales y las alianzas los pone al mismo nivel de los partidos que critican. Su pureza ideológica se pierde en las regiones. Un ejemplo es Fabio Valencia Cossio en Antioquia, uno de los más oscuros politiqueros al que le importa un comino la ideología. Su misión es acrecentar su poder sin importar aliados ni trampas.

5. La turbiedad del partido conservador

Es cierto que Paloma es una recién llegada al entorno uribista y no ha sido partícipe de su oscuro pasado, lo mismo que algunos de los nuevos parlamentarios de su agrupación, pero el CD tiene un gran rabo de paja. Es tan corrupta la política nacional que como en el relato bíblico, encontrar un justo entre tanta podredumbre es una proeza y el entorno de Uribe es un ejemplo de la cloaca criolla. Paloma Valencia es una de las pocas que se salvan en el CD.

En resumen, vehemente, inexperta, ingenua, pero inteligente y con ganas de hacer las cosas bien de acuerdo con su ideología conservadora, hay paloma para rato. Infortunadamente, como el viejo dicho, el que anda con la miel algo se le pega, corre el riesgo de perderse en los oscuros vericuetos del poder.

Al margen: cuando se quiere enfrentar al adversario ideológico las armas son los argumentos, los hechos, las verdades, la información, la objetividad y no el ridículo sainete en que convirtieron el video. Desagradable por lo chabacano y su pobreza creativa. Igual reproche merece el cruce de expresiones insultantes entre los foristas.