Cuba hacia el 2015. Hipótesis cuerdas de la locura global imperialista.
 

Redacción Cuba
24.Dic.2014 :: América Latina

¿Qué hay detrás de unas relaciones entre Cuba y los Estados Unidos sin el levantamiento del bloqueo por parte del gobierno angloestadounidense? ¿Huele a petróleo caro?

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Aun experimentamos la postprandial de la sorpresa y la posterior expectativa debido a las declaraciones que driblean entre La Habana y Washington durante esta última semana; y tras el canje de prisioneros entre ambas partes, que ha sido lo único efectivo dentro de este proceso que evidentemente forma parte de la llamada guerra de sexta generación, hacemos un breve repaso por los media intentando descubrirle la “quinta pata al gato”.
Y descubrimos algunas imprecisiones provenientes de, por supuesto, referentes como la de costumbre BBC, Mundo.
Chirinos le atribuye a Obama la “iniciativa” de manera tal que da la impresión de que el presidente de los EE.UU. era el único que sabía o se acordaba de la persistencia durante 16 años de las protestas internacionales, apoyando al gobierno cubano contra la encarcelación injusta de los Cinco Héroes Antiterroristas Cubanos –de los que, por cierto, Chirinos pasa concentrándose en el “desvalido” Alan Gross. Ahora toda iniciativa posible es de Barack Hussein Obama, en un esfuerzo humanitario por rescatar al anciano desvalido al que la “tiranía comunista cubana” mantenía injustamente en cautiverio tras apresarlo cuando distribuía obsequios a la comunidad judía en La Habana, de parte de la Usaid:
“El deterioro de la salud de Alan Gross, el contratista estadounidense apresado y condenado en Cuba a 15 años de prisión por “delitos contra el Estado” [así mismo entre comillas], puso urgencia a la vieja idea de Obama de introducir cambios en la política hacia la isla [¡oh! La Iluminación de Obama en interacción con San Lázaro]. La posibilidad de que Gross muriera en una cárcel cubana habría colocado un obstáculo difícil de superar para la Casa Blanca, que desde hace más de un año autorizó contactos secretos a través de Canadá y el Vaticano, dos cancillerías con cierto ascendente sobre La Habana. […] Washington se cuidó mucho de no hacer ver que la liberación de Gross se produjo a cambio de la de los tres espías condenados en EE.UU. [por supuesto, las derrotas no tienen padre]. Y que La Habana proponía como moneda de cambio. Los espías fueron liberados a cambio de un igual, un espía estadounidense encarcelado desde los años 90 cuyo nombre no ha sido difundido aún, y no de un civil, lo que habría exacerbado aún más las críticas de quienes cuestionan que se negociara con “terroristas”, como definen al gobierno de los Castro [los terroristas somos los cubanos]. […] Al final, Gross fue la cara de una movida diplomática [¿Gross y no los Cinco Héroes Cubanos?], que explotó el diario The New York Times con una seguidilla de editoriales en los que proponía precisamente un cambio de enfoque en la relación bilateral.” (1)
El deterioro de la salud del contratista espía de la Usaid venía quebrantándose desde mucho antes; Obama negoció cuando y bajo la circunstancia que él entendió una vez que tropezó con el resultado de las elecciones parciales en los Estados Unidos donde perdió toda posibilidad de control sobre los republicanos en ambas cámaras, se había activado el sistema automático “mata negros” de la policía en las calles de algunos Estados de la unión, el denominado Ejército Islámico se extendía más allá de donde la Inteligencia angloestadounidense le indicaba, descubriéndose una muy empática relación alternativa con Erdogán, Siria se hacia imposible de desarticular por la fuerza, la expansión del intercambio comercial de Rusia y China se extendía hacia Latinoamérica, Rusia observaba inmutable los movimientos de la OTAN y la Unión Europea, de parte de los Estados Unidos contra sus fronteras. Y sobre todo, la nueva integración regional Latinoamericana y Caribeña se erigía sobre sus propios pies, sin intrusismos posibles por parte de los Estados Unidos y Canadá. Había que aislar a Venezuela de Cuba y del resto de los países del ALBA-TCP. La dichosa ley para solucionar el problema de los cientos de miles de emigrantes latinos cada vez, merced a los ultraconservadores, se veía más lejos.
Todo parece indicar que ha sido un favor a Cuba, porque a los Estados Unidos no les hace falta alguna el intercambio comercial con la isla del Caribe.
“La Cámara de Comercio de ese país estima que se pierden al menos US$ 1.200 millones en negocios que no se pueden hacer con Cuba debido a las leyes del embargo y aunque para la economía estadounidense no es una cifra grande, representa una buena porción de la cubana.” (2)
El señor Donahue de la Cámara de Comercio se presentó en La Habana hace unos meses y no fue precisamente para hacerle una visita de cortesía a Gross. Sino para “cabildear” acerca de esa bicoca, que no es una cifra grande, y que por cierto incluye una posible prospección petrolera. Al parecer, según Chirinos, los EE.UU. prefieren traerlo por barco desde el Medio Oriente, así disfrutan del viaje por medio mundo. En vez de enredarse con la “atrofiada” economía cubana, a la que la guerra económica impuesta por el bloqueo le ha dado “oportunidades” insólitas para desarrollarse. Y que los cubanos no saben aprovechar.
Existe algo sórdido detrás del movimiento gatuno del gobierno/presidente de los Estados Unidos para sabotear la nueva integración latinoamericana, el real peligro para Obama está en que el movimiento y la decisión tomada con Cuba no salga bien al intentar distanciar a Cuba de Venezuela, haciendo “talco” a la nueva integración regional sin los EE.UU. ni Canadá, que debe haber auspiciado la negociación entre Cuba y los EE.UU. porque también sale ganando con este último objetivo contra dicha nueva integración regional. ¿La caída de los precios del petróleo ha sido y es una “casualidad” que casualmente perjudica a Rusia y Venezuela Bolivariana; y los EE.UU. serán el proveedor de Cuba a partir de enero del 2015? ¿Se ha visto “chiste” más sangrón? Y dale con Chirinos:
“Del lado cubano, algunos [¿quiénes?], consideran que la situación de deterioro económico que enfrenta Venezuela, que en los últimos quince años ha sido el sostén más importante de la economía cubana, también puso urgencia a los contactos [¿de Obama?].” (3)
Ahora escucharemos barruntar en público a los Mesa Lagos indicando desde control remoto las precisiones de lo que debe ser la economía cubana siguiendo los designios del libre mercado en la desregulación y falta de intervención estatal; aguardando que desde el interior de la isla brote un salmo de alabanza al sistema capitalista angloestadounidense. Porque según Chirinos, la caída de los precios del petróleo pone al gobierno del presidente Nicolás Maduro y a la llamada Revolución Bolivariana en aprietos internos y, sobre todo sin excedentes en un previsible corto plazo que destinar a los socios cubanos. Para que arriben las “buenas” relaciones bilaterales con “embargo”.
El presidente cubano Raúl Castro ha alertado de que a partir dela mejoría de las relaciones diplomáticas entre Estados Unidos y Cuba, el asunto del bloqueo podría complicarse más. Depender de la buena voluntad de los gobiernos angloestadounidenses es un quimera y de las más incómodas.
Desde el litoral oeste de La Habana revolucionaria, marxista, socialista, martiana y bolivariana24/12/2014.

(1) Carlos Chirinos. La iniciativa de Obama para normalizar relaciones con Cuba: ¿por qué ahora? BBC Mundo. 18 diciembre 2014,
ht tp://w w. bbc.co.uk/mundo/noticias/2014/12/141218 _por_que_ahora…
(2) Ibídem.
(3) Ibídem.