Óscar Iván Zuluaga aceptó haberse reunido con el 'hacker' Sepúlveda

Si Oscar Iván fuera Óscar Iván y no el mandadero de Uribe, habría que mirarlo con atención de cara a la campaña presidencial. Es un tipo inteligente que manejó bien las finanzas del Estado. Pero su falta de criterio al unirse a un movimiento donde la corrupción es un dogma, donde el "Todo se vale" su principio fundamental, donde no se mueve la hoja de un árbol sin el permiso de su líder,no invita a creer en él.

No lo creo capaz de urdir el enjambre de canalladas en que está empeñada esta campaña. Se necesita un tipo sin entrañas, resentido y venenoso, para hacerlo. Pero el que permanezca a su lado, el que haya volteado la cabeza cuando lo escogieron en una convención amañada, prohije las calumnias que a diario produce el movimiento que lo apoya y ahora, para salvar su maltrecha aspiración, finja no conocer a un delincuente y luego, ante las evidencias, termine aceptando que lo visitó en su guarida, nos muestra a un mentiroso.

Oscar Iván, infortunadamente, dejó de ser el tipo decente de sus comienzos como alcalde de Pensilvania. El poder lo corrompió como en el caso de Interbolsa y ahora sólo es una caricatura al servicio de su pervertido jefe. Una lástima.