El pueblo venezolano conmemora este 1º de Mayo con una conquista histórica: la nueva Ley Orgánica del Trabajo, firmada este lunes por el presidente Chávez, a la que definió como “una ley liberadora, producto de un largo proceso de luchas de las trabajadoras y los trabajadores”.
Comienza así a saldarse una vieja deuda de la revolución bolivariana. A contrapelo de lo que ocurre en gran parte del mundo, la flamante legislación, decretada vía Ley Habilitante (instrumento legal que permite al presidente promulgar leyes), contempla, entre otras, las siguientes reivindicaciones:

- Se extiende el permiso prenatal a 6 semanas y el postnatal a 20 semanas (en total, seis meses y medio). La normativa hace extensivo este derecho a todas las mujeres, trabajen en el sector formal o informal, e incluye también los casos de adopción.

- La inamovilidad laboral para las madres y los padres de un niño recién nacido se incrementa de uno a dos años.

- Se elimina la figura de la tercerización laboral.

- Se reduce la jornada laboral de 44 a 40 horas semanales, estableciendo “la obligación y el derecho de los trabajadores de dos días continuos de descanso”.

- Se incluye la vuelta a la retroactividad de las prestaciones sociales, para que éstas sean calculadas en base al último sueldo, aspecto que había sido suprimido en la ley de 1997.

- Retorna también el pago de la doble liquidación en casos de despidos injustificados.

- Además contempla otros aspectos como la formación de las y los trabajadores (“toda fábrica debe ser una escuela”, sintetizó Chávez durante la promulgación).

Pueblo legislador

“Si ustedes me lo piden, hagamos una nueva Ley del Trabajo. Es una necesidad y una deuda social", había proclamado Chávez en noviembre del año pasado durante el acto de conformación de la Central Bolivariana Socialista de Trabajadores. Ese día prometió promulgarla para el 1º de mayo, y pidió: “La nueva ley tiene que surgir del debate de los trabajadores de la ciudad, del campo, del mar, de todos los trabajadores y trabajadoras”.

Así comenzó el proceso de discusión y debate, que incluyó unas 1.800 asambleas populares en todo el país y que se reflejó en las más de 19 mil propuestas elaboradas desde las bases. La legislación finalmente fue sistematizada y redactada por una comisión nombrada por el presidente y conformada por diputados, dirigentes sindicales y referentes de organizaciones políticas.

“Sin la participación de los trabajadores, esto hubiese sido imposible –sostuvo Chávez durante el anuncio-. Así como no hubo nunca antes en 200 años de historia una Constitución que hubiese sido debatida con tamaña profundidad y amplitud, estoy seguro también que no hubo nunca antes una Ley del Trabajo que hubiese sido tan discutida y debatida como ésta”.

Para todos, todo

La naciente Ley Orgánica del Trabajo nace acompaña de otras iniciativas del gobierno venezolano relacionadas con los derechos laborales. El sábado pasado, se anunció la aprobación de la reforma de la Ley del Instituto Venezolano de los Seguros Sociales, que va a permitir la incorporación al sistema de seguridad social de las y los trabajadores informales.

“Esto significa que ahora los pescadores, campesinos, buhoneros (vendedores ambulantes), mensajeros, abogados, odontólogos, todos los trabajadores informales y todos los trabajadores por cuenta propia podrán cotizar en el seguro social y tener una pensión en el futuro”, explicó el vicepresidente Elías Jaua.

Otro anuncio reciente fue el incremento del salario mínimo en un 32,25%, muy por encima de la inflación, medida que incluye también a jubilados y pensionados. En Venezuela, el porcentaje de personas que percibe el sueldo mínimo disminuyó del 65% en 1998 al 21% en la actualidad. En los últimos 13 años, además, el salario mínimo creció 13% por encima de la inflación acumulada y la proporción del empleo formal aumentó del 47,6% al 59,1%.

En cuanto a los desempleados, se creó a fines de 2011 la “Gran Misión Saber y Trabajo”, que plantea crear 3 millones de empleos en siete años. A través de este programa, en los tres primeros meses del año ya se han incorporado al trabajo 260 mil personas.

Justicia Social

Días pasados, Chávez confirmaba que firmaría la ley “con esta zurda conducta mano”. Ayer, al momento de hacerlo repetía la dedicatoria “por todos los mártires” y agregaba junto a su rúbrica la leyenda “justicia social”. Segundos después, se le quebraba la voz mientras clausuraba, sin duda, un momento histórico (poner linc).

Un rato antes había citado a Carlos Marx afirmando que “el capitalismo termina convirtiendo al trabajador en un esclavo”. Y describía a esta ley como una ley para la Historia, una ley liberadora, y como “un paso trascendental en la transición hacia el socialismo”.