DeNunCianDo - Los conservadores migran del uribismo al santismo

Los conservadores migran del uribismo al santismo

La plana mayor del Partido Conservador se reunirá en Villa de Leyva esta semana en un foro ideológico, que podría convertirse en el florero de Llorente para su grito de independencia frente a Álvaro Uribe. Y que ha estado antecedido por un inusual protagonismo de los conservadores en los medios de comunicación en los últimos días.

Como lo dijo La Silla Vacía hace unos meses, el Partido Conservador vive hace rato una crisis de identidad que se manifiesta en una crisis ideológica y de liderazgo. Un congresista conservador lo explicó con una frase: “el partido se volvió una bacteria amorfa gigante, sin jefes ni ideología clara”.

Juan Manuel Santos está invitado al foro ideológico de Villa de Leiva, por protocolo. La invitación no solo recuerda que los azules están en la Unidad Nacional, sino que Santos está ejerciendo magnetismo sobre sus filas.
http://img571.imageshack.us/img571/3520/20468485.jpg
Álvaro Uribe parece estar perdiendo influencia dentro del Partido Conservador. Pero su influencia en las campañas locales de este año puede desmentir esta impresión.

El Senador José Darío Salazar, actual presidente del Directorio Nacional Conservador, busca que su partido obtenga buenos resultados en las elecciones de este año. También lo guía en su disyuntiva entre apoyar la ex presidente Uribe o al presidente Santos y su agenda de reformas. “Si no alcanzamos a encontrar un caudillo democrático, una persona a quien el país acepte y respete, y que a su vez respete la Constitución y la ley, porque de no hacerlo sería un proyecto de tirano, vamos hacia la destrucción," le dijo el senador Roberto Gerlein el jueves pasado a El Espectador.

Juan Gabriel Uribe, director de El Nuevo Siglo y cercano a Andrés Pastrana, discrepa, pero no mucho. Le dijo a La Silla Vacía que el partido sí tiene una ideología clara pero que el problema es que ésta no ha sido respetada, especialmente al “apoyar aventuras personalistas, como la reelección”.

Ante esta falta de identidad ideológica del partido, el foro de Villa de Leyva tiene especial importancia. El partido quiere llegar a consensos de fondo. Juan Gabriel Uribe, el senador Juan Mario Laserna y Carlos Alberto Zuluaga, presidente de la Cámara de Representantes, consultados por La Silla Vacía, están de acuerdo en que el partido requiere reforzar una posición ideológica propia y convertirse en un actor propositivo de la Unidad Nacional. Los conservadores no quieren que Juan Manuel Santos siga gobernando con ideas liberales, o por lo menos, no solamente con ellas.

Es por eso que el foro tiene una agenda ambiciosa. Según los documentos preparatorios, debatirán asuntos como la política económica del país en pequeñas comisiones y luego estas propuestas serán discutidas en una plenaria, donde se tomarán decisiones. Y esas decisiones, esperan algunos, se convertirán después en proyectos de ley con el sello del partido. Pero, como subraya Zuluaga, siempre dentro de la Unidad Nacional de Santos.

En el foro estará la plana mayor: expresidentes, exministros, ministros que simpatizan o pertenecen al partido, académicos y formadores de opinión. La única representación de los políticos de carrera serán los congresistas. Es decir, estará la élite del partido, que en buena medida es la que más se identifica con Santos. En cambio, no estarán las bases que son principalmente uribistas.

Por esto se corre el riesgo de que ocurra lo que dijo un joven conservador a La Silla Vacía: que “dejen a un grupo de 'ilustres' que redacten un documento, al que después no le paran bolas”.

Y es que la mayor parte de la fuerza electoral del partido está en sus maquinarias políticas locales, y no en la cúpula nacional. "El partido parece más bien una federación de maquinarias políticas. Y las maquinarias no tienen ideología”, dijo un político conservador.
El mensaje político

Así que para algunos conservadores, el foro no es tanto una oportunidad para una definición ideológica que impregne a todos los azules, sino una ocasión para plantear el pulso político entre las dos tendencias que existen dentro del Partido.

Estas se pueden resumir como una reformista, cercana al presidente Santos, en general pastranista y noemicista; y otra uribista, más cercana a los poderes locales y que apoyó a Andrés Felipe Arias en la consulta conservadora de 2009. Esas dos tendencias llegan al foro a medir sus fuerzas. Como dijo un funcionario del Partido a La Silla Vacía, “allá en el foro seguramente todos pondrán las cartas sobre la mesa”.

El representante Zuluaga dice que en el partido no hay dos tendencias, “todos estamos juntos apoyando al presidente Santos y comprometidos con la Unidad Nacional”. Juan Gabriel Uribe, entre tanto, sí entiende que hay dos tendencias. Pero, en su criterio, “la línea que podemos llamar de conservadores uribistas ha ido perdiendo fuerza”. A eso parece estar jugando Pastrana con sus últimas declaraciones públicas, a mostrar su liderazgo dentro del partido y a empujarlo hacia el santismo.
El empujoncito de Uribe

Sin embargo, las cosas no son tan obvias. Muchos de los políticos conservadores locales le deben a Uribe parte de su votación, y tomarse la foto con él puede aún ser fundamental en sus campañas. Además, un amplio sector del partido gozó de las mieles del poder en los ocho años de gobierno de Uribe, cuando eran un pilar de un gobierno que los consentía en burocracia, y ahora se sienten incómodos porque tienen que compartir ese papel no sólo con el partido de la U, sino con sus rivales políticos de Cambio Radical y el Partido Liberal. La torta es igual de grande pero ahora hay más grupos que tienen tajada.

En vísperas del foro de Villa de Leyva y del congreso programático que se realizará en marzo para aterrizar las discusiones de esta semana, la tendencia uribista del partido no se ha quedado quieta. Las declaraciones del senador Salazar, en las que pide al gobierno una mayor preocupación por la seguridad, son un ejemplo de que en el Partido no todos están totalmente de acuerdo con las políticas de Santos. El viernes pasado, tres delfines conservadores hablaron duro contra Santos, en una carta dirigida, precisamente, al foro ideológico. Además, a nivel electoral, los conservadores ya dijeron que buscarán preferentemente alianzas con el Partido de la U, lo que marca su cercanía con el uribismo.

Pero las respuestas del expresidente Pastrana, portavoz de quienes apoyan a Santos y quien, además, busca consolidar su liderazgo dentro del partido, no han sido menores. La semana pasada se enfrentó fuertemente al senador Salazar, a quien rotuló de "Caballo de Troya del doctor Uribe en el conservatismo"y le solicitó que no criticara al gobierno con afirmaciones “propias del jefe de la oposición". En entrevista con El Espectador fue más lejos y habló de los "adláteres en el conservatismo" del uribismo y los puso en la orilla opuesta de "muchas caras conservadoras, frescas e incontaminadas en su gobierno [de Santos] que son luz de esperanza para el futuro del conservatismo".

El gobierno de Santos tiene con qué afianzar el deslizamiento de los azules. En respuesta a la carta de Salazar, mañana martes se van a reunir los miembros del Directorio Nacional Conservador con el ministro Rodrigo Rivera y con los comandantes de las Fuerzas Militares para escuchar las criticas y propuestas de los conservadores. Y el miércoles, Santos está invitado por el Partido a inaugurar el foro ideológico.

Pero, sobre todo, el presidente es quien maneja el presupuesto y la burocracia. Y en un año electoral, eso le da poder suficiente para traer a los azules a su corral. Aunque Uribe jugará sus cartas para evitarlo, el que los conservadores hayan preferido no asistir a sus talleres democráticos es una muestra de que la migración ya está en camino.