Poco a poco se va estructurando el equipo de Colombia y comienzan a surgir figuras que se acoplan a lo que quiere Pekerman, cumpliendo bien el papel encomendado. Macnelly es una buen incorporación no solo por la calidad de juego exhibida en el medio campo, sino por mantener su buen nivel en los diferentes partidos.

Cuadrado es otra de las gratas revelaciones de este 2012. Tres años en el fútbol italiano puliendo sus condiciones (velocidad, desborde por la banda derecha, buen manejo del balón, asistencias y cuota goleadora) lo han llevado a constituirse en una pieza fundamental del engranaje de la selección.

Convertido en la figura de Colombia en el amistoso contra Brasil, este jugador de la Fiorentina, a sus 24 años sigue creciendo en su club y en la selección.

Dos piezas fundamentales que se unen a las demás para ir conformando un equipo sólido, capaz de clasificar al Mundial y tener una buena actuación acorde con sus capacidades en Brasil 2014.

Cita:

PARTIDO AMISTOSO EN NEW JERSEY (1-1) Cuadrado y Macnelly, la velocidad y la inteligencia de Colombia Ambos fueron piezas clave del partido en el que Colombia le jugó sin complejos a Brasil DANIEL ARMIROLA R. 15/11/12 - 20:53. Colombia protagonizó un espectacular partido contra un grande del fútbol, el pentacampeón Brasil (1-1), y le jugó en igualdad (incluso en varios momentos en superioridad) de condiciones. Los Cafeteros dijeron en la cancha que están dispuestos a pelearle a cualquier equipo grande para lograr sus objetivos. Eso sí, siempre jugando desde el respeto a la historia de dichos equipos, pero sabiendo que el fútbol se escribe a diario en la gramilla. Las figuras que proyectaron a Colombia a jugarle sin complejos a la poderosa Brasil tienen claro nombre: Juan Guillermo Cuadrado y Macnelly Torres. Ambos fueron vitales en su posición. El primero, sin lugar a dudas, el más mentado. Fue el autor del gol Cafetero en el primer tiempo y le pintó la cara al lateral que estuvo a cargo de su marca durante todo el partido, Leandro Castán. El gol fue una verdadera pintura, en donde también participó la segunda figura, Macnelly Torres, tocando el balón con otro talentoso, James Rodríguez, que habilitó a Cuadrado para que sentenciara con soberbio remate. La jugada no fue casualidad alguna en el partido. Con un seleccionado de Colombia que jugaba con cojones, un penalti no pitado sobre Pablo Armero, y diversas llegadas en el primer y segundo tiempo, se pudo haber ganado el partido. Pero Brasil también mostró su jerarquía y tuvo buenas chances en el arco defendido por David Ospina. Todas ellas apelando a sus grandes individualidades: Kaká y Neymar. El factor Neymar fue vital para los 'canarinhos', que lograron el empate en el segundo tiempo luego de una notable jugada del crack del Santos. El árbitro, de paupérrima actuación (por supuesto a favor del histórico Brasil), pudo haber ayudado para el segundo gol brasileño en un penalti que equivocadamente señaló. La justicia divina dictaminó que Neymar errara el penal y el partido siguió su rumbo merecido. Colombia desde entonces plasmó su superioridad en la segunda parte y tuvo más opciones en el arco defendido por Diego Alves. El partido finalizó con dos figuras de parte de los Cafeteros, Macnelly Torres, quien fue fundamental en el engranaje colombiano, y Juan Guillermo Cuadrado, quien puso a disposición de los Cafeteros el gran talento que tiene a la Fiorentina de Italia peleando los primeros lugares de la Serie A. Este último dijo del importante partido, en el que destacó: "Me gusta mucho el fútbol brasileño. Gracias a Dios que me dio una capacidad muy buena y la pude demostrar. Entonces tengo que aprovechar ese talento día a día". Su talento es el desborde y la velocidad, y dejó claro con su partido ante los brasileños que es un activo invaluable para los Cafeteros en ataque. Asimismo, Macnelly Torres sigue demostrando por qué es esencial en la elaboración de juego de Colombia y en el manejo de los tiempos del partido. La velocidad y la inteligencia, dos virtudes al parecer irreconciliables, pero que gracias a estas dos figuras Colombia demuestra tener como cartas dialécticas a favor.

Fuente: Marca