¿Qué pasa con el Real Madrid? Tiene una de las mejores plantillas del mundo, un recio respaldo económico y un entrenador que se lo ha ganado todo. Pero, aunque continúa su ascenso en la Liga, su participación en Europa deja mucho que desear por su calidad y prestigio.

Todo empieza en las lesiones. Sus elevadas exigencias dentro y fuera de España han sobrecargado a sus jugadores y las bajas amenazan con convertirse en epidemia. ¿Por qué? El Madrid no tiene una plantilla corta. La razón habría que buscarla en Mourinho.

El luso pone por delante su prestigio y quiere ganarlo todo pero sobre seguro, sin arriesgar. De ahí que no rote su plantilla, exigiendo al máximo a la mayoría de sus jugadores. Su apetito desmedido no lo deja probar a los jugadores de la cantera y prefiere improvisar en el campo con lo que tiene, rotando posiciones que no pocas veces le hacen pasar malos momentos.

Mourinho no es un formador como Simeone que aprovecha algunos partidos para ir probando a los del filial con agradables sorpresas, dejando descansar a sus mejores titulares. Y Cristiano, Özil, Ramos... no pueden hacerlo todo y si a eso se le agrega un Modric que no despega, junto con las ausencias, al final queda un Madrid remendado que pierde su lustre.

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Europa y las costuras del Madrid Los dos partidos con el Borussia revelan grietas en el equipo, como las de Modric y los parches defensivos de Mourinho EL PAÍS Madrid 8 NOV 2012 - 01:16 CET55 El cruce con el Dortmund ha dejado al aire algunas costuras del Real Madrid, que en el cómputo global de ambos encuentros no se ha mostrado por encima del cuadro alemán. Nadie ha salido peor parado que Modric, que flota en el equipo, sin peso alguno. Ante el Borussia perdió crédito ante la hinchada, que mide a los suyos en las grandes citas, no en los trámites ligueros. Mourinho no acierta con el jugador que debe gravitar junto a Xabi Alonso, por más que el martes Essien añadiera pujanza tras su salida por el croata. Solo Khedira, lesionado, parece no despertarle duda alguna. Tampoco la defensa ha terminado por enhebrar desde la baja de Marcelo. Lejos de recurrir al filial, a Nacho o Casado, el técnico portugués ha preferido alterar el ecosistema con Essien por el costado izquierdo en Alemania y Arbeloa por su lado menos natural en el segundo duelo con el Borussia. Por ambas vías sufrió el Madrid. Mourinho dispuso de tres de sus defensas titulares (Arbeloa, Ramos y Pepe) y le hubiera bastado con un lateral izquierdo puro, por muy canterano que sea. Una cantera a la que el entrenador seguramente deba recurrir para el partido del domingo en Valencia ante el Levante, para el que serán bajas los dos delanteros principales, Higuaín y Benzema. Tras el choque con los alemanes, Mourinho admitió que no convocó a Morata, del filial, porque el Castilla le había pedido para su duelo en Huesca al no poder contar con otro atacante, Jessé, sancionado. "Fue culpa mía", convino Mourinho. Precisamente, el Levante, que el curso pasado ya derrotó a los blancos en su feudo, es un equipo de la Liga Europa, competición que el portugués minusvaloró en sus declaraciones al término del encuentro de Champions: “Prefiero partidos así que otros que parecen de Europa League”. El técnico obvió que en la última edición, el Real Madrid alcanzó las semifinales ante rivales como el CSKA de Moscú el Apoel de Nicosia. Pese al empate con el Borussia, el equipo madridista tiene la clasificación matemática a solo dos puntos cuando le resta enfrentarse al City en Manchester y recibir al Ajax. Más complicado tendrá ser primero de grupo, posición para la que el Dortmund depende de sí mismo. Su visita a Manchester puede resultar más fácil de lo esperado a tenor de las palabras de Roberto Mancini tras el empate a dos goles con el Ajax: “Desgraciadamente, sumamos solo un punto y ahora creo todo ha acabado en la Liga de Campeones”. Matemáticamente, los citizens todavía tiene posibilidades de clasificarse para los octavos de final de la Champions si derrotan a los madridistas en Manchester y a los alemanes en Dortmund, aunque después deberán esperar a que los holandeses caigan en Alemania y logren, al menos, un punto en el Bernabéu. Mancini incluso se permitió bromear con las opciones de su equipo: “Si ganamos estos dos partidos creo nuestro destino será ganar la Liga de Campeones”, indicó irónicamente, para luego subrayar que “quizá Borussia y Real Madrid son mejores que nosotros e, incluso, el Ajax también”.

Fuente: El País