DeNunCianDo - Los 10 traidores más famosos del mundo

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Los primeros registros señalan a Judas Iscariote. Por su parte, Antonio López de Santa Anna vendió casi la mitad del territorio nacional mexicano.

La traición es capaz de romper importantes lazos y obligaciones contraídas hacia algo o alguien, destaca el blog Conspiraciones. La Real Academia de la Lengua define esta palabra como la falta que se comete al quebrantar la fidelidad o lealtad que se debe guardar o tener.

A lo largo de la historia han existido grandes traidores. Te los presentamos para que conozcas sus historias y te cuides de quien te puede llegar a dar una puñalada "trapera" por la espalda.

1.- Judas Iscariote. Considerado el traidor más grande de todos los tiempos. Por 30 monedas, Judas dio a conocer a los miembros del Sanderín el lugar en el que podían capturar a Jesús sin que sus seguidores intervinieran. En el evangelio según San Lucas se menciona que el discípulo fue guiado por Satanás para cometer la traición, señala elrincondeljudas.

"Entonces Satanás entró en Judas, llamado Iscariote, que era del número de los Doce; y fue a tratar con los sumos sacerdotes y los jefes de la guardia del modo de entregárselo" mencionan las escrituras. Judas fue acosado por el remordimiento y decidió terminar con su vida. Se ahorcó, destaca la enciclopedia católica.

2.- Adán y Eva. En el Antiguo Testamento se dice que Dios creó a una mujer para dar compañía al hombre que había formado. Para probar la fidelidad y obediencia de ambos, les prohibió comer el fruto del árbol de la ciencia del bien y el mal.

"Satanás, que no conocía la mente de Dios, y procuraba destruir sus planes, se acercó a Eva en el Jardín del Edén y la tentó a comer del fruto del árbol de la ciencia del bien y del mal. Le aseguró que no moriría, sino que ellos serían... como dioses", destaca Moisés 4:11.

Eva cedió a la tentación y luego incitó a Adán a comer del fruto prohibido. Dios los expulsó del paraíso por su desobediencia y los castigó con la muerte espiritual y la muerte física, detalla allaboutcreation.org.

3.- Brutus. Marco Junio Brutus era muy querido por el emperador Julio César en el año 44 antes de Cristo. Pero el descontento con la República y sus ambiciones políticas lo motivaron a asesinar al Cesar. Al ver el puñal en la diestra de Bruto, Julio César exclamó: "Tú también, hijo mío" y no opuso resistencia, menciona e-torredebabel.com.

Después del asesinato, Brutus tuvo visiones que lo atormentaban. En el año 47 a.C., durante la guerra en contra de Marco Antonio y Octavio, al verse derrotado, decidió quitarse la vida al atravesarse su propia espada y decir: "Virtud, sólo eres un hombre".

4.- Antonio López de Santa Anna. Fue presidente de México en once ocasiones, a partir de 1833. En 1835, Texas buscaba su independencia, por lo cual Santa Anna viajó hasta el norte del país para intentar aplacar a los rebeldes. Sin embargo, los texanos, apoyados por el gobierno de Estados Unidos, vencieron al ejército mexicano. Entonces, el Presidente se vió obligado a firmar un acuerdo en el que se comprometió a no tener injerencia en Texas, menciona el sitio masalato.com.

Luego de la invasión de Estados Unidos a México en 1848, Santa Anna firmó el tratado de Guadalupe-Hidalgo, con el que México perdió casi la mitad de su territorio: California, Arizona, Nuevo México, Nevada, Colorado y Utah, señala biografiasyvidas.com. Antonio de Padua María Severino López de Santa Anna y Pérez de Lebrón falleció en 1876 ciego y sin recursos, detalla vidasdefuego.com.

5.- Agustín de Iturbide. El primer emperador de México traicionó al Rey de España, al Virrey de la Nueva España y al ejército Realista, del que formó parte, y se unió al ejército Insurgente que comandaba Vicente Guerrero para compartir el triunfo de la causa libertaria mexicana que se inició en 1810, señala el blog Lectura y Escritura.

6.- Benedict Arnold. En Estados Unidos, este nombre es sinónimo de traición. Durante la guerra de independencia, él comenzó a hacer negocios con el ejército británico y conspiró en contra de sus propios hombres, menciona historyking.com.

En 1780 renunció a la base de West Point por 25 mil libras. Además, se convirtió en un espía británico y comenzó a trabajar en contra de Estados Unidos. Benedict Arnold escapó a Gran Bretaña y falleció en Londres a los 60 años de edad.

7.- Bellido Dolfos. Su nombre se hizo famoso por aparecer en los cantares de gesta como el autor de la muerte del Rey Sancho II de Castilla en 1072, menciona biografias y vidas.

La leyenda menciona que Dolfos concertó una entrevista con el Rey con la excusa de pasar a su bando. Al momento de mostrarle una puerta de acceso a la ciudad, el traidor atravesó las espalda de Sancho con una lanza.

8.- Matrimonio Rosenberg. Ethel y Julius Rosenberg pasaron a la historia por ser acusados de vender secretos atómicos de Estados Unidos a la desaparecida Unión Soviética. Por sus acciones, el matrimonio fue sentenciado a la silla eléctrica en 1951, señala elclarin.com.

La sentencia es considerada como una arbitrariedad. La pareja fue ejecutada en 1953 en virtud del Acta de Espionaje de 1917, la cual dictaba pena de muerte para este tipo de delitos en tiempo de guerra. Sin embargo, en aquellos años Estados Unidos no se encontraba en guerra con la Unión Soviética, menciona el blog vidas rebeldes.

9.- Robert Hanssen. Durante más de 20 años fue agente del FBI y espió en favor de la Unión Soviética y Rusia. En 2001, fue detenido tras dejar un paquete con documentos secretos en un parque cercano a su casa para que lo recogiera su contacto ruso, señala el portal de elpais.com.

Hanssen fue sentenciado a cadena perpetua y los fiscales federales acordaron no pedir la pena de muerte, a cambio de que se declarara culpable de 15 cargos de espionaje y conspiración.

10.- Wang Jingwei. Durante la primera mitad del Siglo XX lideró la facción de izquierdas del partido nacionalista Kuomintang, el cual mantenía cercanía con el Partido Comunista de China. Tiempo después, intentó continuar colaborando desde el gobierno del KMT, pero su rival Chiang Kai-shek se impuso en la lucha por el poder y Jingwei se unió al gobierno del KMT en Nankín.

En 1938, con el comienzo de la Segunda Guerra Chino-Japonesa, Wang Jingwei abandonó al gobierno de Chiang Kai-shek y aceptó la oferta japonesa de convertirse en el presidente del régimen chino colaboracionista, menciona infobiografias.com.