10 inventos presagiados por la ciencia ficción ^Ulident^

El submarino, las escaleras eléctricas e incluso el iPad cuentan con pasajes de obras literarias que hicieron referencia a ellos varios años antes de que fuesen creados

Escritores como Julio Verne, Arthur C. Clarke y H.G. Wells predijeron la invención de al menos diez ******os de alta tecnología mucho antes de que se les construyera.
De acuerdo con la "Asociación de Investigación en Ciencia Ficción" (SFRA, por sus siglas en inglés), frases de obras como 2001: Una odisea del espacio y Cuando el durmiente despierte aluden a artefactos de alta tecnología que fueron construidos varios años después de la publicación de estos libros. Así lo informa el sitio electrónico Mashable.com

La bomba atómica. Dada a conocer al mundo en el verano de 1945, los primeros trabajos en torno a ella datan de la década de 1930. Sin embargo, H.G. Wells describió un artefacto de características idénticas en su libro The World Set Free: A Story of Mankind, publicado en 1914. Ahí habla de la radioactividad en los elementos más pesados y de la desintegración atómica. Todo esto en un contexto bélico.

Los cubículos de oficina. Popularizados a finales de la década de 1960, estas áreas individuales de trabajo fueron descritas por el escritor E.M. Forster en su obra Las paradas de la máquina, publicada en 1909. Ahí se habla de pequeños espacios individuales, unidos como pequeñas células en un panal de abejas.



Las puertas automáticas. Inventadas como hoy se les conoce por Dee Horton y Lew Hewitt en la década de 1960, fueron descritas por H.G. Wells en su obra Cuando el durmiente despierte, publicada en 1899.

Juegos de realidad virtual. Por largo tiempo han ocupado espacios en las obras de ciencia ficción sin que aún se alcancen los parámetros que se imagina pueden obtenerse. Es posible encontrar sus primeros ejemplos en la década de 1990, aunque también podría situarse a los primeros juegos de video, creados en 1958, como muestras de realidad virtual.

Por su parte, el escritor Arthur C. Clarke hace referencia a este tipo de entretenimiento en su novela titulada La ciudad y las estrellas, que se publicó en 1956. Ahí describe una cotidianidad en que los juegos de realidad virtual son el principal medio de entretenimiento de los ciudadanos.

El submarino. Su invención y uso original datan de la primera guerra mundial. Sin embargo, fue descrito por Julio Verne en su novela Veinte mil leguas de viaje submarino, publicada en 1869. Ahí habla de un artefacto similar a una ballena mecánica, rápido de movimientos y útil especialmente bajo el agua.



Tanques. Utilizados por primera vez también durante la primera guerra mundial, se habla de ellos en la obra The Land Ironclads, escrita por H. G. Wells en 1903. Uno de los fragmentos de la pieza retrata una batalla protagonizada por estos vehículos de combate.

El radar. Con antecedentes a mediados del siglo XIX, el primer artefacto capaz de localizar efectivamente la posición de un objeto mediante el uso de ondas de radio fue creado en 1933. Varios años antes, en 1911, se publicó la novela Ralph 124C 41+, donde Hugo Gernsback refiere el uso de un ******o con estas características.

Videochat. En 1964, la compañía telefónica estadounidense AT&T hizo una demostración pública del prototipo de un videoteléfono. Sin embargo, fue hasta la década de 1990 que la posibilidad de chatear con alguien en video comenzó a ser probada. El principal proveedor de estos servicios en línea, Skype, fue fundado en 2003.

Mucho antes de estas fechas, en 1911, el mencionado Hugo Gernsback relató en su novela Ralph 124C 41+ cómo serían las comunicaciones a través de estos dispositivos.

Audífonos de oído. Descritos por Ray Bradbury en su novela Fahrenheit 451 (1953), este tipo de audífonos se convirtieron en una herramienta de la vida cotidiana a partir de la década de 1990. Bradbury los describe como "pequeñas conchas apretadas en los oídos, de las que sale un océano de sonidos electrónicos, de palabras, de música y de palabras que desembarcan en la costa de una mente insomne."



iPad. Lanzado en enero de este año, un dispositivo de características muy similares es descrito por Arthur C. Clarke en su novela 2001: Una odisea del espacio, publicada en 1968. El texto refiere especialmente la característica de expandir las imágenes que aparecen en la pantalla para verlas de un mayor tamaño.


muy interesante, de algo há servido la ficción, para crear estos inventos revolucionarios