DeNunCianDo - Hay q matarlos todos

a que mierda con esta pescadito ome a mi no me gusta mucha la idea pero no quedo otra

Pez león, una amenaza creciente para los arrecifes del Caribe colombiano

http://www.youtube.com/watch?v=m7aZSANUIUg

Este feroz depredador marino proveniente de Asia hoy pulula en varias zonas de la costa del país.

En mayo del año pasado, mientras recorrían un arrecife de la bahía de Granate, en el parque Tayrona, Juliana González, una estudiante de biología marina, y Santiago Estrada, instructor de buceo, se encontraron un pequeño pez que, según sus cálculos, no debía estar allí.

Era aparentemente inofensivo, muy colorido, movía una melena de espinas y husmeaba con cautela una porción del coral. En síntesis, un clásico pez león que, aunque lento, se trata de una especie sumamente feroz y, además, ponzoñosa.

Era increíble que un animal de esta especie, de no más de 40 centímetros, hubiera hecho un viaje desde Corea, Malasia, Australia o Nueva Zelanda, de donde es típico, para refugiarse en Colombia. Pero sin explicación aparente apareció aquí, a miles de kilómetros de su 'casa', donde ha encendido una alerta que cada día es mayor.

El pez león es una amenaza para las especies nativas, pues se come los peces que pueblan el arrecife, así como las larvas y ejemplares jóvenes que al crecer son clave para la supervivencia de estos ecosistemas. También es la causa de la desaparición de peces que sirven de alimento a otros más grandes, que a su vez sostienen la pesca artesanal e industrial.

En Bahamas, donde ha sido muy estudiado, se comió el 80 por ciento de los animales de su sistema arrecifal. También ha hecho daños en Puerto Rico, República Dominicana, Jamaica, Islas Vírgenes, México y Cuba, el primer país que lo reportó.

Es tan voraz que puede extinguir a especies que se alimentan de algas. Y sin animales que controlen el crecimiento de esa planta acuática, como el pez cirujano, esta puede destruir el coral al crecer sin control en sus alrededores.

Hace un año, González y Estrada vieron un solo ejemplar escondido en el Tayrona. Pero la mala noticia es que hoy esta especie pulula por toda la Costa Atlántica donde ya es considerado una plaga.

Recientemente en Taganga, durante una limpieza de playas, los buzos sacaron más de 50 peces león en una sola inmersión. También se ha visto en el mar aledaño al aeropuerto de Santa Marta.

A manera de prevención, el pez ya fue incluido en la lista de especies invasoras que han llegado a Colombia desde otros continentes y que hacen estragos en la biodiversidad nacional.

Pero no es sólo un riesgo para el ecosistema marino nacional: como sus púas son venenosas, este pez pone en peligro también a bañistas y pescadores.

Su picadura no es mortal, pero quien sea herido por uno de sus aguijones seguramente pasará un mal rato. Además de un dolor intenso, puede presentar dificultad para respirar, inflamación, náuseas, cefalea y en ocasiones parálisis, convulsiones o hemorragias. Incluso, es peligroso aun si está muerto y por eso debe manipularse con cuidado, porque su veneno pierde su capacidad tóxica mucho tiempo después de haberlo sacado del mar. Por todo eso, las Secretarías de Salud en la Costa Atlántica ya están advertidas para que apliquen los tratamientos adecuados. Uno de ellos es introducir la herida en agua caliente.

"Es muy lento. Uno puede acercarse y ni se inmuta, por eso mucha gente cae en la trampa y lo toca", agregó una fuente de la oficina de Ecosistemas del Ministerio de Medio Ambiente. Pero, si casi no se mueve, ¿cómo llegó al país? El Instituto de Investigaciones Marinas (Invemar) y el Instituto Humboldt presumen que arribó por corrientes desde Belice o las Antillas. Lo que no es muy claro es cómo invadió estos territorios del Caribe. Está descartado que haya llegado nadando o en medio de una corriente desde el Oceáno Índico, además porque no resiste temperaturas muy bajas.

Por eso, hay consenso sobre la posiblidad de que algunos ejemplares que fueron llevados a La Florida en la década de los 90 quedaron libres cuando el huracán 'Andrew' (1992) destruyó un acuario artificial. Aunque no se descarta que sus larvas hayan podido llegar en barcos mercantes que acumulan agua en sus compartimientos.

Todo indica que el pez león llegó para quedarse. Su erradicación será casi imposible y por eso la única opción que existe, según lo sugieren los expertos, es que quienes dependan del mar traten de controlar su población y aprendan a convivir con él.

Campañas en diferentes países para evitar que se propague en la región
"Se busca vivo o muerto", reza un cartel con la imagen del pez león con la que se promociona en Yucatán (México), una recompensa de 81 dólares, para así fomentar la caza de esta especie. Las autoridades ambientales de la región prendieron las alarmas en aras de proteger a especies marinas del depredador. La misma idea funciona desde el año pasado en Bahamas, donde la presencia de esta especie afectó a bañistas y a la pesca recreativa.

DiveTech, una entidad de buceo en el Caribe Británico, tiene una embarcación que se dedica exclusivamente a la pesca de ejemplares del pez león. Más de 300 buceadores han recibido licencias para participar en esta campaña.

El gobierno municipal de Tulum (México), hizo un torneo de pesca del pez león con premios de hasta 480 dólares. La zona es una de las más afectadas por el crecimiento de esta especie.

Una gira con renombrados chefs para promover el consumo del pez león en E.U. hizo la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica de ese país. El objetivo: buscar la forma de erradicar la especie de las aguas de donde no es nativa.

Para medicina y alimentación
Así como es una amenaza, el pez león también ofrece usos potenciales que podrían revertir su imagen de animal nocivo.

A pesar del peligro que significa para los humanos, estudios científicos indican que su veneno produce efectos antitumorales, hepatoprotectores y antimetastásicos en ratones, lo cual puede ser prometedor para las investigaciones sobre cáncer en humanos. También, según la Universidad Nacional de Colombia, puede ser una opción alimenticia para las comunidades costeras. Se puede comer como un filete, en ceviche o crudo, como un sushi.

Hay otras 295 especies invasoras
El pez león no es el único animal 'extranjero' instalado en el país. La organización Conservación Internacional indica que en Colombia hay otras 295 especies invasoras, consideradas como la segunda causa de pérdida de biodiversidad después de la deforestación. Según la 'Guía de especies introducidas marino-costeras', del Ministerio de Ambiente, en el mar hay medio centenar de animales que han llegado de otros países y están dañando los ecosistemas. Según la Unión Internacional para la Naturaleza (Uicn), el mundo invierte cerca de 400 mil millones de dólares al año para frenar estas especies.

La hormiga loca

Llegó al país desde Brasil en la década de los setenta para hacer iocontrol de serpientes y de la hormiga arriera. Sin embargo, su presencia es preocupante porque rotege a los piojos y pulgones del ataque de depredadores naturales, y entonces promueve u presencia en cultivos de café, yuca o cacao. "Ataca las mucosas de aves y ganado, que ueden morir de asfixia por el ácido fórmico que expulsa", dicen publicaciones al respecto del Instituto Von Humboldt.

La rana toro

Tiene efectos venenosos en donde se instala. Entró desde Estados Unidos como una opción para producir carne y pieles, negocio que floreció en Brasil. Aquí llegó en medio de varias crisis cafeteras y pensando que el éxito comercial sería similar. No fue así y muchos ejemplares escaparon. La especie ha colonizado el Valle, Cundinamarca, Tolima y Boyacá y habría transmitido un hongo que tiene al borde de la extinción a la rana arlequín, nativa del país.

Truchas y tilapias

Las truchas y las tilapias (también llamadas mojarras), son especies invasoras. Estas últimas llegaron desde África, y según estudios del biólogo Francisco de Paula Gutiérrez, docente de la Universidad Jorge Tadeo Lozano, han desplazado poblaciones de bocachicos, una especie típica del río Magdalena. Las truchas tienen un perfil similar. Una de ellas, la 'arco iris', es feroz, y ha desterrado a peces nacionales de lagos y embalses.

Caracol de tierra

La alta demanda de caracol en Europa llevó a Colombia a cultivarlo para exportación. Está en Antioquia, Cundinamarca, Boyacá, Caldas y Valle del Cauca. Es una especie herbívora y muy dañina que destruye cerca del 92 por ciento de los ecosistemas a donde llega. Estudios de la Universidad Nacional estiman que está en 28 departamentos del país, algo grave si se tiene en cuenta que se multiplica velozmente.

Retamo espinoso

Es una de las más importantes plantas invasoras del mundo. Ha alcanzado todos los continentes.

Desplaza plantas nativas y cultivadas, y altera las condiciones del suelo porque le grega nitrógeno. También crea riesgos de incendios forestales, debido a sus resinas aceitosas. Esta planta es nativa del Mediterráneo. En Colombia se ve en zonas aledañas a páramos del altiplano cundiboyacense, Antioquia y Santander.

JAVIER SILVA HERRERA
REDACCIÓN VIDA DE HOY

fuente
http://www.eltiempo.com/verde/faunay...anos_7690357-1