Petro, el peor alcalde en materia de vivienda de interés social y prioritaria: Minvivienda [Archivo]

proyectofenix

04-12-2015, 19:58:32

El gran programa de vivienda gratuita del gobierno Santos no es, según Luis Felipe Henao, una estrategia electoral de Vargas Lleras.

http://filesstaticpulzo.s3.amazonaws.com/styles/pulzo2_normal/public/ministro_de_vivienda_1.jpg?itok=WJPcobba Ministerio de Vivienda Esto y más tiene por decir el Ministro de Vivienda, el mejor calificado.
Pipe Sierra: Colombia es el segundo país del mundo con más desplazados. Uno supondría que, en la misma proporción, hay colombianos sin vivienda. ¿Es así?
Luis Felipe Henao: Que haya seis millones de desplazados no significa que todos no tengan casa. Voy a decirles algo que no le he dicho a ningún otro medio de comunicación y que me sorprendió: se supone que el 70% de los beneficiarios del programa de vivienda gratuita son desplazados, pero en una encuesta que yo le pedí al DANE, el 70% de ellos dijo que no era víctima del conflicto armado. Esto quiere decir, pero hay que investigarlo, que muchas personas, sin serlo, se inscriben en el registro único de población desplazada con el objeto de poder tener beneficios sociales como la vivienda. Eso es preocupante.
Como dijo el Contralor, fiscalmente sería imposible llegar a todos porque no hay tanta plata, pero, con la inversión de 3 billones de pesos, que es la mayor que se ha hecho, estamos priorizando a las personas más vulnerables.
P.S: Pero, ¿ha funcionado el programa?
L.F.H: Hace poco la Corte Constitucional conceptuó que donde más se ha avanzado es en política de vivienda para población desplazada. Antes, al afectado se le daba una carta-cheque diciendo que tenía derecho a 18 millones de pesos, pero por tener un alto grado de vulnerabilidad era difícil que le prestaran la plata. Por eso, cambiamos la política a un modelo que ha sido exitoso: el programa de las 100 mil viviendas.
Antes de reunirme con ustedes, me encontraba con Juan Camilo Restrepo, director del DANE, y me dio muestras de cómo está viviendo la gente en las casas. Encontramos que, una vez entregadas, más del 90% de sus propietarios ha tenido acceso a educación, que están viviendo mejor.
P.S: ¿Qué medidas se están tomando para que no se propaguen los barrios de invasión?
L.F.H: Uno debe buscar la formalidad. ¿Qué se entiende por esto? Que haya un constructor que tenga licencia, asegurando que el sitio no esté en zona de alto riesgo, que tenga servicios públicos y que las casas se hagan con materiales adecuados. En la encuesta del DANE vimos que el 30% de las personas beneficiadas de nuestros programas vivían en situación de alto riesgo. Entonces, ¿cómo se ataca a la informalidad? Apostándole a la formalidad y rompiendo las barreras que impiden el acceso.
P.S: ¿Cuál es la pelea con Petro?
L.F.H: Mi pelea con el alcalde de Bogotá es que ha sido el peor, en los últimos 12 años, en materia de vivienda de interés prioritario y de interés social. Cuando uno mira en qué creció más Bogotá fue en vivienda para estrato medio-alto. Entonces, es una gran contradicción que alguien que tenía un sello de vivienda social no lo haya hecho. Además, él, en su discurso, ha sido contradictorio. Dijo que quería que las personas vivieran cerca a sus lugares de trabajo o en la centralidad de la ciudad, y al no generar oferta de vivienda, hizo que las personas se fueran de Bogotá a sitios periféricos en la Sabana, generando un desplazamiento no por violencia, sino por accesibilidad.
Petro ha sido lo más inequitativo, pues las personas vulnerables se están gastando más plata que antes en servicios públicos y en transporte.
P.S: En Bogotá, se esperaba construir 8.000 viviendas gratis, pero solo se llegará a 3.000. ¿Qué pasó?
L.F.H: Las 5.000 restantes las distribuimos en otras ciudades. En Bogotá, planeamos 10.000 viviendas, luego la meta se bajó a 8.000, después a 4.000 y, finalmente, acordamos con el alcalde esto: él dijo que iba a hacer 2.000 y yo 2.200. Yo terminé de hacer mi cantidad, que son dos barrios llamados Villa Melisa y Villa Karen. Y él, de las 2.000, solo ha terminado 340 viviendas, que son las que están en Plaza de la Hoja. El problema de fondo es que el convenio terminará en diciembre de este año, lo que quiere decir que Bogotá va a perder otras 1.600 viviendas ¡por falta de pura ejecución!
P.S: ¿Un joven que gane entre uno y dos salarios mínimos puede acceder a un subsidio de vivienda?
L.F.H: Antes se daba un mensaje: tenían que tener 20 hijos y estar casados para acceder a una vivienda, pero ahora es diferente, pues, por primera vez los jóvenes pueden comprar una casa desde temprano para empezar a hacer un patrimonio. Esto es un llamado importante para la economía porque se generan empleos. Además, se les da la libertad de escoger el banco y el proyecto de vivienda. Todo esto va unido a una innovación financiera en la que ya no se tiene que esperar un año para que salga el subsidio.
P.S: Se ha dicho que el programa de viviendas gratuitas es una estrategia de campaña de Vargas Lleras…
L.F.H: Claro que fue una estrategia de él. Una estrategia no de campaña, sino para disminuir el déficit habitacional ante el fracaso del gobierno pasado en política de vivienda. La idea surgió, primero, para que se impulsara la construcción y llevamos tres años consecutivos siendo el sector que más crece en la economía; segundo, para aumentar el empleo y llegar a sitios donde antes no llegaba la política de vivienda. Este ministerio no era importante para la economía, ahora sí.
P.S: ¿Cómo ve el Ministro de Vivienda el proceso de paz en La Habana?
L.F.H: Abrir la ventana en Colombia para que haya paz significará, para la siguiente generación, tener un país mucho más competitivo. Habrá mayor inversión extranjera, más empleo, mayor turismo y mejores oportunidades. Yo sueño con eso, pero tendrá que haber sacrificios que nos van a costar. El tema es lo caro o no que nos cuesten.
P.S: En un escenario de pos conflicto, ¿qué estrategias de vivienda habría para los desmovilizados?
L.F.H: Ya empezamos con esa estrategia. Se habla de posconflicto, pero de lo que se debe hablar es sobre apostarle a un país más equitativo, con más empleo, mayor clase media, agua potable; y eso se está haciendo.
P.S: O sea, ¿plan de vivienda para los guerrilleros desmovilizados?
L.F.H: No. Yo soy de los que piensan que uno no puede generar diferenciación positiva, no creo en eso. Ojalá no tengamos que sacar un plan especial para los reinsertados. No se puede tener algo particular para cada grupo, sino algo para que todas las personas de la población se beneficien.
P.S: Hace unos meses hablé con el Procurador y afirmó que rescataba el avance en infraestructura y vivienda del gobierno Santos.
L.F.H: El Procurador ha sido un gran aliado del Ministerio de Vivienda, tal vez uno de los mejores. Yo tengo una meta para la cual él me ayuda permanentemente: si un alcalde se comprometió a conectar los servicios públicos de vivienda y no lo ha hecho, la Procuraduría llega y acompaña. Alejandro Ordóñez ha sido importante para destrabar procesos.
P.S: ¿Hay algo que le haya quedado grande al Ministerio de Vivienda en estos dos años y medio?
L.F.H: Mis expectativas, porque el dinero no alcanza. Yo quisiera llegar con agua a más sitios del sector rural. Tenemos una cobertura en acueductos urbanos del 97%. La gente de ciudad tiene servicios públicos, pero no ocurre lo mismo en el campo. Debemos generar incentivos para que la gente salga de la ciudad.
P.S: ¿Cómo hacer para que no se repita lo de la torre Space?
L.F.H: Lo del Space fue una excepción. No es normal que un edificio, de buenas a primeras se caiga. Nosotros tenemos la norma sismorresistente (NSR) más importante de Latinoamérica. Lo que sí se debe hacer es que los alcaldes, que son los mayores responsables de la construcción municipal, hagan un mayor seguimiento a las obras.
P.S: El país se está quedando sin agua. ¿Qué está haciendo su despacho?
L.F.H: En este momento tenemos alrededor de 300 municipios que tienen un riesgo de desabastecimiento hídrico, pero estamos trabajando para atender el fenómeno del niño.
Se imponen sanciones para las personas que derrochen el agua y estamos invirtiendo en más plantas de tratamiento y carro-tanques de agua potable. Sumado a esto, también hemos hecho planes para eliminar conexiones fraudulentas.
P.S: ¿Qué se piensa hacer para proteger los cerros orientales, en Bogotá?
L.F.H: Como dice Mockus: “Los cerros orientales son sagrados”, pero existe una franja de adecuación del 10%, que son alrededor de 800 hectáreas, que ya está intervenida y en la que se encuentran barrios ilegales. Hay que normalizar esa zona para que la ciudad no crezca entre los cerros, que son el pulmón de Bogotá y se tienen que cuidar. Eso lo ha dicho el Consejo de Estado y también el ministerio.
P.S: Para cerrar, Ministro: en un futuro, ¿usted aspiraría a la Presidencia?
L.F.H: (Muchas risas) No, déjeme salir de este túnel. Todavía me falta mucho.