PDA

Ver la Versión Completa Con Imagenes : La tercera revolución industrial: El capitalismo agoniza: el coste cero lo enterrará en el siglo XXI


Ayudante De Santa
06-11-2015, 22:19:08
Los mejores licores
PEDROELGRANDE
11-11-2014, 22:36:51
Publicado: 11 nov 2014

http://imagezilla.net/thumbs2/lrGgZLV-72c0eeab4fe8f5f9f5512723960d88b5-article_tn.jpg (http://imagezilla.net/show/lrGgZLV-72c0eeab4fe8f5f9f5512723960d88b5-article.jpg)

© www . facebook.com/pages/Dead-Bull
La tercera revolución industrial está al llegar y concederá al capitalismo su último triunfo para luego borrarlo del escenario mundial. Así lo pronostica Jeremy Rifkin, escritor y antiguo asesor político de varios líderes europeos.

El nuevo orden social, que ya se intuye en esta primera mitad del siglo XXI, es llamado 'sistema procomún colaborativo' en el libro 'La sociedad de coste marginal cero', recientemente publicado. El coste marginal, explica el autor, es el coste de producir una unidad adicional de un bien después de haber pagado los costes fijos y, cuanto más bajo es, más óptimo es el mercado.

Según el ensayista, citado por 'The Guardian', tras haber alcanzado su eficiencia óptima y un coste marginal igual a cero el capitalismo dejará de obtener beneficios y se aniquilará a sí mismo compitiendo con la creciente economía colaborativa. Este nuevo fenómeno, aunque ya existente, será impulsado por una estructura que el autor denomina el 'Internet de las cosas'.

La característica principal del nuevo orden será el aumento de la relevancia de las energías renovables, que permitirá dejar atrás las disputas relacionadas con el petróleo. Los propios ciudadanos compaginarán el papel de productores y consumidores, es decir, se convertirán en 'prosumidores'. La empresa alemana del sector energético E.ON ya ha admitido que el modelo tradicional de generación centralizada está condenado a desaparecer y celebra que sus clientes se transformen en proveedores de los servicios, sostiene Rifkin.

Siguiendo el mismo patrón se desarrollarán los sectores de las comunicaciones y de la logística. Estas dos ramas de la economía, igual que la energía, evolucionarán de una manera innovadora, en forma de redes sin ninguna integración vertical, de manera similar a Internet.

Las ofertas de empleo se concentrarán cada vez más en la infraestructura social de sectores como la educación, las artes o la sanidad. Habrá que aprender a regular los excesos vinculados a la acumulación masiva de datos ('Big Data'), el fenómeno que ha inundado de información el mundo a través de la multiplicación de los dispositivos y las aplicaciones.

Para el año 2020 los 'prosumidores' podrán compartir entre sí sus productos impresos en 3D y transportarlos en vehículos sin conductor, alimentados con energía renovable de coste marginal casi nulo. Según vaticina Rifkin, esta convergencia marcará el primer paso hacia el desmantelamiento del capitalismo.

Ayudante De Santa
06-11-2015, 22:19:08
Los mejores licores
DarkPit
12-11-2014, 00:17:45
Todavia es arriesgado predecir el futuro de esa manera y más cuando las empresas siempre se especializan para buscar jugosas retanbilidades (trabajo de los administradores de empresas y economistas). Dejo esta info por aca para más detalle y comprensión sobre el coste marginal cero:

La tercera revolución industrial que vivimos −originada por las energías renovables y las tecnologías de la información y la comunicación− posibilita que el capitalismo alcance su cénit y máxima expresión con una caída de los costes marginales hasta acercarse a cero. La teoría económica sostiene que la competitividad en los mercados crece de forma exponencial, favoreciendo el desarrollo de una tecnología más sofisticada y una mayor eficiencia productiva, gracias a la cual se producen bienes y servicios a menor precio y de mayor calidad, al disminuir el coste marginal por unidad adicional producida. Esto significa que al alcanzar su eficiencia óptima y un coste marginal igual a cero, el capitalismo se devora a sí mismo y pierde sentido, pues no se obtienen beneficios. Aquí entra en liza la economía colaborativa, que funcionará mediante una estructura denominada el Internet de las Cosas (IdC).

Aunque el IdC está aún por implantarse, una nueva generación de “prosumidores” −personas que producen lo que consumen− ya ha nacido. Generar tu propia energía o unos zapatos con una impresora 3D es solo la antesala de lo que está por venir. El IdC incluye tres estructuras distintas e integradas de forma coherente a escala global: el Internet de las comunicaciones, el Internet de la energía y el Internet de la logística, las tres características de la tercera revolución industrial.

Las dos revoluciones industriales anteriores se caracterizaron por un armazón similar. La primera consistió en el telégrafo, el carbón y el tren. La segunda fue la revolución del teléfono, el petróleo y los automóviles. La diferencia radica en que en la tercera nos encaminamos hacia una economía de la abundancia, no de la escasez. Es un modelo de economía circular por el cual el uso de energías renovables permite obtener con menos recursos una mayor eficiencia sin poner en peligro el entorno natural, encontrando un equilibrio cercano a la perfección entre el planeta y el entorno que hemos creado artificialmente.

¿Y el empleo?, dirán. Rifkin sostiene la argumentación keynesiana. John Maynard Keynes ya se preguntó por el fin del capitalismo auspiciado por su propia entropía y vislumbró un futuro donde la actividad humana acabaría por centrarse en fines no económicos. En La sociedad de coste marginal cero las ofertas de empleo se centrarían en puestos que reforzasen la infraestructura social en sectores como las artes, la sanidad o la educación, dentro de organizaciones sin ánimo de lucro.

Estamos tratando con un nuevo mundo donde la omnipresencia y omnisciencia no corresponde a Dios sino a la informática. El big data y los sensores serán críticos para ello. Millones de sensores instalados en carreteras, coches, animales, contadores de luz, tiendas, etcétera, comunicarán −ya lo hacen− a tiempo real errores y estadísticas, permitiendo una mayor eficiencia inmediata. Hasta alcanzar ese momento, dos generaciones intermedias serán las responsables de construir la plataforma hacia el IdC, desde carreteras inteligentes o instalación y mejora de sensores, todas tareas que no puede desarrollar una máquina y sí un ser humano, favoreciendo la transición paradigmática.