El cuento de la visa a España

[Ayudante De Santa]

[armando2007]

El cuento de la visa a España

Se presentó, sí, como una gran noticia: el presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, le informó a su homólogo colombiano, Juan Manuel Santos, que le pediría a la Unión Europea la eliminación de la visa de colombianos para la entrada a ese país y, por ende, al resto del Viejo Continente.

Hace ya años que España le cerró a Colombia la libertad de visitar sus fronteras sin trámites burocráticos. Fue en el 2001 cuando la Unión Europea emitió una lista de 132 países a los que les impuso el requisito antipático de la visa. Colombia y Perú estaban entre ellos.

Varios intelectuales y artistas colombianos, precisamente por la comunicación, la herencia y el cariño que sentían por España, enviaron una carta de indignación en la que decían que no volverían allí si no retiraban el requisito. No funcionó. Es más, todos (menos uno solo) volvieron a la llamada “Madre Patria” como si nunca hubieran puesto su impronta en esas palabras.

Ahora Rajoy, sin sonrojo en su rostro, dice que tramitará la petición. ¿A qué viene todo esto? La noticia suena bien, es cierto, pero, por favor, debemos ser realistas frente a lo que esto implica. No puede servir este episodio para que los anuncios se usen de forma efectista por parte de ambos gobiernos. Es obvio que nosotros los colombianos estaríamos mejor sin estos engorrosos requisitos, pero hay que entender, y parece que los gobiernos conjuntos en sus declaraciones no lo hacen del todo, que esto no se va a dar de la noche a la mañana. No va a ser fácil.

Lo uno es, por supuesto, el procedimiento intrínseco que se vive en la Unión Europea. No existe una forma válida en la que España imponga unilateralmente esta petición. La Unión Europea es un conjunto de naciones que tienen que pensar en colectivo: esto es, ya hablando de forma realista, esperar lo que para el otro año se viene, es decir, que definan si quitarle o no la visa a 14 países que están en una lista de espera. Entre esos no están ni Colombia ni Perú. La Comisión Europea, por su parte, ha dicho que no ha recibido ninguna petición en tal sentido por parte de España. Lo que implica que, más allá de ser esto una divertida y entusiasta conversación entre nuestro mandatario y el de allá, no hay nada concreto.

Y el otro lado es el político: suena poco esperanzador el hecho de que la Unión Europea, al contrario de lo que se piensa, ha aumentado los requisitos, las condiciones y el papeleo desesperante a los ciudadanos no comunitarios.

Ahora viene lo suspicaz. Podríamos pensar que se trata de Colombia, claro. Un país que tiene en su más alto gobernante a un presidente que quiere ser líder regional y que ha actuado en consecuencia: volviendo a su país sede de eventos de diplomacia internacional de gran envergadura, que ha firmado tratados comerciales para el flujo libre de la mercancía, que proyecta (es posible) una mejor imagen. Todo eso es cierto. Pero es cierta, también, la otra parte: resulta casi evidente, hasta para el más obtuso de los analistas políticos, que ahora que España vive una crisis de una hondura casi histórica, quiera incentivar los viajes, el turismo, las visitas, la confianza, etcétera. No es descabellado.

Con todo, hay por lo menos que esperar a que se tramite la petición. El día que eso pase, el día que los gobiernos europeos se sienten y evalúen la posibilidad, y la concedan, en ese momento podremos sentarnos a celebrar. Celebrar el hecho de ser ciudadanos de un mundo con mucha más libertad, más allá de las fronteras que nos son antipáticas a diario. ¿Soñamos? Por ahora sí.


Fuente El Espectador

[Ayudante De Santa]

[Alets]

Yo no entiendo mucho de política :$:$. Pero, sólo digo: Si allá no nos querian cuando estaban en las buenas, que no nos esperen en las malas.

[Heráclito]

El trámite es engorroso y al menos se llevará un año la decisión. Esperemos a ver.

[INDIVIDUAL]

Esperemos que pasa como dice hera