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Ver la Versión Completa Con Imagenes : Rusia: Y qué, si no viene Obama...


Ayudante De Santa
06-11-2015, 22:19:08
Los mejores licores
PEDROELGRANDE
13-08-2013, 20:05:31
Y qué, si no viene Obama...


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Lili Luna
Parece ser que Barack Obama esta enojado con Vladímir Putin, tanto que el jefe de la Casa Blanca, no quiere poner ni un pie en el Kremlin donde ya lo esperaban con manteles largos. La razón de la *******ia, o mejor dicho, la negativa de Obama de reunirse con su homólogo ruso el mes próximo en Moscú se debe, según explicó la Casa Blanca, a la falta de progreso en la agenda bilateral en temas como los sistemas balísticos de defensa, el control de armas, los derechos humanos y también por el caso Snowden.
“La decepcionante decisión de Rusia de otorgar asilo temporal a Edward Snowden fue también un factor que consideramos al evaluar el estado de nuestra relación bilateral”, indicó el comunicado presentado. Washington dijo que ante esta situación no veía ningún motivo para celebrar una cumbre EEUU-Rusia.
A ningún anfitrión le hubiera hecho gracia la terrible noticia de que el invitado no vendría. Pero, a decir verdad, en el Kremlin ya esperaban algo así: Moscú en el último tiempo se muestra media terca y tozuda e insiste en ir por otro camino.
La prensa rusa coincide al destacar el asunto de la llegada al país de Edward Snowden, el excolaborador de la CIA que destapó la existencia de una red de espionaje masivo a nivel mundial por parte de EEUU. Más, el hecho de que Rusia le otorgara asilo político temporal ignorando la presión de EEUU para alcanzar al traidor, llegando hasta la locura de hacer bajar un avión presidencial. Es una de las causas del enfado de Obama, pero no el detonante principal del rechazo de reunirse con Putin. Snowden solo fue la gota de agua que colmó el vaso, de una relación no solo débil sino contrapuesta entre Rusia y EEUU desde hace tiempo.
La experta del Centro Carnegie de Moscú, Lilia Shevstsova, considera que “la decisión de Obama es muy lógica” y explica que después de que las relaciones entre Washington y Moscú comenzaron a deslizarse por una pendiente inclinada, algo que no comenzó hoy o ayer, EEUU tuvo que encontrar una excusa que evitara llevar las relaciones con Moscú a una confrontación completa, y que además no diera a Putin la oportunidad de subirse el cuello frente a Obama.
No hay que olvidar que mientras el líder norteamericano exigió, advirtió, a Rusia de las consecuencias fatales sino le devolvían a Snowden. Putin, sin pelos en la lengua, pronunció su sacramental frase: "Rusia nunca ha entregado a nadie y no piensa hacerlo ahora".
Un evento sin precedentes. Además ni siquiera durante la guerra fría, los líderes soviéticos y norteamericano s faltaron a sus citas por enojos. A reserva, claro, del episodio ocurrido en esos años, cuando Nikita Kruschev rechazó reunirse con el presidente Eisenhower tras la intrusión del avión espía estadounidense U-2, que fue derribado sobre la Unión Soviética en mayo de 1960.
Sabidos de que Obama no vendrá a Moscú pero sí participará en la reunión del G-20 que se celebrará en San Petersburgo en septiembre. Igual que en todos los divorcios políticos, la pregunta de rigor es quién gana o pierde más en estos distanciamient os ¿Rusia o EEUU?
La bloguera Cristina Patupchik responde a esta pregunta con otro interrogante: ¿Cuál es el problema de que venga o no venga Obama a Moscú? Ya dijo que no viene, ¿y qué? En la cumbre del G-20 de todas maneras Obama va tener que ver a Putin y discutir con él los asuntos. Sí, sin las cámaras, lo más probable, ¿pero qué nos perderíamos? Casi de nada o de muy pocos cambios, respondería yo. Apenas en junio pasado, al inicio de la cumbre del G-8 en Irlanda del Norte, los rostros encolerizados de Obama y Putin dieron vuelta al mundo, después de que se enfrascaran en una discusión pública al abordar la guerra en Siria. Ambos mandatarios reconocieron que tenían "perspectivas divergentes" pero que estaban dispuestos a encontrar una salida conjunta a la crisis. No obstante, hasta ahora no dan señas de acercar sus posiciones sobre Bashar Asad, al que Rusia defiende y EEUU quiere derrocar. Por otra parte, Washington siempre vio con recelo el objetivo de esa cumbre bilateral dadas las diferencias con Moscú en los asuntos de mayor envergadura internacional, como Siria o Irán y en intereses propios, como el escudo antimisiles de EEUU en Europa, que Rusia rechaza tajantemente por considerarlo una amenaza a su seguridad territorial.
Ahora si la verdadera causa del enfado de Obama es Snowden, léase el hecho de que Moscú no entregó al bocón y traidor de Snowden. La reunión bilateral Obama-Putin, estaba condenada al fracaso, primero porque de acudir el jefe de la Casa Blanca al encuentro en Moscú, hubiera quedado como un imbécil ante los feroces republicanos que exigen palos contra Rusia por lo de Snowden. En segundo lugar, el caso del espía norteamericano fue el pretexto perfecto que permitió actualizar todos los desacuerdos entre de EEUU y Rusia.
Además resultaría difícil creer que Obama sea tan corto de vista y se decida por un mayor deterioro de la comunicación con Moscú: sería raro y nada conveniente para Obama que su pueblo y el mundo en general se quedaran con la idea de que el motivo de la caída radical de las relaciones con Rusia es Snowden. Un norteamericano que, según sus propias palabras, lo único que perseguía con sus denuncias "era informar al público sobre lo que se hace en su nombre y lo que se hace contra ellos".
ll/lj/sm