Rusia y América Latina promueven la cooperación bilateral

[Ayudante De Santa]

[PEDROELGRANDE]

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Políticos rusos y expertos discutieron, en los debates públicos parlamentarios celebrados en Moscú, la necesidad de redoblar los contactos políticos, económicos y humanitarios con los países de América Latina y del Caribe.
Alexéi Lijachov, viceministro de Desarrollo Económico de Rusia, manifestó que, en el período de inestabilidad financiera mundial, Rusia y América Latina exhibieron una dinámica sorprendente de relaciones económicas y comerciales:
–En 2005, el ejercicio comercial entre Rusia y países latinoamericanos fue de unos seis mil millones de dólares; hoy se ha triplicado casi alcanzando el nivel de los dieciséis mil quinientos millones de dólares. Nuestro país no revela una dinámica similar con ninguna otra región.
Refiriéndose al intercambio comercial, Alexéi Lijachov destacó que, para una serie de bienes de exportación, el continente latinoamericano es para Rusia una región básica:
–América Latina absorbe el 76 % de las exportaciones rusas de fertilizantes, un 40 % de los medios especiales de transporte, de los equipos antincendios y de la construcción, el 10 % de los sistemas de radares. Además, la región revela un gran interés en los suministros de equipos energéticos.
Rusia importa de sus socios de ultramar, sobre todo productos agrícolas: plátanos, caña de azúcar, flores, carne de ave y de cerdo. "Estos bienes suman un paquete sólido de las importaciones rusas", indicó Lijachov, añadiendo que, de los cuarenta países de la región, Rusia mantiene con treinta y dos relaciones comerciales y económicas estables.
Sin embargo, el alto personero aseguraba en el hemiciclo que el potencial de nuestras relaciones muestra un desarrollo débil. En particular, en el mercado latinoamericano no está del todo representada la exportación rusa de bienes altamente tecnológicos, lo que puede ser un freno para la economía de la región que se moderniza y de rápido crecimiento. Moscú, por su parte, está interesado en el incremento de los suministros de metales, de los que América Latina, por sus reservas, figura entre los líderes mundiales.
A juicio de Alexéi Lijachov, para dinamizar la cooperación comercial y en inversiones es indispensable elevar, por todos los medios, el nivel de confianza entre las asociaciones de empresarios de las dos partes del mundo:
–Los negocios van donde les resulta más cómodo y menos arriesgado para sus inversiones. De ahí que sea de suma importancia el asunto de la confianza entre los socios económicos.
A robustecer la confianza ayudan no solo los contactos directos regulares de los empresarios sino también la exención de visados entre Rusia y todos los países de América latina. Una propuesta en tales términos formuló el viceministro de Exteriores de Rusia Serguéi Ryabkov en los debates públicos parlamentarios. El diplomático considera también indispensable compensar a los jóvenes latinoamericanos que viajan a estudiar a Rusia los gastos en pasajes, enseñanza y del seguro médico.
La mejor forma de acercamiento es la cultura, declaró Vladímir Davydov, director del Instituto de América Latina. Solo así podrán Rusia y los países del continente latinoamericano entenderse mejor y pasar a un nuevo nivel de relaciones en los más distintos campos:
–En el campo de la colaboración en humanidades, para nosotros es posible y necesario hacer mucho más que en la esfera económica. Estoy seguro de que la cultura de Rusia es la producción más competitiva que tiene para ofrecer en el mercado mundial.
Las propuestas presentadas en los debates públicos parlamentarios serán examinadas el 29 de mayo, día de la llegada a Moscú de los titulares de Exteriores de los países de la CELAC (la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños). El foro, que encabezará el jefe de la diplomacia rusa, Serguéi Lavrov, ayudará a Rusia para tomar el pulso, con sus colegas latinoamericanos a los problemas estelares de la política internacional.