Ayudante De Santa
06-11-2015, 22:19:08
Ver la Versión Completa Con Imagenes : Realidad y fantasía en relaciones ruso-estadounidenses Por Jorge Petinaud Martínez
PEDROELGRANDE
14-05-2013, 22:03:17
http://thumbnails101.imagebam.com/25462/aa727d254616012.jpg (http://www.imagebam.com/image/aa727d254616012)
Ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Serguei Lavrov, y el Secretario Estado norteamericano, John Kerry (Foto: PL)
El sistema de defensa antimisiles EE.UU. en Europa es la piedra angular de las contradicciones entre las dos potencias que sustentan su política interna en las leyes del mercado y cuya estrategia de relaciones internacionales tiene como brújula el pragmatismo.
La fantasía de un mejoramiento en las relaciones ruso-estadounidenses afloró tras la imagen sonriente del secretario de Estado norteamericano, John Kerry, junto a su par ruso, Serguei Lavrov, al final de una reciente visita a Moscú (Rusia).
Recibido por el presidente, Vladimir Putin, Kerry reconoció durante el encuentro con el mandatario la necesidad de poner fin al extremismo en Siria y lograr estabilidad en la región.
Tal afirmación del jefe de la diplomacia estadounidense confirmó la intención pragmática de Washington de buscar un acercamiento con Moscú antes de la reunión que sostendrán en junio en Irlanda del Norte Putin y su par, Barack Obama, al margen de la cumbre del G-8.
El emisario de Obama a Moscú demostró fidelidad al pragmatismo que caracteriza a las elites gobernantes de la superpotencia, cuando junto a Lavrov confirmó el acuerdo de organizar una nueva conferencia internacional sobre el conflicto en Siria.
Moscú y Washington coinciden en que el foro sesione en este mes de mayo en Ginebra (Suiza) con la participación de las dos partes contendientes y que tenga como base el comunicado emitido en esa ciudad suiza en junio de 2012, aseguró el ministro ruso.
Pretendemos agotar todas las posibilidades para sentar en la mesa de negociaciones a representantes del gobierno sirio y de la oposición, en un foro que sería continuación de la conferencia efectuada en 2012, dijo Lavrov, ante un Kerry sonriente.
Kerry sí, Kerry no
En vísperas de ese encuentro, el jefe de la diplomacia rusa había reiterado la inquietud de Moscú en relación con especulaciones sobre el uso de armas químicas en Siria.
Subrayó el canciller que las especulaciones sobre este asunto, ligado a la situación en Siria, son similares al esquema implantado en Irak con el pretexto de las armas de exterminio en masa para derrocar al presidente Sadam Hussein e invadir el país del golfo Pérsico.
Apenas unas horas después, la Comisión de Investigación de Naciones Unidas sobre Siria negó que existan "evidencias concluyentes" de que alguna de las partes en conflicto haya empleado ese tipo de armamento, información respaldada por la posición de Rusia.
Sin embargo, el propio Kerry salió al paso a esas informaciones al sostener en una conferencia transmitida en vivo que Washington posee "sólidas evidencias de que el régimen sirio usó armas químicas".
Basado en esa afirmación, el jefe de la diplomacia norteamericana aseguró que Estados Unidos cree que el gobierno del presidente Bashar al-Assad no está preparado para participar en la solución del conflicto.
Estas declaraciones tienen como trasfondo recientes golpes aéreos de Israel contra objetivos sirios y crecientes amenazas de una escalada militar de Tel Aviv contra Damasco.
Paralelamente, el secretario de Defensa estadounidense, Charles Chuck Hagel, expresó en Washington estar seguro de que aquel país árabe se desintegrará como resultado de la guerra estimulada y financiada por Occidente y algunos gobiernos de la región.
Respuesta de Putin
De inmediato llegó la respuesta de Putin el 10 de mayo, al final de sus pláticas en Sochi con el primer ministro británico, David Cameron, en lo que pareció un golpe de mano contra el jefe del Pentágono.
Rusia y Reino Unido coinciden en la necesidad de un arreglo pacífico en Siria y el mantenimiento de esa nación como estado territorialmente íntegro e independiente, sostuvo el estadista ante la prensa.
Putin ratificó que es interés común de Moscú y Londres lograr un pronto cese de la violencia, respaldar un proceso de arreglo pacífico, y reiteró la voluntad de preservar a esa nación árabe como país territorialmente íntegro y soberano.
Añadió que por iniciativa de Cameron fue analizado el posible desarrollo de ese proceso pacificador y las medidas conjuntas que las dos potencias podrían tomar.
En sus palabras por el aniversario 68 de la victoria sobre el fascismo el líder ruso ratificó la voluntad de defender la paz, la multipolaridad y el equilibrio estratégico, en alusión a Estados Unidos y sus aliados.
Su promesa de invertir lo necesario en arsenales para impedir otra conflagración como la Gran Guerra Patria (1941-1945), cuyo costo más doloroso fueron 27 millones de vidas, fue acuñada con la exhibición en la Plaza Roja de Moscú de algunos medios estratégicos disuasorios.
Miles de voces vitorearon, el paso de los misiles móviles Topol, capaces de transportar toneladas de cargas nucleares a más de ocho mil kilómetros, los de alta precisión Iskander, facultados para batir blancos a cientos de kilómetros y los bombarderos de alcance intercontinental, entre otros medios.
Piedra angular de las contradicciones
Empero, el sistema de defensa antimisiles (DAM) de Estados Unidos en Europa es la piedra angular de las contradicciones entre las dos potencias que sustentan su política interna en las leyes del mercado y cuya estrategia de relaciones internacionales tiene como brújula el pragmatismo.
El Kremlin ha exigido infructuosamente garantías jurídicas de cumplimiento obligatorio por Estados Unidos de que el escudo antimisiles del Pentágono en Europa no apunte contra Moscú.
Recientemente el director de la Agencia de Defensa de Misiles (MDA) estadounidense, vicealmirante James Syring, anunció que el gobierno de Obama analiza la posibilidad de revelar a Rusia datos clave del DAM desplegado por Washington desde la península ibérica a Europa del Este.
En medio de la peor crisis económica vivida por Estados Unidos, los defensores del control de armamentos consideran que esas revelaciones podrían facilitar el camino hacia la reducción del arsenal atómico de los interlocutores antagónicos.
Al referirse a este asunto, el politólogo Lajos Szaszdi consideró insuficiente esta iniciativa porque mientras no se firme un tratado de control de armas, prevalece como espada de Damocles la amenaza para Rusia.
Pese a que la versión del DAM Standard-3, SM3 Block IIB está postergado, si no se firma un tratado puede ser desplegada después en Europa, y así Estados Unidos y la OTAN tendrían la capacidad de destruir los cohetes intercontinentales rusos en caso de conflicto, opinó Szaszdi.
El intercambio de información no puede sustituir a un tratado de control de armas de defensa antimisiles como el de Proyectiles Antibalísticos (ABME) de 1972-1973, que precisaba cifras y obligaciones en materia del DAM, concluyó el experto.
Hasta el momento, la Casa Blanca se niega a sellar un tratado de este tipo porque no quiere verse obligada a limitar su capacidad de defensa anticoheteril, con objetivos reforzados recientemente en Alaska, California y Japón.
Esta es la realidad de las relaciones ruso-estadounidenses a un mes del encuentro entre Putin y Obama en Irlanda del Norte.
Fuente: bit.ly/9zCoVY
Ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Serguei Lavrov, y el Secretario Estado norteamericano, John Kerry (Foto: PL)
El sistema de defensa antimisiles EE.UU. en Europa es la piedra angular de las contradicciones entre las dos potencias que sustentan su política interna en las leyes del mercado y cuya estrategia de relaciones internacionales tiene como brújula el pragmatismo.
La fantasía de un mejoramiento en las relaciones ruso-estadounidenses afloró tras la imagen sonriente del secretario de Estado norteamericano, John Kerry, junto a su par ruso, Serguei Lavrov, al final de una reciente visita a Moscú (Rusia).
Recibido por el presidente, Vladimir Putin, Kerry reconoció durante el encuentro con el mandatario la necesidad de poner fin al extremismo en Siria y lograr estabilidad en la región.
Tal afirmación del jefe de la diplomacia estadounidense confirmó la intención pragmática de Washington de buscar un acercamiento con Moscú antes de la reunión que sostendrán en junio en Irlanda del Norte Putin y su par, Barack Obama, al margen de la cumbre del G-8.
El emisario de Obama a Moscú demostró fidelidad al pragmatismo que caracteriza a las elites gobernantes de la superpotencia, cuando junto a Lavrov confirmó el acuerdo de organizar una nueva conferencia internacional sobre el conflicto en Siria.
Moscú y Washington coinciden en que el foro sesione en este mes de mayo en Ginebra (Suiza) con la participación de las dos partes contendientes y que tenga como base el comunicado emitido en esa ciudad suiza en junio de 2012, aseguró el ministro ruso.
Pretendemos agotar todas las posibilidades para sentar en la mesa de negociaciones a representantes del gobierno sirio y de la oposición, en un foro que sería continuación de la conferencia efectuada en 2012, dijo Lavrov, ante un Kerry sonriente.
Kerry sí, Kerry no
En vísperas de ese encuentro, el jefe de la diplomacia rusa había reiterado la inquietud de Moscú en relación con especulaciones sobre el uso de armas químicas en Siria.
Subrayó el canciller que las especulaciones sobre este asunto, ligado a la situación en Siria, son similares al esquema implantado en Irak con el pretexto de las armas de exterminio en masa para derrocar al presidente Sadam Hussein e invadir el país del golfo Pérsico.
Apenas unas horas después, la Comisión de Investigación de Naciones Unidas sobre Siria negó que existan "evidencias concluyentes" de que alguna de las partes en conflicto haya empleado ese tipo de armamento, información respaldada por la posición de Rusia.
Sin embargo, el propio Kerry salió al paso a esas informaciones al sostener en una conferencia transmitida en vivo que Washington posee "sólidas evidencias de que el régimen sirio usó armas químicas".
Basado en esa afirmación, el jefe de la diplomacia norteamericana aseguró que Estados Unidos cree que el gobierno del presidente Bashar al-Assad no está preparado para participar en la solución del conflicto.
Estas declaraciones tienen como trasfondo recientes golpes aéreos de Israel contra objetivos sirios y crecientes amenazas de una escalada militar de Tel Aviv contra Damasco.
Paralelamente, el secretario de Defensa estadounidense, Charles Chuck Hagel, expresó en Washington estar seguro de que aquel país árabe se desintegrará como resultado de la guerra estimulada y financiada por Occidente y algunos gobiernos de la región.
Respuesta de Putin
De inmediato llegó la respuesta de Putin el 10 de mayo, al final de sus pláticas en Sochi con el primer ministro británico, David Cameron, en lo que pareció un golpe de mano contra el jefe del Pentágono.
Rusia y Reino Unido coinciden en la necesidad de un arreglo pacífico en Siria y el mantenimiento de esa nación como estado territorialmente íntegro e independiente, sostuvo el estadista ante la prensa.
Putin ratificó que es interés común de Moscú y Londres lograr un pronto cese de la violencia, respaldar un proceso de arreglo pacífico, y reiteró la voluntad de preservar a esa nación árabe como país territorialmente íntegro y soberano.
Añadió que por iniciativa de Cameron fue analizado el posible desarrollo de ese proceso pacificador y las medidas conjuntas que las dos potencias podrían tomar.
En sus palabras por el aniversario 68 de la victoria sobre el fascismo el líder ruso ratificó la voluntad de defender la paz, la multipolaridad y el equilibrio estratégico, en alusión a Estados Unidos y sus aliados.
Su promesa de invertir lo necesario en arsenales para impedir otra conflagración como la Gran Guerra Patria (1941-1945), cuyo costo más doloroso fueron 27 millones de vidas, fue acuñada con la exhibición en la Plaza Roja de Moscú de algunos medios estratégicos disuasorios.
Miles de voces vitorearon, el paso de los misiles móviles Topol, capaces de transportar toneladas de cargas nucleares a más de ocho mil kilómetros, los de alta precisión Iskander, facultados para batir blancos a cientos de kilómetros y los bombarderos de alcance intercontinental, entre otros medios.
Piedra angular de las contradicciones
Empero, el sistema de defensa antimisiles (DAM) de Estados Unidos en Europa es la piedra angular de las contradicciones entre las dos potencias que sustentan su política interna en las leyes del mercado y cuya estrategia de relaciones internacionales tiene como brújula el pragmatismo.
El Kremlin ha exigido infructuosamente garantías jurídicas de cumplimiento obligatorio por Estados Unidos de que el escudo antimisiles del Pentágono en Europa no apunte contra Moscú.
Recientemente el director de la Agencia de Defensa de Misiles (MDA) estadounidense, vicealmirante James Syring, anunció que el gobierno de Obama analiza la posibilidad de revelar a Rusia datos clave del DAM desplegado por Washington desde la península ibérica a Europa del Este.
En medio de la peor crisis económica vivida por Estados Unidos, los defensores del control de armamentos consideran que esas revelaciones podrían facilitar el camino hacia la reducción del arsenal atómico de los interlocutores antagónicos.
Al referirse a este asunto, el politólogo Lajos Szaszdi consideró insuficiente esta iniciativa porque mientras no se firme un tratado de control de armas, prevalece como espada de Damocles la amenaza para Rusia.
Pese a que la versión del DAM Standard-3, SM3 Block IIB está postergado, si no se firma un tratado puede ser desplegada después en Europa, y así Estados Unidos y la OTAN tendrían la capacidad de destruir los cohetes intercontinentales rusos en caso de conflicto, opinó Szaszdi.
El intercambio de información no puede sustituir a un tratado de control de armas de defensa antimisiles como el de Proyectiles Antibalísticos (ABME) de 1972-1973, que precisaba cifras y obligaciones en materia del DAM, concluyó el experto.
Hasta el momento, la Casa Blanca se niega a sellar un tratado de este tipo porque no quiere verse obligada a limitar su capacidad de defensa anticoheteril, con objetivos reforzados recientemente en Alaska, California y Japón.
Esta es la realidad de las relaciones ruso-estadounidenses a un mes del encuentro entre Putin y Obama en Irlanda del Norte.
Fuente: bit.ly/9zCoVY
vBulletin® v3.8.9, Derechos de autor ©2000-2024, Jelsoft Enterprises Ltd.
SEO by vBSEO
SEO by vBSEO