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Ver la Versión Completa Con Imagenes : Los 7 pecados capitales, en Cartagena


Ayudante De Santa
06-11-2015, 22:19:08
Los mejores licores
jodido_pateo
28-04-2012, 13:24:25
Según la Iglesia Católica, los siete pecados capitales que atentan contra la moral cristiana, enumerados por el papa Gregorio l hace más de 1500 años, son: la lujuria, la gula, la avaricia, la pereza, la ira, la envidia y la soberbia. Seguramente, de todo un poco de esto hubo en la reciente Cumbre de las Américas en Cartagena, y pareciera que la lujuria, el pecado que encabeza la lista, hubiera sido el principal de todos los males; pero no, la cosa no es por ahí.
Sabemos que la lujuria, el sexo, la prostitución han estado ligados al hombre desde su génesis, y en esta y en todas las cumbres presidenciales, grandes encuentros internacionales, farras de provincia, fiestas patronales o reuniones de amigos, en Cartagena o en Constantinopla, hay y ha habido y habrá encuentros "non santos".
Para mí, los siete pecados capitales de la Cumbre de Cartagena fueron:
Primero: la diplomacia babosa, de la que habla el expresidente Uribe, en la cual, además de los besos, los abrazos, las sonrisas, no pasa nada que ayude a superar desencuentros de fondo y a unir a Latinoamérica en torno a ideales como la superación del enorme desequilibrio económico que lleva al "enriquecimiento hasta límites obscenos a expensas del bien común", el cual, dicho sea de paso, es uno de pecados de la lista presentada el 10 de marzo de 2008 por el Vaticano con la denominación de "pecados sociales o nuevos pecados capitales".
Segundo, y este pecado va muy ligado con el primero: el no haber llegado a un documento final en el cual, al menos, se hubieran puesto de acuerdo sobre un solo tema trascendente. Esto, a mi juicio, se debió más que a la posición de Estados Unidos, a que, sencillamente, los preparativos giran en torno a lo cosmético y no a lo de fondo: un documento preliminar fruto de una agenda previa, con discusiones concretas, intensas sobre un asunto específico. El de las drogas, por ejemplo, sobre el que América Latina hace décadas patina, podría ser el corazón de una cumbre venidera, preparada en los próximos años, lo que permitiría llegar a ratificar, a firmar, a dar el toque final, no a empezar a discutir, en medio del jolgorio.
Tercero: el cubrimiento mediático antes, durante y después de la Cumbre, centrado en "preparativos" antes que en temas. Todo se reduce a titulares, grandes anuncios, verdades a medias, cubrimiento de banquetes y muy pocos debates de fondo ante cámaras sobre asuntos vitales. A cambio de eso, despliegues absurdos a asuntos puntuales: importó más la equivocación de Shakira al cantar el Himno Nacional que su aporte como mujer, como colombiana, como artista, a la lucha contra la desigualdad y la pobreza. Merece más tinta una frase poco exacta de la canciller colombiana sobre el tema de la sexualidad masculina que un análisis ponderado de lo que pasa con la prostitución infantil y juvenil en Cartagena.
Cuarto: el derroche. Se habla de más de100.000 millones de pesos. En todo caso la Cumbre no fue un encierro de presidentes para trabajar en serio sobre asuntos puntuales; fue un carnaval donde se pensó más en la rumba que en las sesiones de trabajo.
Quinto: una vez más, la pérdida de fe de los colombianos, y posiblemente de los latinoamericanos, sobre nuestros gobernantes, sus prioridades, sus metas, sus sueños. Los indignados del mundo podrán encontrar en esta cumbre mil y una razones más para reafirmar que la civilización humana anda sin rumbo.
Sexto: la ausencia de liderazgo de Estados Unidos no solo en su capacidad para asumir posiciones de avanzada frente a asuntos vitales para la humanidad, sino en aspectos tan trascendentales para ese país como la disciplina y el rigor de sus organismos de seguridad. Pareciera que la lección de las Torres Gemelas no hubiera sido aprendida.
Séptimo: la reafirmación de la imagen de Cartagena como un escenario propicio para el turismo sexual donde, una vez más, la mujer es utilizada y ultrajada. Curiosamente, cuatro voces, de mujeres todas ellas, terminaron siendo la noticia: la de una niña que pidió la unidad latinoamericana en la instalación de la cumbre; la de una prostituta desairada por no pago; la de las mujeres cubanas que se atrevieron a gritar a viva voz pidiendo democracia para su país y la de Cristina Fernández, quien, con su susurro al oído de Santos cuando este terminó el discurso de instalación, expresó más que mil palabras. Lo que yo leí fue: no sea baboso hombre, ¿dónde quedaron mis Malvinas? ¿Vinimos a darnos palmaditas o a tomar decisiones?

http://www.eltiempo.com/opinion/columnistas/otroscolumnistas/los-7-pecados-capitales-en-cartagena-sonia-gomez-gomez-columnista-de-el-tiempo_11673441-4

Ayudante De Santa
06-11-2015, 22:19:08
Los mejores licores
OPHIUCHUS
28-04-2012, 23:24:25
Siempre lo he dicho: Cuca de cumbre :).

Hannibal Lecter
29-04-2012, 10:39:01
en un pais que se derrocha plata y se roba aplacer no asombra otro acto de robo y derroche.

Isidorito
29-04-2012, 10:45:35
Buen balance el de la cumbre.