Cómo mejorar la intimidad en la pareja [Archivo]

Unfor

07-04-2012, 22:50:02

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El diálogo con la pareja permite conocer los gustos del otro y ponerse de acuerdo en los juegos amorosos y la sexualidad, publicó diaadia.com.ar (http://www.diaadia.com.ar/cordoba/como-mejorar-intimidad-pareja)

Muchas investigaciones científicas han estado dirigidas a desentrañar el complejo mundo de la atracción y el deseo sexual. Hormonas, sentidos, experiencias pasadas, sentimientos… muchos factores participan en el instante en el que una pareja se da un beso de amor.

Pero no todo puede explicarlo la ciencia.

Los científicos han tenido que admitir que el amor y el erotismo no son fórmulas químicas. Hay, todos lo sabemos, un “algo” especial que hace que esa persona y no otra sea el centro de nuestra atención. Y no hay estudio ni lo habrá que pueda decirnos por qué. Mientras los expertos siguen investigando, reunimos todos los recursos para mejorar nuestro encuentro íntimo. Eso sí, ¡comprobados por la ciencia!

1. Las mujeres también tienen testosterona (y pueden aprovecharla)
Varias veces se ha comprobado la correlación existente entre esta hormona masculina y el deseo sexual femenino. De hecho, las mujeres que tienen un nivel medio o alto de testosterona (de acuerdo a los parámetros estipulados para su sexo) tienen mayores probabilidades de tener sueños eróticos y son mucho más activas en las relaciones sexuales. Para las mujeres con un nivel bajo de esta hormona, existen terapias niveladoras, prescritas únicamente por un médico.

2. Tener en cuenta los aromas que activan el deseo
Según algunos estudios científicos, el aroma a lavanda, a rosas y a calabaza, por ejemplo, provocan un mayor flujo sanguíneo hacia las zonas sexuales. Más allá de las “opciones” propuestas por los médicos, lo cierto es que los aromas agradables son poderosos estimulantes sexuales: un perfume que le guste al otro, velas aromáticas o inciensos son excelentes alternativas para invitar a un sentido fundamental (el olfato) al encuentro.

3. Si hay dolor de cabeza… ¡mejor!
Los orgasmos son tratamientos muy efectivos para terminar con las cefaleas, ya que la cantidad de endorfinas que se liberan durante el clímax neutralizan los dolores. Así que los dolores de cabeza ya no son excusas para evitar la relación sexual, sino para iniciarla “con fines terapéuticos”.
4. La experiencia mejora la satisfacción sexual

Según parece, no son sólo ellos los que llegan a su mayor nivel amatorio después de los 30; en las mujeres también se cumple esta regla. Aproximadamente, tanto las veinteañeras como las treintañeras en promedio tienen la misma frecuencia de encuentros sexuales (3 por semana); pero en ellos, el 75% de las de más de 20 tuvieron orgasmos, mientras que pasando los 30, el 88% había disfrutado de uno en cada relación.

5. La ropa importa mucho (aunque después salga de escena)
Muchísimos hombres asumen que los excita mucho más ver a sus parejas vestidas o “ligeras de ropa”, que directamente desnudas; aprenda a jugar con sus ropas en la fase de la etapa previa, y cuando las telas ya no sean necesarias, ese preámbulo habrá mejorado (y mucho) los resultados finales.

6. Películas: no son el mejor estimulante femenino (hay otras opciones)
Aunque la iniciativa de ver estos films de a dos puede resultar divertida, la realidad es que las películas eróticas no excitan mucho a las mujeres, porque en ellas el placer femenino está muy subordinado al masculino; tal vez, la mejor opción sea ver algo más delicado, que puedan disfrutar los dos por igual.

7. La actividad física siempre es buena, hasta para la zona genital
¿Oyó hablar de los ejercicios Kegel? Consisten en la contracción rítmica de los músculos del peritoneo (el movimiento es el mismo que se hace al contener la orina), que sirve para tonificar los músculos de la vagina y prepararlos para las contracciones del orgasmo. Además, son beneficiosos para controlar la incontinencia urinaria.

8. No al consumo elevado de grasas
Una alimentación muy rica en grasas no sólo repercute en el peso, sino también en el deseo sexual, ya que puede interferir en la producción de testosterona. En cambio, un vaso de cerveza puede ser útil como estimulante, pero atención: a partir de la tercera cerveza, estos “beneficios” desaparecen, y el efecto es exactamente el contrario.

9. El cabello también puede ser una zona erógena
El cuero cabelludo es una de las áreas más efectivas para estimular sexualmente, por la gran cantidad de terminaciones nerviosas que tiene. Por eso, una buena forma de tomar la iniciativa es jugar con el pelo del otro, y pedirle que nos masajee también, con ganas y “buen arte”.

10. Aproveche el sexo como fuente de salud
Está comprobado científicamente: una relación sexual normal (sin niveles de rendimiento inusitados) no sólo quema muchas calorías, sino que en una frecuencia de tres veces por semana ayuda a controlar los niveles de colesterol, fortalece el sistema inmunológico, aumenta la expectativa de vida, reduce el estrés y mejora notoriamente el aspecto de la piel.

11. Para disfrutar mejor de los encuentros, haga actividad física
15 minutos diarios de actividad física aeróbica (caminar, correr, andar en bicicleta) alcanzan para activar el funcionamiento de la testosterona, lo cual potencia el deseo y la performance sexual. Por eso, una de las principales consignas para el buen sexo es “no al sedentarismo”.

12. Explore nuevas zonas de su cuerpo, y de su pareja
Por ejemplo, préstele más atención a los pies; no se trata de ninguna conducta extraña, sino de aprovechar una zona sensible a la estimulación erótica. Se pueden hacer masajes con cremas o aceites, o directamente darse besos.

13. Lubricación: un paso importantísimo para llegar al clímax
La lubricación vaginal es la respuesta orgánica ante la estimulación sexual, que sirve de preparación para la penetración. Muchas mujeres, aún sintiéndose excitadas, no logran que su vagina se humedezca lo necesario como para continuar. En ese caso, habrá que dedicar algo más de tiempo al juego previo (la estimulación con los dedos, en la zona del Punto G, en la entrada de la vagina, será útil), o bien utilizar un lubricante, que se compra en la farmacia. Si el problema persiste, es recomendable consultar al médico.

14. otras versiones: sólo si los dos están de acuerdo
Más allá de los prejuicios, el sexo anal suele ser realizado por varias parejas “hétero”; pero la mujer, en estos casos, tiene que estar completamente de acuerdo, y bien relajada para intentarlo, ya que el ano y el recto no están “diseñados” para la penetración, y los músculos internos están siempre contraídos, salvo cuando aparece el reflejo de ir al baño. No utilice sustancias grasas ni cremas, sino un lubricante a base de agua.

15. El uso de preservativo puede ser un ritual compartido
La instancia de colocarse un profiláctico tiende a marcar una pequeña ruptura en el clima erótico que acompaña un encuentro sexual. Por eso, lo mejor que pueden hacer es evitar que parezca un trámite: ella también puede colaborar en la tarea, estimulando a su pareja y evitando que la tensión disminuya.

16. Rienda suelta a la respiración
No hay por qué respirar moderadamente: las inspiraciones y exhalaciones profundas ayudan a llegar al orgasmo. Mientras tanto, pruebe echar la cabeza un poco hacia atrás: el cerebro (un órgano profundamente sexual, aunque esté lejos de los genitales, porque es la fuente de la imaginación erótica) recibirá mayor afluencia de sangre y estará más oxigenado.

17. Para llegar al orgasmo… no olvidarse del sexo oral
Las mujeres que disfrutan de este modo pueden intensificar sus orgasmos, o directamente llegar a ellos. Para ellos es una práctica muy gratificante también, y en esta variante sexual es muy importante que ambos se guíen e indiquen la intensidad, el modo y el lugar en donde les gusta más ser estimulados.

18. No buscar incansablemente el “orgasmo simultáneo”
Que ambos lleguen al mismo tiempo al clímax es algo que les sucede a algunas parejas, pero a otras no, y en ninguno de los casos repercute en el rendimiento, en el goce, ni indica que la relación sexual sea de menor calidad que otras. Cada uno debe llegar al orgasmo a su debido tiempo porque, de todos modos, también es muy placentero ver disfrutar a la pareja.

19. Una sesión exprés no siempre es satisfactoria
Los encuentros sexuales rápidos pueden tener su encanto, pero cuando se transforman en la regla pueden rutinizar y anular las posibilidades de una buena relación íntima, pues hay que tener en cuenta que las mujeres necesitan, como mínimo, 20 minutos de estimulación previa para llegar al orgasmo durante la penetración. Por eso, el consejo es dedicarle el tiempo necesario al juego previo y al coito propiamente dicho, para que ambos puedan sentirse bien.

20. Comunicación: la condición básica para disfrutar y evitar frustraciones
Las relaciones sexuales también tienen una parte hablada: es la que pueden utilizar los dos para despejar dudas, preguntar lo que no se sabe y averiguar qué es lo que más le gusta al otro, además de contar lo que nos parece especialmente estimulante.
El buen resultado de los encuentros íntimos también depende de la capacidad de cada uno de darse a entender y demostrar cómo, cuándo y dónde está esperando los mejores estímulos eróticos y amorosos por parte de la pareja.