Ayudante De Santa
06-11-2015, 22:19:08
Ver la Versión Completa Con Imagenes : "Aquí no ha habido muertos"
Heráclito
11-12-2011, 15:39:50
No es nuevo. Los dueños del poder lo han hecho desde siempre. Aparte de las armas, utilizan la mentira para "matar" a sus víctimas de otra manera, a través del desprestigio o simplemente negando su existencia. En Colombia una nueva guerra comienza, la de la verdad. Preparémonos para ella:
"Aquí no ha habido muertos"
Por León Valencia
http://www.semana.com/photos/1545/ImgArticulo_T1_102349_20111210_140133.jpg
Quizás esta vez no ocurra lo de la masacre de las Bananeras. Quizás los promotores del olvido, los usurpadores de vidas y bienes, no se salgan con la suya.
Sábado 10 Diciembre 2011
Este es el eco de la masacre de las Bananeras en Cien Años de Soledad:
"José Arcadio Segundo no habló mientras no terminó el café.
-Debían ser como tres mil- murmuró.
-¿Qué?
-Los muertos -aclaró el-. Debían ser todos los que estaban en la estación.
La mujer lo midió con una mirada de lástima. 'Aquí no ha habido muertos', dijo. 'Desde los tiempos de tu tío, el coronel, no ha pasado nada en Macondo'. En tres cocinas donde se detuvo José Arcadio Segundo antes de llegar a la casa le dijeron lo mismo: 'No hubo muertos'".
Cuando José Arcadio Segundo pronunció estas palabras, después de regresar a Macondo, haciendo el recorrido inverso del tren que llevaba los obreros muertos hacia el mar, ya estaba en pleno furor el aguacero interminable que inundó la región, ya se había proferido el bando militar que aseguraba que no existía muerte alguna y anunciaba total tranquilidad en las bananeras, ya todos los medios de divulgación del gobierno se habían encargado de confirmar una y otra vez que no había ninguna víctima entre los trabajadores del banano.
Por lo visto, el artificio es muy viejo. Así, en los años que corren alguien, sin el más leve rubor, dijo que no había conflicto; otro aseguró que los desplazados por la violencia eran en realidad migrantes; otro juró que los desaparecidos del Palacio de Justicia eran un invento y el más ilustrado de todos señaló que era una insensatez escarbar el pasado, hacer el inventario de las tierras despojadas, de las heridas causadas, remover viejos odios, aupar el demonio de nuevas violencias, tendríamos que dedicarnos tranquilamente al porvenir, dijo.
Después se fueron hasta el lejano Mapiripán y encontraron allí a una mujer atribulada por el peso de su mentira, una falsa víctima que había urdido una trama para involucrar a los militares y a los paramilitares en la muerte y desaparición de sus familiares. Amparados en esta confesión se dieron a la tarea de reducir a polvo de memorias extraviadas la matanza atroz de no menos de 50 personas.
Luego, en la sin igual Cartagena, incoaron un proceso judicial para demostrar que nunca se había producido el desplazamiento de los campesinos que reclaman la posesión de la finca Las Pavas, en el sur de Bolívar. Lograron, en una primera instancia, una sentencia a su favor y otra vez se alzaron mil voces altisonantes y poderosas para insistir en que, en las denuncias del despojo, hay una larvada mentira que traerá una desgracia sobre el campo colombiano.
Es apenas el inicio. Todo indica que la disputa por la verdad, la justicia y la reparación de las víctimas de los últimos 25 años será la más enconada y misteriosa batalla de nuestra historia. Será una leyenda interminable de enfrentamientos en la inquietante noche de los campos del país, en los estrados judiciales, en los medios de prensa, en la opinión internacional.
Quizás esta vez no ocurra lo de la masacre de las Bananeras. Quizás los promotores del olvido, los usurpadores de vidas y bienes, no se salgan con la suya. Tuve esa ilusión el domingo pasado en un desayuno en el Palacio de Nariño. Fue un evento extraño. El presidente Santos reunió por cuatro horas a tres de sus ministros, a los generales Navas y Naranjo, al consejero de Seguridad y a diez altos funcionarios encargados de llevar a cabo la Ley de Víctimas y Restitución de Tierras, con los representantes de seis modestas organizaciones de la sociedad civil.
Mientras miraba al circunspecto Navas y al elocuente Naranjo, mientras pensaba en la historia de cada uno de los ministros y en el papel de los funcionarios que acudían a la cita, le oí decir a Santos que nada ni nadie podría impedir la reparación de las víctimas y la restitución de tierras, que las Fuerzas Armadas darían todo para hacer cumplir la ley, que estaba allí para sellar una alianza con la sociedad civil y para anunciar una gran movilización social que protegiera este proyecto del asedio de la extrema derecha y de la extrema izquierda."
Fuente: Semana (http://www.semana.com/opinion/aqui-no-ha-habido-muertos/168890-3.aspx)
"Aquí no ha habido muertos"
Por León Valencia
http://www.semana.com/photos/1545/ImgArticulo_T1_102349_20111210_140133.jpg
Quizás esta vez no ocurra lo de la masacre de las Bananeras. Quizás los promotores del olvido, los usurpadores de vidas y bienes, no se salgan con la suya.
Sábado 10 Diciembre 2011
Este es el eco de la masacre de las Bananeras en Cien Años de Soledad:
"José Arcadio Segundo no habló mientras no terminó el café.
-Debían ser como tres mil- murmuró.
-¿Qué?
-Los muertos -aclaró el-. Debían ser todos los que estaban en la estación.
La mujer lo midió con una mirada de lástima. 'Aquí no ha habido muertos', dijo. 'Desde los tiempos de tu tío, el coronel, no ha pasado nada en Macondo'. En tres cocinas donde se detuvo José Arcadio Segundo antes de llegar a la casa le dijeron lo mismo: 'No hubo muertos'".
Cuando José Arcadio Segundo pronunció estas palabras, después de regresar a Macondo, haciendo el recorrido inverso del tren que llevaba los obreros muertos hacia el mar, ya estaba en pleno furor el aguacero interminable que inundó la región, ya se había proferido el bando militar que aseguraba que no existía muerte alguna y anunciaba total tranquilidad en las bananeras, ya todos los medios de divulgación del gobierno se habían encargado de confirmar una y otra vez que no había ninguna víctima entre los trabajadores del banano.
Por lo visto, el artificio es muy viejo. Así, en los años que corren alguien, sin el más leve rubor, dijo que no había conflicto; otro aseguró que los desplazados por la violencia eran en realidad migrantes; otro juró que los desaparecidos del Palacio de Justicia eran un invento y el más ilustrado de todos señaló que era una insensatez escarbar el pasado, hacer el inventario de las tierras despojadas, de las heridas causadas, remover viejos odios, aupar el demonio de nuevas violencias, tendríamos que dedicarnos tranquilamente al porvenir, dijo.
Después se fueron hasta el lejano Mapiripán y encontraron allí a una mujer atribulada por el peso de su mentira, una falsa víctima que había urdido una trama para involucrar a los militares y a los paramilitares en la muerte y desaparición de sus familiares. Amparados en esta confesión se dieron a la tarea de reducir a polvo de memorias extraviadas la matanza atroz de no menos de 50 personas.
Luego, en la sin igual Cartagena, incoaron un proceso judicial para demostrar que nunca se había producido el desplazamiento de los campesinos que reclaman la posesión de la finca Las Pavas, en el sur de Bolívar. Lograron, en una primera instancia, una sentencia a su favor y otra vez se alzaron mil voces altisonantes y poderosas para insistir en que, en las denuncias del despojo, hay una larvada mentira que traerá una desgracia sobre el campo colombiano.
Es apenas el inicio. Todo indica que la disputa por la verdad, la justicia y la reparación de las víctimas de los últimos 25 años será la más enconada y misteriosa batalla de nuestra historia. Será una leyenda interminable de enfrentamientos en la inquietante noche de los campos del país, en los estrados judiciales, en los medios de prensa, en la opinión internacional.
Quizás esta vez no ocurra lo de la masacre de las Bananeras. Quizás los promotores del olvido, los usurpadores de vidas y bienes, no se salgan con la suya. Tuve esa ilusión el domingo pasado en un desayuno en el Palacio de Nariño. Fue un evento extraño. El presidente Santos reunió por cuatro horas a tres de sus ministros, a los generales Navas y Naranjo, al consejero de Seguridad y a diez altos funcionarios encargados de llevar a cabo la Ley de Víctimas y Restitución de Tierras, con los representantes de seis modestas organizaciones de la sociedad civil.
Mientras miraba al circunspecto Navas y al elocuente Naranjo, mientras pensaba en la historia de cada uno de los ministros y en el papel de los funcionarios que acudían a la cita, le oí decir a Santos que nada ni nadie podría impedir la reparación de las víctimas y la restitución de tierras, que las Fuerzas Armadas darían todo para hacer cumplir la ley, que estaba allí para sellar una alianza con la sociedad civil y para anunciar una gran movilización social que protegiera este proyecto del asedio de la extrema derecha y de la extrema izquierda."
Fuente: Semana (http://www.semana.com/opinion/aqui-no-ha-habido-muertos/168890-3.aspx)
Ayudante De Santa
06-11-2015, 22:19:08
paisafe
11-12-2011, 16:00:14
Buen escrito.........................gracias
Heráclito
11-12-2011, 16:38:31
Buen escrito.........................gracias
Y muy diciente. :-(
Y muy diciente. :-(
Sanabria
11-12-2011, 16:55:13
Y muy diciente. :-(
http://i970.photobucket.com/albums/ae182/sanabria11/jejeje.gif
http://i970.photobucket.com/albums/ae182/sanabria11/jejeje.gif
Misos
11-12-2011, 17:12:10
Deben proceder con gran cuidado para tal propósito
cesar coy
11-12-2011, 17:31:04
Bueeehhh...esperar que en veinte años llegue al poder un amigo de Mico mandante Chavez y al mejor estilo Uribe con los crimenes de los paras nos convenza que las Farc nunca asesinaron a nadie.
Heráclito
11-12-2011, 17:44:36
Bueeehhh...esperar que en veinte años llegue al poder un amigo de Mico mandante Chavez y al mejor estilo Uribe con los crimenes de los paras nos convenza que las Farc nunca asesinaron a nadie.
Eso depende de nosotros. Así como cada judío luchó para que el mundo recordara el Holocausto, así debemos los colombianos recordarle al mundo los crímenes contra la humanidad que cometieron y siguen cometiendo los paracos, la guerrilla y los agentes del Estado como Plazas Vega, Arias Cabrales, Rito Alejo del Río... y luchar porque todos, sin excepción sean castigados por la justicia colombiana o por la Corte Penal Internacional. Sólo así podremos construir un país en paz.
Eso depende de nosotros. Así como cada judío luchó para que el mundo recordara el Holocausto, así debemos los colombianos recordarle al mundo los crímenes contra la humanidad que cometieron y siguen cometiendo los paracos, la guerrilla y los agentes del Estado como Plazas Vega, Arias Cabrales, Rito Alejo del Río... y luchar porque todos, sin excepción sean castigados por la justicia colombiana o por la Corte Penal Internacional. Sólo así podremos construir un país en paz.
armando2007
11-12-2011, 19:20:57
Eso depende de nosotros. Así como cada judío luchó para que el mundo recordara el Holocausto, así debemos los colombianos recordarle al mundo los crímenes contra la humanidad que cometieron y siguen cometiendo los paracos, la guerrilla y los agentes del Estado como Plazas Vega, Arias Cabrales, Rito Alejo del Río... y luchar porque todos, sin excepción sean castigados por la justicia colombiana o por la Corte Penal Internacional. Sólo así podremos construir un país en paz.
Buen comentario.
Y pensar que hay Colombianos que les da un "fresquito" cuando aparecen dos o tres casos de falsas víctimas, pero para los decenas de miles, qué digo millones de víctimas, sólo burla, tergiversaciones y sarcasmos.
Buen comentario.
Y pensar que hay Colombianos que les da un "fresquito" cuando aparecen dos o tres casos de falsas víctimas, pero para los decenas de miles, qué digo millones de víctimas, sólo burla, tergiversaciones y sarcasmos.
EricCartman
11-12-2011, 19:49:04
" En Colombia una nueva guerra comienza, la de la verdad. Preparémonos para ella "
Frase absolutamente cierta, durante años ciertos periodistas y personajes jugaron y manipularon la verdad a su antojo, cruzaron una línea que jamás se debió cruzar.
Su contraparte no se quedaría de brazos cruzados durante mucho tiempo, replican ahora su estrategia.????
Ahora distingir la verdad y la mentira será una tarea que demandará mucho más que sentido común.
Frase absolutamente cierta, durante años ciertos periodistas y personajes jugaron y manipularon la verdad a su antojo, cruzaron una línea que jamás se debió cruzar.
Su contraparte no se quedaría de brazos cruzados durante mucho tiempo, replican ahora su estrategia.????
Ahora distingir la verdad y la mentira será una tarea que demandará mucho más que sentido común.
SlayerSlave
11-12-2011, 21:10:39
lastima que para muchos los crimenes en colombia son solo los de izquierda....
SIMON CON EL RUDE
12-12-2011, 02:15:26
lastima que para muchos los crimenes en colombia son solo los de izquierda....
en todo el mundo, la mayoria de personas ya perdieron la capacidad de un pensamiento critico objetivo, o simplemente no la quieren usar
en todo el mundo, la mayoria de personas ya perdieron la capacidad de un pensamiento critico objetivo, o simplemente no la quieren usar
santiago®
12-12-2011, 11:19:15
en todo el mundo, la mayoria de personas ya perdieron la capacidad de un pensamiento critico objetivo, o simplemente no la quieren usar
Ese trabajo se lo hacen los medios. Dura la cosa, no se sabe a quien creerle
Ese trabajo se lo hacen los medios. Dura la cosa, no se sabe a quien creerle
Heráclito
12-12-2011, 11:28:42
Ese trabajo se lo hacen los medios. Dura la cosa, no se sabe a quien creerle
A las víctimas, a la gente seria, a periodistas íntegros que día a dia denuncian la infamia. No todo está perdido, y como lo dice el autor del escrito que dio origen a este topic, el Presidente Santos está empeñado en sacar adelante esta ley de devolución de tierras.
Desde el comienzo se sabía que no iba a ser fácil. Que los ladrones iban a revirar con violencia, con calumnias, con compra de funcionarios, con organizaciones de fachada.
Hay que seguir dándoles la pelea, denunciándolos, como lo hizo valientemente Alonso Salazar en Medellín con Luis Pérez y su alianza con los paracos. Como lo hacen muchos aunque sus vidas corran peligro.
Esa es la buena noticia. A pesar de todo no se baja la guardia como en el pasado. Hay esperanza.
A las víctimas, a la gente seria, a periodistas íntegros que día a dia denuncian la infamia. No todo está perdido, y como lo dice el autor del escrito que dio origen a este topic, el Presidente Santos está empeñado en sacar adelante esta ley de devolución de tierras.
Desde el comienzo se sabía que no iba a ser fácil. Que los ladrones iban a revirar con violencia, con calumnias, con compra de funcionarios, con organizaciones de fachada.
Hay que seguir dándoles la pelea, denunciándolos, como lo hizo valientemente Alonso Salazar en Medellín con Luis Pérez y su alianza con los paracos. Como lo hacen muchos aunque sus vidas corran peligro.
Esa es la buena noticia. A pesar de todo no se baja la guardia como en el pasado. Hay esperanza.
OPHIUCHUS
12-12-2011, 20:03:41
Hay que creerle a los que piden investigación ante todo.
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