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Ver la Versión Completa Con Imagenes : Tras los pasos de Mauricio Babilonia.


Ayudante De Santa
06-11-2015, 22:19:08
Los mejores licores
Samuelsb
31-05-2011, 16:24:25
Basado en el personaje de García Márquez de Cien años de soledad.

Después de haberle entregado el regalo a Meme y escribir como garabateado “nos vemos el sábado en el cine”, Mauricio Babilonia tuvo un mal presentimiento, sintió que el mundo se le iba por el revoleteo de las alas de las mariposas amarillas que lo seguían a donde caminaba, le faltaba el aire y entonces con un trapo espantaba a las “Malditas mariposas”, era tal su desazón que decidió no acudir a la cita pactada con Meme, se encerró toda la semana en el taller de la compañía bananera dispuesto a evitar cualquier pensamiento que le trajese a la cabeza algún mal presagio; una tarde cualquiera de la semana, su jefe le pidió que trasportara al señor Brown en la noche al recital de poesía que se desarrollaría en el cine de Macondo y que el señor Brown había auspiciado para el deleite de la gente que vivía al otro lado de la ciudad alambrada, Babilonia de mala gana acepto, así fue como pensó que terminaría durmiéndose esa noche en el cine porque los actos públicos de los gringos “eran muy aburridos” , sin embargo, cuando hizo su entrada al cine y este se lleno de mariposas amarillas, sintió como el pecho se le hinchaba de felicidad, de algo sublime que lo trasportaba a otros mundos, era la poesía quien hacía de las suyas en el ser de Mauricio, fue así que al final del recital se acerco al declamador de poemas y le preguntó que había leído “Withman”, Babilonia hizo un gesto de no comprender de que le hablaba aquel casi juglar de las letras “Walt Whitman, poeta norteamericano, al señor Brown le gusta mucho” le dijo con una sonrisa comprensiva, Mauricio Babilonia quiso pedirle que recitara de nuevo el poema, pero no encontró las palabras, hizo una pausa y luego le expresó al declamador que le gustaría aprender a leer y escribir para poder escribir poesía, entonces el declamador le invitó a que se vaya a la capital con él y que allí le enseñaría a leer y escribir a cambio de sus servicios mientras se educaba. Mauricio Babilonia calló, el declamador le advirtió que lo pensará que se quedaría por aquellos lugares unos tres meses, pero que le hiciera saber si estaba interesado en su propuesta, puesto que veía en sus ojos la chispa de la poesía y que sería un desperdicio para la humanidad dejar perder tan magnánima magia en un pueblo olvidado por Dios.
Mauricio quedo tan impactado con lo que le dijo el declamador que se olvido de sus presagios y de su cita con Meme, el resto de días de la semana se la paso soñando y soñando con ser un gran poeta, no sabía que significaba ni la palabra poesía ni poeta, pero había algo de esa rama de la cual nunca había escuchado que lo apasionaba más que su amor por Meme. Entonces decidió que el sábado asistiría a cine y que si Meme no se presentaba se iría con el declamador para la capital y se prepararía para ser poeta. Ese sábado Meme si llego al cine y ya somos conocedores de la conversación que tuvieron los dos, luego de los acontecimientos que se desarrollaron desde esa noche, los cuales no vamos a relatar de nuevo. Simplemente fue el día en que Fernanda decidió invitar al alcalde a almorzar en su casa y le contó que había un ladrón que se metía a robar las gallinas por el traspatio de la casa. Meme estaba adentro del baño completamente desnuda, temblando de amor y rodeada de alacranes y mariposas no amarillas, sino de esas mariposas grandes y negras que dice la gente trae malos infortunios para las casas donde se meten y duran días y días pegadas ya sea del techo, ya sea de los socavones de las puertas. Y si, efectivamente esa noche los guardas derribaron a un tipo que se temía robaba por todas las casas de la calle donde vivía la familia Buendía, pero no era Mauricio Babilonia porque este andaba a medio camino de Macondo rumbo a la capital para educarse y hacerse poeta, dejando a Meme en embarazo y posibilitándose una mejor calidad de vida y no quedando reducido a una cama por culpa de un proyectil y por sus apetitos sexuales, pues por todo el camino se acostó con cuanta prostituta el declamador le compraba momentos de felicidad o, las que cambiaban placer por noches de poesía, vallenatos y ron.
Babilonia logró su objetivo: se educó, aprendió a leer y escribir, se convirtió en poeta, fue testigo del Bogotazo y las revoluciones venideras después de este, tuvo muchas mujeres, a todas les prometió amor eterno pero a ninguna amo, le sobrevivieron tres hijos: Fernando, Arturo y Jorge Babilonia, los tres con distintas mujeres. Fue un poeta reconocido a nivel mundial; no volvió a saber nada de Meme y nunca supo que en Macondo dejo otro hijo. Murió el mismo día que el apocalipsis llego con el olvido y la soledad al pueblo que lo vio nacer.



Samuel Salazar Blandón.