Ayudante De Santa
06-11-2015, 22:19:08
Ver la Versión Completa Con Imagenes : Federer, la historia detrás de la leyenda
FelipeRosero
30-11-2010, 07:52:20
http://bucket.lanacion.com.ar/anexos/fotos/82/1299682w298.jpg (http://www.canchallena.com/herramientas/nota/nota.fotos.aspx?nota_id=1329164&width=560&height=500)
Roger Federer sacude al mundo. Pierde en cuartos de final de Wimbledon contra el checo Tomas Berdych en cuatro sets. Tras seis años y medio de dominio o pelea mano a mano con Rafael Nadal, cae al tercer lugar del ranking, donde no figuraba desde noviembre de 2003. Por primera vez desde 2002 (Nalbandian-Hewitt), la cancha central del All England no lo tiene como protagonista de la final. "No la voy a ver, estaré de vacaciones. Lo único bueno de esto es que podré descansar", dice en la rueda de prensa. Enojado, contesta con sarcasmo las preguntas de los periodistas y anticipa: "Volveré a luchar por el 1".
Seppli Kacovski es checo, como Berdych. Tuvo la suerte de estar dando clases de tenis en Túnez cuando los tanques soviéticos invadieron Praga en 1968. Al año siguiente, se asiló en Basilea y se encargó de formar a los juveniles del Old Boys. En 1989, vio a Federer por primera vez. "Después de dos días de trabajo, supe que era un talento extraordinario. Nació con una raqueta en la mano." También destacó rasgos de su personalidad. "Es ambicioso porque no es ciento por ciento suizo. Tiene la calma de su papá, Robbie, suizo de su pura cepa. Pero la ambición viene por el lado de su mamá, Lynette, sudafricana. Los suizos no tienen ambición."
Fan del revés a una mano, modeló a Federer durante seis años, de los 8 a los 14. Mientras Roger quería jugar con sus amigos, su madre le pidió al entrenador que lo midiera contra los mejores, en otro grupo. Hizo amistad con Marco Chiudinelli, de su misma edad, hoy 116º del mundo. Eran dos demonios que no paraban de hacer bromas en los entrenamientos. "Con este tiro, ganaré Wimbledon", decía Rogelio tras acertar un smash en las prácticas. Pero no siempre la pasaba tan bien. Su némesis se llamaba Dany Schnyder, el hermano menor de Patty, ex top ten entre las chicas. Sus partidos incluían insultos y revoleos de raquetas. No reconocía los buenos puntos de su rival. Hablaba de suerte. Lloró tras una derrota en interclubes y se escondió detrás de la silla del umpire. Sus padres castigaban cada episodio de bronca con una vuelta a casa en el auto sin hablarle.
A los diez años, perdió 6-0 6-0 contra un chico casi tres años mayor que él. Se llamaba Reto Schmidli. Hoy es un oficial de policía en Basilea. Tras el dato revelado por el periodista Chris Bowers en su biografía Roger Federer, the greatest , se ha convertido en una minicelebridad para el mundo del tenis. En 1992, el suizo Marc Rosset ganó la medalla dorada en el tenis olímpico de Barcelona. Y Roger, el campeonato nacional sub 12. Sin embargo, casi nadie le veía potencial para llegar al profesionalismo. Sólo Kacovski creía en él: "A pesar de dar ventajas en el aspecto físico, compensaba todo con su juego. Su biomecánica ya era perfecta". El viejo Seppli le enseñó los golpes, pero gracias a Peter Carter aprendió a jugar al tenis. Ante un nuevo descontrol de su carácter, su madre le dijo "¿es una catástrofe si perdés un partido?".
En 1995, ya con 14 y por propia decisión, se mudó al Swiss National Tennis Center en la localidad de Ecublense, en las afueras de Laussane. Vivía allí de lunes a viernes, con estudios por las mañanas y entrenamiento por las tardes. Tenía problemas de comunicación, ya que le costaba hablar en francés. Era conocido como "el tirador de raquetas". Muchas veces pensó en regresar a Basilea. Lloraba los domingos a la noche cuando debía salir de su casa para regresar al centro. Sus padres jugaron un rol fundamental en esta etapa crucial de su vida. Las charlas telefónicas con su mamá, Lynette, buscando contención duraban más de una hora. Cuando logró adaptarse a Ecublens, su tenis creció notablemente y se perfiló como el jugador de mayor proyección del país. Debutó internacionalmente en la Copa del Mundo Juvenil de 1996 con una victoria ante el ya conocido Lleyton Hewitt.
Compartió su primer departamento de soltero con Yves Allegro, su compañero en el dobles olímpico de Atenas 2004. Allegro ejerció de hermano mayor y debió pedirle varias veces que la cortara con la PlayStation. En 1997, dejó el colegio secundario. Sus padres lo aceptaron con la condición de que volviera a estudiar si después de algunos años no triunfaba en el tenis. Robbie rechazó un empleo en Australia para estar cerca de su hijo. Lynette aumentó sus horas de trabajo para ganar más dinero y asegurar el financiamiento de los viajes. A los 15, se consagró campeón nacional sub 18. Ya mostraba su tenis fácil, natural, con economía de movimientos. Sin embargo, seguía pegando gritos y rompiendo raquetas. Lo echaban de las prácticas. En el centro de entrenamiento, lo obligaron a despertarse a las 7 AM para limpiar los baños durante una semana en pleno invierno. Tras otra rabieta, su padre lo hizo bajar del auto. Afuera nevaba. "Enfriate", fue el mensaje. Les agregó efectos a esos golpes planos que pasaban apenas arriba de la red. Lo comparaban con el alemán Michael Stich.
En 1998, dominó en juniors. Semifinalista en Australia, campeón en Wimbledon y finalista en el US Open, derrotado por un tal David Nalbandian. Debutó en el ATP Tour en Gstaad y perdió contra otro argentino, Lucas Arnold Ker. También jugó en Basilea y se dio el gusto de enfrentarse con Andre Agassi, que le ganó en sets corridos. Cerró el año con el Orange Bowl, contra David en semis y Coria en la final. Se consagró campeón mundial juvenil, como Lendl y Edberg pero también como Dunn o el argentino Federico Browne, quienes no trascendieron en mayores. ¿De qué lado estaría Federer? En cuatro años y medio despejó esa duda. Desde Wimbledon 2003, 16 títulos de Grand Slam, el álbum completo con Roland Garros 2009. Número uno del mundo durante 285 semanas, 237 consecutivas desde febrero de 2004 hasta agosto de 2008.
El compulsivo rompedor de raquetas se transformó en un deportista ejemplar, reconocido y admirado por todo el mundo. Una derrota contra Franco Squillari en Hamburgo 2001 le cambió la cabeza. Tras darle la mano a su rival, partió la raqueta justo debajo de la silla del umpire. Sintió vergüenza y dijo basta. Nunca más la tiró tras un partido y poquísimas veces lo hizo durante el juego después de aquel episodio. Aquella ya lejana caída ante Berdych en Wimbledon también le hizo cambiar de actitud. Contrató a un entrenador full time: Paul Annacone, ex coach de Pete Sampras y Tim Henman. "Quiero aprender de su experiencia", dijo Federer. Aprendió, parece. Finalista en Toronto y Shanghai, semis en el US Open y París, campeón en Estocolmo y Basilea. Recuperó el número 2 cuando le ganó a Djokovic en la semifinal de Shanghai. Volvió a superarlo, y con baile, en las semis del Masters. Su paso por el grupo B había sido impecable con victorias en sets corridos contra Ferrer, Murray y Soderling. Tuvimos la final esperada, con el extraordinario Nadal del otro lado. Extrañábamos el clásico. Tras 15 duelos entre 2006 y 2008, sólo se cruzaron cuatro veces en los últimos dos años. En 2009, había aflojado Nadal. En este 2010, había bajado Federer. Ayer, el suizo jugó para la historia. Su saque y su derecha funcionaron como siempre. Su revés funcionó como nunca. Manejó todas las variantes: alto, profundo, con top, plano, con slice, paralelo, cruzado. El sorprendido Rafa se rindió en el cuarto juego del tercer set, cuando tras estar 40-15, Federer le quebró el saque a puro tiro ganador. Entre el fastidio del All England a la alegría del O2 Arena, pasaron apenas cinco meses. Otra vez Londres, 28 de noviembre de 2010. Roger Federer sacude al mundo y gana, invicto, su quinto Masters. Sigue reescribiendo su propio libro y, también, el de la historia del tenis. ¡Gracias!
Roger Federer sacude al mundo. Pierde en cuartos de final de Wimbledon contra el checo Tomas Berdych en cuatro sets. Tras seis años y medio de dominio o pelea mano a mano con Rafael Nadal, cae al tercer lugar del ranking, donde no figuraba desde noviembre de 2003. Por primera vez desde 2002 (Nalbandian-Hewitt), la cancha central del All England no lo tiene como protagonista de la final. "No la voy a ver, estaré de vacaciones. Lo único bueno de esto es que podré descansar", dice en la rueda de prensa. Enojado, contesta con sarcasmo las preguntas de los periodistas y anticipa: "Volveré a luchar por el 1".
Seppli Kacovski es checo, como Berdych. Tuvo la suerte de estar dando clases de tenis en Túnez cuando los tanques soviéticos invadieron Praga en 1968. Al año siguiente, se asiló en Basilea y se encargó de formar a los juveniles del Old Boys. En 1989, vio a Federer por primera vez. "Después de dos días de trabajo, supe que era un talento extraordinario. Nació con una raqueta en la mano." También destacó rasgos de su personalidad. "Es ambicioso porque no es ciento por ciento suizo. Tiene la calma de su papá, Robbie, suizo de su pura cepa. Pero la ambición viene por el lado de su mamá, Lynette, sudafricana. Los suizos no tienen ambición."
Fan del revés a una mano, modeló a Federer durante seis años, de los 8 a los 14. Mientras Roger quería jugar con sus amigos, su madre le pidió al entrenador que lo midiera contra los mejores, en otro grupo. Hizo amistad con Marco Chiudinelli, de su misma edad, hoy 116º del mundo. Eran dos demonios que no paraban de hacer bromas en los entrenamientos. "Con este tiro, ganaré Wimbledon", decía Rogelio tras acertar un smash en las prácticas. Pero no siempre la pasaba tan bien. Su némesis se llamaba Dany Schnyder, el hermano menor de Patty, ex top ten entre las chicas. Sus partidos incluían insultos y revoleos de raquetas. No reconocía los buenos puntos de su rival. Hablaba de suerte. Lloró tras una derrota en interclubes y se escondió detrás de la silla del umpire. Sus padres castigaban cada episodio de bronca con una vuelta a casa en el auto sin hablarle.
A los diez años, perdió 6-0 6-0 contra un chico casi tres años mayor que él. Se llamaba Reto Schmidli. Hoy es un oficial de policía en Basilea. Tras el dato revelado por el periodista Chris Bowers en su biografía Roger Federer, the greatest , se ha convertido en una minicelebridad para el mundo del tenis. En 1992, el suizo Marc Rosset ganó la medalla dorada en el tenis olímpico de Barcelona. Y Roger, el campeonato nacional sub 12. Sin embargo, casi nadie le veía potencial para llegar al profesionalismo. Sólo Kacovski creía en él: "A pesar de dar ventajas en el aspecto físico, compensaba todo con su juego. Su biomecánica ya era perfecta". El viejo Seppli le enseñó los golpes, pero gracias a Peter Carter aprendió a jugar al tenis. Ante un nuevo descontrol de su carácter, su madre le dijo "¿es una catástrofe si perdés un partido?".
En 1995, ya con 14 y por propia decisión, se mudó al Swiss National Tennis Center en la localidad de Ecublense, en las afueras de Laussane. Vivía allí de lunes a viernes, con estudios por las mañanas y entrenamiento por las tardes. Tenía problemas de comunicación, ya que le costaba hablar en francés. Era conocido como "el tirador de raquetas". Muchas veces pensó en regresar a Basilea. Lloraba los domingos a la noche cuando debía salir de su casa para regresar al centro. Sus padres jugaron un rol fundamental en esta etapa crucial de su vida. Las charlas telefónicas con su mamá, Lynette, buscando contención duraban más de una hora. Cuando logró adaptarse a Ecublens, su tenis creció notablemente y se perfiló como el jugador de mayor proyección del país. Debutó internacionalmente en la Copa del Mundo Juvenil de 1996 con una victoria ante el ya conocido Lleyton Hewitt.
Compartió su primer departamento de soltero con Yves Allegro, su compañero en el dobles olímpico de Atenas 2004. Allegro ejerció de hermano mayor y debió pedirle varias veces que la cortara con la PlayStation. En 1997, dejó el colegio secundario. Sus padres lo aceptaron con la condición de que volviera a estudiar si después de algunos años no triunfaba en el tenis. Robbie rechazó un empleo en Australia para estar cerca de su hijo. Lynette aumentó sus horas de trabajo para ganar más dinero y asegurar el financiamiento de los viajes. A los 15, se consagró campeón nacional sub 18. Ya mostraba su tenis fácil, natural, con economía de movimientos. Sin embargo, seguía pegando gritos y rompiendo raquetas. Lo echaban de las prácticas. En el centro de entrenamiento, lo obligaron a despertarse a las 7 AM para limpiar los baños durante una semana en pleno invierno. Tras otra rabieta, su padre lo hizo bajar del auto. Afuera nevaba. "Enfriate", fue el mensaje. Les agregó efectos a esos golpes planos que pasaban apenas arriba de la red. Lo comparaban con el alemán Michael Stich.
En 1998, dominó en juniors. Semifinalista en Australia, campeón en Wimbledon y finalista en el US Open, derrotado por un tal David Nalbandian. Debutó en el ATP Tour en Gstaad y perdió contra otro argentino, Lucas Arnold Ker. También jugó en Basilea y se dio el gusto de enfrentarse con Andre Agassi, que le ganó en sets corridos. Cerró el año con el Orange Bowl, contra David en semis y Coria en la final. Se consagró campeón mundial juvenil, como Lendl y Edberg pero también como Dunn o el argentino Federico Browne, quienes no trascendieron en mayores. ¿De qué lado estaría Federer? En cuatro años y medio despejó esa duda. Desde Wimbledon 2003, 16 títulos de Grand Slam, el álbum completo con Roland Garros 2009. Número uno del mundo durante 285 semanas, 237 consecutivas desde febrero de 2004 hasta agosto de 2008.
El compulsivo rompedor de raquetas se transformó en un deportista ejemplar, reconocido y admirado por todo el mundo. Una derrota contra Franco Squillari en Hamburgo 2001 le cambió la cabeza. Tras darle la mano a su rival, partió la raqueta justo debajo de la silla del umpire. Sintió vergüenza y dijo basta. Nunca más la tiró tras un partido y poquísimas veces lo hizo durante el juego después de aquel episodio. Aquella ya lejana caída ante Berdych en Wimbledon también le hizo cambiar de actitud. Contrató a un entrenador full time: Paul Annacone, ex coach de Pete Sampras y Tim Henman. "Quiero aprender de su experiencia", dijo Federer. Aprendió, parece. Finalista en Toronto y Shanghai, semis en el US Open y París, campeón en Estocolmo y Basilea. Recuperó el número 2 cuando le ganó a Djokovic en la semifinal de Shanghai. Volvió a superarlo, y con baile, en las semis del Masters. Su paso por el grupo B había sido impecable con victorias en sets corridos contra Ferrer, Murray y Soderling. Tuvimos la final esperada, con el extraordinario Nadal del otro lado. Extrañábamos el clásico. Tras 15 duelos entre 2006 y 2008, sólo se cruzaron cuatro veces en los últimos dos años. En 2009, había aflojado Nadal. En este 2010, había bajado Federer. Ayer, el suizo jugó para la historia. Su saque y su derecha funcionaron como siempre. Su revés funcionó como nunca. Manejó todas las variantes: alto, profundo, con top, plano, con slice, paralelo, cruzado. El sorprendido Rafa se rindió en el cuarto juego del tercer set, cuando tras estar 40-15, Federer le quebró el saque a puro tiro ganador. Entre el fastidio del All England a la alegría del O2 Arena, pasaron apenas cinco meses. Otra vez Londres, 28 de noviembre de 2010. Roger Federer sacude al mundo y gana, invicto, su quinto Masters. Sigue reescribiendo su propio libro y, también, el de la historia del tenis. ¡Gracias!
Ayudante De Santa
06-11-2015, 22:19:08
UNIK
02-12-2010, 11:43:09
Oiga bacana info le cuento, aunque hay más cositas que podría contar, me parecio bastante completo el tema!!!
*HoMeRo*
02-12-2010, 16:39:22
Simplemente el es el mejor de todos los tiempos, no creo que exista alguna duda de que Sir Roger es el mejor y mas completo jugador que ha existido, su leyenda creo que se prolongara por mucho tiempo y que seguira vivo su recuerdo, porque lo que a logrado el, por lo menos yo como aficionado al tenis no creo que alguien mas lo logre.
FelipeRosero
02-12-2010, 17:40:27
Homero, tu link para ver los productos en facebook no funciona. Un abrazo
Tyler Durden
02-12-2010, 17:58:18
El mejor... dentro y fuera de la cancha, todo un ejemplo a seguir.
ozxmork
03-12-2010, 10:50:56
exelente parce hay varias cosas que no sabia:thumbleft:
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