Desempleo bajaría 1% por mayor comercio con países vecinos

[Ayudante De Santa]

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Los efectos de una mayor ocupación podrán apreciarse a mediano plazo en todas las regiones del país, ante el aumento en el intercambio con Venezuela y Ecuador.


El restablecimiento de relaciones a todo nivel entre Colombia y Venezuela y el aumento en el comercio con Ecuador, serán indispensables para frenar el alto desempleo que soporta el país. No en vano, de agilizarse el intercambio con los dos países vecinos, podrían ser generados cerca de 250 mil puestos de trabajo. Así lo consideran expertos, quienes creen que al mejorar este panorama para el país, aumentará el crecimiento económico a mediano plazo.
Las razones de este alcance se deben a que el comercio colombiano con estos países se concentra en productos de alto valor agregado y con gran capacidad de generación de empleo para las pequeñas y medianas industrias en varias regiones, sobre todo en un momento en que la economía nacional y sus exportaciones son jalonadas por el sector minero energético, que aporta poco como fuente de trabajo.
Durante los cuatro primeros meses de 2010, las exportaciones colombianas crecieron 27 por ciento en relación con el mismo período del año anterior, fundamentalmente por el notable desempeño de las ventas externas del sector minero-energético, que presentaron un aumento del orden de 68.2 por ciento en el período enero–abril de los años 2009 y 2010, especialmente con destino a Estados Unidos, China, Suiza y Holanda.
“La noticia es que ya estamos en plena bonanza minero–energética, pero esta tendencia no responde a una estrategia de diversificación de mercados en relación con Venezuela, que en el pasado reciente fue el destino principal de las exportaciones industriales del país”, sostiene Saúl Pineda, director del Centro de Pensamiento en Estrategias Competitivas (CEPEC) de la Universidad del Rosario.
De hecho, al revisar las cifras de la DIAN para el periodo enero-abril en los años 2009 y 2010, es posible establecer una reducción del orden de 18.4 por ciento en las exportaciones diferentes al café, las flores y las minero-energéticas, en gran medida como resultado de una caída superior a 70 por ciento en las exportaciones hacia Venezuela, al comparar los dos períodos analizados.
En este contexto, resulta estimulante la recuperación significativa del orden de 26 por ciento en las exportaciones hacia Ecuador en el mismo periodo, que muestra el efecto neto de la reactivación paulatina de las relaciones diplomáticas con ese país.
De acuerdo con un estudio de la Secretaría de Desarrollo Económico de Bogotá, las exportaciones de esta ciudad con destino a Venezuela cayeron 55 por ciento, al pasar de 411.9 millones de dólares en 2009 a 182.2 millones en 2010 (una caída en 229.7 millones de dólares). Es de señalar que en 2008 el valor de las exportaciones bogotanas a Venezuela fue de 1.328,3 millones de dólares.
La reducción de las ventas externas desde la capital se explica principalmente por la caída en la colocación de los grupos Textiles (79 por ciento), Otros químicos (48.2 por ciento), Maquinaria excluida la eléctrica (85.7 por ciento), Maquinaria eléctrica (50 por ciento) y Plásticos (45.1 por ciento), entre otros, que han sido los más afectados por la crisis comercial con el país vecino.
De acuerdo con el estudio, esta caída ha tenido un efecto directo sobre el empleo industrial de la ciudad, estimando que se perdieron aproximadamente 8.196 empleos.
En este sentido, la totalidad de empleos perdidos a causa de la caída de las exportaciones bogotanas con destino a Venezuela en los primeros cinco meses del año (8.196) representan 13,6 por ciento del total de empleos perdidos en la rama industrial de la ciudad entre el trimestre móvil marzo-mayo de 2009 y el mismo trimestre de 2009.
Por otro lado, el desempeño con Ecuador y otros mercados, en aquellos productos que antes se enviaban a Venezuela, resulta insuficiente para compensar los 1.200 millones de dólares de divisas que se dejaron de generar en ese mercado al comparar el acumulado enero-abril de 2010, en relación con el mismo período del año anterior.
En estas condiciones, “no es posible minimizar el impacto de la caída en las exportaciones hacia Venezuela, como lo presentan algunos análisis oficiales, con el pretexto de que están creciendo las exportaciones hacia otros mercados, que corresponden en una proporción del 66 por ciento a los productos del sector minero energético, cuyo impacto en el empleo es de menor magnitud”, precisó Pineda.
Por ejemplo, a pesar del repunte de las exportaciones minero–energéticas (23 por ciento) en el departamento de Santander, sobresale la fuerte caída de las exportaciones menores, que fue de 81.5 por ciento. Esta región, cercana a la frontera con Venezuela, se ha visto particularmente afectada en sus envíos de autopartes, manufacturas de fundición, pieles y cueros y calzado. Entre las regiones comparadas, es el Departamento que mayor impacto ha recibido del cierre del mercado venezolano.