Tensión encostas colombianas por el hallazgo de un pez león

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Tensión encostas colombianas por el hallazgo de un pez león





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Esta especie invasora nativa del Océano Índico es venenosa y considerada como una plaga.





Sus aletas de colores que se abren como pétalos de flor, le hacen ver como un pescado extraño, pero inofensivo.

Por lo menos así le pareció a Álvaro Gómez, un pescador nativo de la Isla de Barú, que, en medio de su rutina, vio pegado de su anzuelo a un extraño pescado, que más que eso parecía un pavo real en miniatura.

Sus aletas se movían de un lado a otro y sus espinas de colores, delgadas y brillantes, le hacían parecer gracioso. Pero no lo es.

El pez león, como se llama esta especie invasora nativa del Océano Índico, es venenosa y considerada por biólogos marinos como una plaga que llegó al caribe colombiano desde noviembre del 2008, cuando fue visto por primera vez en las playas de San Andrés y Providencia.

En mayo del año pasado aparecieron en Santa Marta y el miércoles, fue encontrado el primero en la Isla de Barú por Gómez, un veterano pescador que después de contemplar al animal por horas, con otro grupo de nativos, lo entregó a Oceanario de Cartagena.

"El animal está aislado en un laboratorio del Centro de Investigaciones y no se encuentra en exhibición", dijo a EL TIEMPO Jaime Rojas, director científico del Oceanario, quien oficiaba a Parques Naturales sobre el hallazgo, que según esta última entidad, es el primero en la isla.

"Hemos tenido muchos rumores, indicios, comentarios de que lo han visto, pero este es el primero que tenemos de verdad y nos alarma", dijo Mario Cabezas, director del Parque Nacional Natural Corales y del Rosario.

Es un depredador

El profesor Arturo Acero, docente de la Universidad Nacional de Colombia e investigador del Centro de Ciencias del Mar (Cecimar), le dijo a EL TIEMPO que este "es un pez de arrecife, ponzoñoso, venenoso y depredador de especies nativas que representan una grave peligro para nuestro ecosistema y la salud humana".

Para la salud porque se puede sufrir accidentes al pisar o tocar las púas venenosas del pescado, que pueden generar fiebre y mareo (se recomienda no tocarlos y dar aviso a las autoridades); y, para el ecosistema, porque es una amenaza para las especies.

"Este pez podría extinguir especies locales, hay que hacer una masiva campaña para controlarlo. Entre otras cosas, se come los peces que se alimentan de algas marinas, y estas plantas podrían proliferar de tal forma que pondrían en problemas a los corales", explicó Acero.

Marcela Grijalva, de la Facultad de Biología Marina de la Universidad Jorge Tadeo Lozano de Santa Marta, explicó que, "como los peces de neutras aguas no están acostumbrados a verlo, no tienen mecanismos de defensa y son presa fácil de este depredador".

Es tal la proliferación de este pez -agrega Grijalva- que en una sola inmersión se pueden encontrar hasta 11 y 15 animales en zonas de Santa Marta. En la costa ya se ha superado el número de los 100 hallazgos, agregó.

Según la versión más citada por expertos, la proliferación del pez león comenzó en 1992 cuando el huracán Andrew destruyó un acuario artificial en las costas de Florida, donde se hallaban ejemplares en cautiverio.

Aunque no hay aún una directriz oficial del Ministerio de Ambiente, sobre qué se debe hacer con esta especie invasora, todos los expertos consultados, opinan que hay que eliminarla.


Incluso, agrega el científico Arturo Acero, se podría ayudar a controlar la plaga, consumiendo el pez. "El veneno del pez se encuentra en las glándulas epidérmicas y es proteína que al ser cocinada se desnaturaliza y se convierte en aminoácidos, es decir, en comida", agregó el científico. Por ahora las autoridades de Cartagena, donde fue encontrado ayer por primera vez el pez, recomendaron no tocarlo y reportar cualquier hallazgo a las autoridades marítimas a al sistema de Parques Nacionales Naturales.