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Ayudante De Santa
06-11-2015, 22:19:08
Los mejores licores
Heráclito
21-11-2023, 09:04:42
¿El diablo haciendo hostias? o ¿sin los ricos no hay paraíso? ¿O simplemente una cortina de humo para seguir con su agenda, estatizarlo todo, y darle algunos caramelos a las grandes fortunas?

Los va a escuchar, pero no va a conciliar. Petro no es Boric. Es un marxista de viejo cuño. El capital es el enmigo y a largo plazo hay que destruirlo. En el presente hay que contemporizar con estos explotadores, debe decirse mientras sonríe sibilinamente. Tranquilizarlos mientras pasan sus reformas debe ser su objetivo.

Petro se reúne con los cacaos entre las suspicacias de los gremios

Por Edgar Quintero Herrera y Daniel Pacheco

Hace 5 horas

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Hoy, sobre el medio día, el presidente Gustavo Petro va a almorzar con algunos de los empresarios más ricos del país. Pero son más que empresarios. También son dueños de los medios tradicionales más importantes de Colombia y grandes donantes a partidos políticos. Por eso, entre asistentes y observadores, el encuentro ha evocado el pacto que hizo en su presidencia Ernesto Samper con los “cacaos”, como los llamó entonces el mandatario sitiado por el escándalo 8.000.

La cita es en la Casa de Huéspedes de Cartagena, la residencia oficial donde los presidentes reciben a sus invitados especiales. Hasta ayer en la noche, la Casa de Nariño no contaba con una lista de invitados confirmados, según la jefatura de prensa de Presidencia. De hecho, la reunión no se ha anunciado en ningún comunicado oficial, a pesar de que lleva varias semanas gestándose.

El alcance de la reunión ha sido interpretado de múltiples maneras, y su desarrollo despejará las dudas, en medio del secretismo de su organización. Mientras al interior del gobierno lo interpretan como una conversación con altos representantes del sector privado sobre los grandes temas del país, otras voces advierten un intento por menoscabar la voz de los sectores empresariales más amplios representados en los gremios. Y desde la oposición se tejen teorías sobre un gobierno impopular, con sus reformas empantanadas, que acude a los grandes capitalistas en busca de oxígeno mediático y gobernabilidad en el Congreso.


La lista de invitados

La Silla pudo establecer, con fuentes de primera mano, que empresarios como Luis Carlos Sarmiento Ángulo, el hombre más rico de Colombia, Carlos Julio Ardila, de la Organización Ardila Lulle, y Alejandro Santo Domingo, gestor del Grupo Valorem, estarán presentes. Los tres conducen organizaciones que, en 2022, donaron alrededor de 35 mil millones de pesos a los partidos durante las elecciones y son dueños de los medios masivos del país, como El Tiempo, RCN y Caracol Televisión.

La reunión no cuenta con una agenda preestablecida. Ni el gobierno ni los empresarios propusieron puntos concretos para discutir en el almuerzo. Fue organizado por Laura Sarabia, directora del Departamento de Prosperidad Social (DPS), y una de las mujeres de confianza del presidente, y por Juan Fernández, el consejero empresarial de Petro. “Es una conversación abierta sobre el país”, le dijo a La Silla una fuente que ha servido de intermediaria entre las partes, y quien pidió la reserva de su nombre.

Las invitaciones empezaron a llegar desde la semana pasada. Entre los motivos para la reunión está “entablar un diálogo sobre temas de interés mútuo, paz y justicia social”, como dice una de las tarjetas de invitación que uno de los asistentes le leyó a La Silla. “En la agenda no existe nada cuadrado. Yo dije que no puedo negociar nada porque debo consultarlo con mis socios”, le dijo a La Silla uno de los empresarios invitados, quien pidió la reserva de su nombre.

Entre los empresarios confirmados están:

El banquero Luis Carlos Sarmiento Ángulo y su hijo, Luis Carlos Sarmiento Gutiérrez, del Grupo Aval, al que pertenecen empresas como el Banco Bogotá, Porvenir y el periódico El Tiempo.
Alejandro Santo Domingo y Carlos Alejandro Pérez Dávila, de Valorem, el conglomerado dueño de las Tiendas D1, El Espectador y Caracol Televisión.
Carlos Julio Ardila, presidente de la Organización Ardila Lulle, propietarios de Postobón y el canal RCN.
Carlos Enrique Cavelier, presidente de Alquería, la compañía de lácteos.
Pedro Carvajal, del Grupo Carvajal.
Harold Éder, del Grupo Manuelita, el ingenio azucarero.
César Caicedo, presidente de Colombina, la popular compañía de alimentos.


En la lista hay grandes ausentes.

Entre ellos, los banqueros Jaime y Gabriel Gilinski, propietarios de Nutresa, el Banco Sudameris y la Revista Semana, y quienes fueron invitados, pero se excusaron por motivos de agenda, según una versión, y por los comentarios de Petro en el tema del conflicto entre Israel y Hamas en Gaza, según otra. Los Gilinski han financiado las campañas de Petro al Congreso, y el periodista Daniel Coronell documentó este año un encuentro privado entre los banqueros y el presidente.

Tampoco van a estar representantes del Grupo Empresarial Antioqueño (GEA). Las cabezas visibles del conglomerado paisa se han enfrentado públicamente a altos funcionarios del gobierno. Y algunas de sus organizaciones, como la Fundación Argos, han financiado las campañas de los principales opositores al gobierno Petro, como Andrés Julián Rendón, gobernador electo de Antioquia. La familia Char, propietaria de uno de los principales emporios empresariales del país, y cuyos miembros son abiertos opositores al gobierno, tampoco va a estar en la reunión.

Sarabia y Fernández, el consejero empresarial del gobierno Petro, fueron los altos funcionarios que se encargaron de impulsar y organizar la reunión desde hace semanas. Se trata de un trabajo que han adelantado a nombre del presidente, y que no involucra al resto del gabinete de ministros.

Los dos se han convertido en los principales puentes del alto gobierno con el sector privado. Sarabia, por ejemplo, recompuso la relación con la banca privada para iniciar Renta Ciudadana, el nuevo programa de transferencias del gobierno. Y Fernández organizó, a finales de agosto, la última reunión entre Petro y el Consejo Gremial luego de varios desplantes del presidente a los gremios.

De parte del gobierno Petro no se tiene preparada la firma de un documento al final de la reunión. Tampoco una declaración conjunta. Según una fuente del alto gobierno están discutiendo si sacar o no un comunicado al final del evento.“Los empresarios lo ven como una simple conversación. Ninguno se va a negar a una invitación del presidente de la república”, dice un político cercano a uno de los asistentes, quien pidió la reserva de su nombre.

“Con Santos me reuní como 10 veces”, le dijo a La Silla uno de los asistentes, restándole por momentos magnitud al evento. Pero, más adelante en la conversación, que accedió a tener a condición de no ser citado para no socavar su posición en el evento, evocó las reuniones de Samper con los llamados “cacaos”. En efecto, desde entonces, no se había planteado una cumbre de tantos millones como la que tuvo el expresidente a finales de los noventa con Sarmiento Angulo, que repite, Augusto López, entonces presidente de Bavaria y Carlos Ardila Lulle, de Postobón.

Sin embargo, en otro ir y venir, el empresario negó que esto hiciera parte de un acuerdo nacional o que sobre la mesa hubiera una discusión puntual de las reformas que hacen trámite en el Congreso. “Es una conversación sobre cómo podemos ayudar en temas que nos unen a todos, como la lucha contra la pobreza”, agregó.

Pero el carácter reservado de la reunión ha despertado múltiples suspicacias. Entre ellas, las de los gremios empresariales, las organizaciones tradicionales que median entre el gobierno y el sector privado, y cuya relación se viene tensando producto de los debates generados por las reformas sociales. Y desde la oposición se teme un pacto de alto nivel que le dé nuevos bríos al gobierno.


Las suspicacias de los gremios y de la oposición

Desde algunos gremios cuestionan que la institucionalidad de los gremios sea reemplazada por la visión de empresarios particulares. “Si van a hablar de lo que necesita Colombia, ellos no son los más representativos del país. Los gremios y las asociaciones de productores tenemos una mirada más amplia”, dice Jorge Bedoya, presidente de la Sociedad de Agricultores de Colombia (SAC).

Esta crítica viene precedida de una relación marcada por la desconfianza entre los gremios y el gobierno Petro. Se ha materializado en reuniones canceladas y desplantes a las principales organizaciones gremiales del país, como la renuencia del presidente a asistir al acto de clausura de la Asociación Nacional de Industriales (Andi) en Cartagena. “Hasta ahora las relaciones han sido muy distantes, con la sensación de que el gobierno no es especialmente amigo de la actividad empresarial”, le dijo a la Silla Bruce Mac Master, presidente de la Andi.

La noticia de la reunión con los cacaos empresariales, sumado a esa desconfianza creciente, alerta a los líderes gremiales. Y algunos creen que se trata de una estrategia del gobierno para pasar por encima de ellos en medio de negociaciones claves. “Están buscando discutir las reformas sin los gremios. Pero dudo de que los grandes empresarios del país vean esa alternativa con buenos ojos”, le dijo a La Silla otro líder gremial, quien pidió la reserva de su nombre.

Son varias las negociaciones que debe enfrentar el gobierno Petro con gremios a bordo en lo que queda del año. Entre ellas, la del aumento del salario mínimo para el 2024. La primera mesa técnica de esta negociación empieza el 28 de noviembre. Esta negociación cuenta, por la ley, con la participación de la SAC, la Andi, Asobancaria, Fenalco y Acopi, la Asociación Colombiana de las Micro, Pequeñas y Medianas Empresas. “Con una inflación que cede, pero lentamente, unas tasas de interés altas, y una economía en desaceleración, debemos corregir el poder adquisitivo, pero no hacer un aumento extraordinario”, dice Rosmery Quintero, presidenta de Acopi.

También está la negociación para aumentar el precio del Acpm en 2024, y en la que el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, lidera una mesa con los principales gremios transportadores del país.

El otro flanco de suspicacias frente a la reunión de Petro con los cacaos los lidera un sector de la oposición.

“¿Qué van a transar? ¿Prebendas a cambio de sometimiento?”, preguntó, en su cuenta de X, el exvicepresidente Francisco Santos a propósito de la reunión. Por la misma línea, el activista digital y opositor al gobierno Petro, Diego Santos, también cuestionó las motivaciones de la reunión. “¿Qué busca Alejandro Santo Domingo en su reunión con Gustavo Petro? ¿Darle un respiro y un empujón a un presidente que lo único que ha hecho es atropellar y arrasar al empresariado colombiano, al grande, al mediano y al pequeño?”, afirmó en un trino que luego borró, pero que aparece reseñado en un artículo de Semana.

Santos no le explicó a La Silla por qué borró el trino, pero agregó que “hoy los cacaos ya no controlan la narrativa, porque hoy existen las redes sociales”. De hecho, Semana, el medio de los Gilinski, es el único que le ha dado voz a voces críticas como la suya, en medio de la ausencia de sus dueños de la reunión.

En el fondo de las críticas de los opositores está la sospecha de que un acuerdo entre Petro y los cacaos le dé al gobierno una mayor maniobra entre los partidos representados en el Congreso, financiados en parte por sus organizaciones empresariales, y entre los medios de comunicación que controlan. Esta idea, sobre la omnipresencia del poder económico, es promovida, en cierta medida, por el presidente Petro. “Yo no llegué al poder. Llegué fue al gobierno, porque el poder, el verdadero poder, lo tienen otros, los grupos económicos”, le dijo en su momento a la periodista María Jimena Duzán.

Fuente: La Silla Vacía

Ayudante De Santa
06-11-2015, 22:19:08
Los mejores licores
eddievoleibol
21-11-2023, 21:05:42
Petro es un chiste, pero un chiste peligroso...nada bueno será para el país al final del día siempre intentará dominarlo todo el imponer su sistema de mierda.

Ojalá los "cacaos" no se dejen embolatar...