Experiencias con Linda... parte 4 [Archivo]

abnerfv

26-03-2019, 18:08:24

Han escuchado que dicen, este no es el fin sino el inicio... pues algo así le pasó a Linda... perder su virginidad no significó un alto a su calentura, ya que en lugar de eso empezó una etapa que duró muchos años y en los que tuvo varios actores...

Linda no solo despertaba la pasión y deseo en Jorge, pues su papá no dejaba de pensar en ella revolcandose en su cama con su hijo. Esa semana las veces que le hizo el amor a su esposa no dejaba de imaginar cómo sería tener una novia menor en edad, a pesar que su esposa era muy hermosa y de cuerpo bien cuidado. Ella misma sintió en sus penetraciones como se esforzaba más por hacerla sentir todo su miembro, a pesar que siempre la hizo llegar al orgasmo en cada relación que habían tenido. Notó como convivir con los invitados, especialmente con los más jóvenes, provocaba un aumento notorio en el miembro de su esposo y sus caricias hacía sus nalgas se hicieron más frecuentes. Al medio día, mientras bebían en el jardín empezó a tocar las piernas y caderas de su esposa, quien vestía falda corta y de a poco fue buscando bajo su falda calmar un poco su deseo al ver y pensar en Linda. Tocaba las nalgas, apretaba y luego soltaba para dar una pequeña nalgadita con los dedos de la mano sobre la nalga aún firme y redonda de su esposa.

Sofía llamó a Felipe a la cocina para cuestionarle que le pasaba, pues no era común ese comportamiento en él y le preocupaba que las visitas le vieran así. Pero la calentura que Linda despertaba en Felipe lo descontrolaba, al punto de no escuchar a Sofía y mejor aprovechar el separarse del grupo para darle a su esposa unos besos llenos de pasión que de inmediato calentaron el momento. Sin mediar palabra, levantó la falda e hizo a un lado la tanga de Sofía para introducir un dedo lleno de su saliba para hacer más fácil su ingreso. Sofía entendió que esa sería la única manera de calmarlo y se dejó llevar por el momento, empezó a acariciar el miembro y a liberarlo para jugar con la cabeza que ya reflejaba su excitación. Se agachó a hacerle un oral a su hombre, pues pensó que al eyacular lograría calmarse, sin embargo Felipe parecía no querer solamente terminar en la boca de Sofía, con fuerza y rapidez empujaba sus caderas hacía adelante logrando que la totalidad de su miembro entrara en la boca de su esposa quien únicamente atinó a disfrutar el momento, pues era de las mujeres a las que dar sexo oral les llenaba de satisfacción. Finalmente se corrió Felipe dentro de la boca de Sofía quien acostumbraba a tragar el semen de su esposo sin problema, pues le gustaba su sabor.

Felipe pidió a su esposa que siguiera besando hasta retirar por completo el semen de su miembro que ya se mostraba flácido aunque de buen tamaño aún. Esos besos hicieron que pronto el miembro de Felipe tomara tamaño y dureza, así también que la excitación de su dueño regresara. La levantó entonces del piso y volteó apoyando sus rodillas sobre el asiento de una silla e inclinando el resto de su cuerpo hacía el frente apoyando sus manos en el respaldo de la misma. La posición permitía dejar a la vista tan bello culo que por el tamaño de cada nalga hacía ocultar la tanga que portaba Sofía, aprovechó a besar sus nalgas y por sobre la tanga ya mojada acariciar los labios vaginales de su mujer. Pero su calentura era tanta que no aguanto más y haciendo a un lado la tanga enfiló el pene hacía la vagina para empujarlo con fuerza desprendiendo de la garganta de Sofía un leve gemido de placer. Para ese momento, Linda observaba a la pareja pues se había dirigido a la cocina por más hielo para las bebidas y no podía dejar de admirar el cuerpo de Sofía pero más aún las embestidas que recibía al grado de humedecerse. Felipe se percató que estaban siendo observados por Linda, sin embargo no se inmutó y por el contrario, empezó con más fuerza a penetrar a su esposa que para ese momento ya gemia sin preocuparse por ser escuchada. Linda sólo observaba como Felipe sacaba por completo su pene y con tal rapidez volvía a ingresar con facilidad debido a la humedad que Sofía producía, su boca se secó y su vagina se humedeció deseando ser ella quien recibiera ese miembro. Felipe sacó su miembro y utilizó las nalgas de Sofía para estimularlo, quería mostrar a Linda el pedazo de carne que tenía disfrutando a su mujer. Humedeció el orificio anal de su esposa, pero está se negó pues no habia aún estrenado el mismo. Se bajó de la silla y se introdujo el pene de Felipe a la boca por un momento, saborear sus jugos con el sabor de semen de su hombre hizo que se excitara aún más y le pidió a Felipe que se recostara en el suelo, ella se giró dándole la espalda y sujetando los tobillos de su esposo se introdujo todo el pene en su vagina, dejando a la vista de su esposo el precioso culito que tiene. En cada senton Felipe imaginaba que era Linda la que se ensartaba su miembro, tomó las caderas de su esposa y disfrutó con cada penetración al igual que Sofía. Los dos lograron llegar al orgasmo, Sofía se dejaba caer de espaldas sobre el pecho de Felipe sin dejar escapar al pene que la había hecho gozar, solamente sentía como el semen de su hombre y sus jugos producto del orgasmo escurrian de su vagina. Linda se retiró totalmente acalorada y deseosa de sexo mientras la pareja se levantaba al recordar que los invitados estaban en el jardín. Sofía decidió quitarse la tanga pues había quedado totalmente mojada y se arregló el vestido mientras Felipe hacía lo mismo con sus ropas. Ya incorporados en la reunión, Felipe aprovechaba para toquetear a Sofía y en ocasiones, ante la mirada de Linda pasaba sus dedos por los labios de la vagina haciendo que la imaginación de Linda volara.

Lamentablemente para los dos no llegó a concretarse ningún encuentro y durante el resto de la visita Linda no perdía oportunidad para fijar su mirada en el bulto que tomaba vida entre las piernas de Felipe, mientras este era producido por el deseo y pensamiento de Felipe en su joven visita.

Esa tarde, al terminar de escuchar lo que Linda me contaba, no pude evitar que mi erección se notará y que mi deseo por aventurarme a conocer sobre el sexo despertara. Decidí aprovechar la oportunidad y dado que Linda se había convertido en una mujer muy activa sexualmente intentar disfrutarla. Caminamos un poco más al fondo del parque en que nos encontramos y fue entonces que empecé a manosear el bello cuerpo de mi amiga hasta lograr que ella tomara la iniciativa, para no quedar en evidencia de lo que buscaba.

Nos recostamos en un árbol y aproveché a acariciar su cuerpo, levantando su vestido y jugar con sus nalgas. Ella me correspondió acariciando mi miembro por buen rato sobre la ropa y haciendo que mi erección se pronunciara más. Interrumpi sus caricias con el pretexto que el pantalón me lastimaba, a lo que ella respondió diciendo que no fuera malo y mejor lo dejara salir de su castigo. Baje el ziper de mi pantalón y le pedí que fuera ella quien lo sacara, su mano entro en mi pantalón para sacar mi pene y disfrutar de sus caricias mientras le besaba la boca y acariciaba su cuerpo. Se movía como nunca había sentido, sus movimientos hacian parecer que dentro suyo ya tuviera mi pene lo que hizo que me calentara mucho. Acaricié sus nalgas y el orificio anal por sobre su tanguita, empujaba con fuerza y más se movía, gemía y me besaba con pasión mientras su mano hacia que mi pene mostrará la cabeza totalmente colorada por la cantidad de sangre que habia hecho circular, no lo había visto así nunca. Me preguntó si era virgen, a lo que preferí responder con sinceridad pues no quería que al momento de la acción quedara en evidencia. Me dijo entonces que le diera mi mano, tomó mi dedo medio y lo lamió muchas veces dejando buena cantidad de su saliba en el mismo. Esos besos me hicieron imaginar su boca besando mi pene, luego me dijo que ahora podía entrar en ella y sin pensarlo baje mi mano a su entrepierna mientras ella apartaba la tanga para dejarme libre su vagina. Cada vez que empujaba hacia el fondo sentía que su cuerpo se calentaba o esa era mi forma de interpretar su excitación, luego me dijo que si quería comerla a besos. Le dije que la estaba besando con toda la pasión que podía y ella sólo reía y me dijo, tonto lo que quiero es que tus labios besen mis labios pero no los de mi boca. Me puse de rodillas sin pensarlo, era la primera vez que besaba una vagina y no sabía la importancia que tenía. Creo que lo hice mal porque luego de 5 minutos me apartó y fue ella la que de rodillas se puso a besar mi pene.

Estaba realizado, era mi primer oral y me lo daba esa chica que de un momento a otro me hizo entender que las apariencias engañan. Que la niña recatada que yo conocía en realidad era toda una mujer dispuesta a disfrutar de su sexualidad a más no poder. Me sentía tan bien que no pude evitarlo, aunque quería prolongar el momento sus besos y la humedad de su boca no me dejaron. Le dije que estaba por terminar pero a ella no le importó, siguió con los besos mientras empezaba a apretar el tronco de mi pene, esto hizo menguar mis deseos por eyacular y siguiera disfrutando. Saqué sus pechos del brasier y apreté sus pezones duritos, cerré mis ojos y me dispuse a disfrutar hasta el último segundo. A pesar que seguía apretando la base de mi pene, no pude más y nuevamente me disponía a terminar. Ha bia escuchado que a muchas chicas no les gustaba el sabor del semen y por eso le dije nuevamente que estaba por eyacular. Ella sacó el pene de su boca, pero sólo para decirme que no importaba, deseaba que al terminar lo hiciera dentro de ella y así lo hice, fue una eyaculación tan intensa la que me estaba haciendo sentir y mi cuerpo empezó a contraerse sin control. Ella seguía besando mi pene, a pesar de lo intenso de la eyaculación muy poco del semen que había expulsado alcanzaba a salir de su boca. Terminó por limpiar mi pene de todo rastro de semen y siguió besando la cabeza haciendo que respondiera casi de inmediato.

Se levantó y continuó con el masaje a mi miembro, ahora con la mano. Me besó y pude sentir en su aliento algo extraño, era el sabor a sexo que inundaba su boca. Nos disponíamos a seguir cuando de pronto sonó el celular, era su madre que preguntaba donde nos encontrábamos y que pedía que regresaramos.

No tuvimos opción pues de lo contrario su imagen de niña buena y obediente se vería comprometida. Se agachó y beso mi pene varias veces, luego lo dejó y dijo que tendríamos que dejarlo para otra ocasión. Yo me fui feliz pero al mismo tiempo triste, pues hubiera deseado descargar dentro de su vagina y dejar de ser virgen con esa chica que aún siendo un año menor que yo, era ya toda una experta.

En próxima ocasión les contaré sobre mi primera experiencia completa con Linda, la primera vez que me la comí...

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