Luego de un año de su famosa respuesta la ex señorita Antioquia y Primera Princesa del Concurso Nacional de Belleza en el 2008, Verónica Velásquez, siguió con una vida llena de compromisos y trabajos.
Esto, pese a las burlas en los medios de comunicación, a los rumores de depresión y suicidio y a que muchos la imaginaron escondida o en el exterior.
No, esta paisa durante estos meses pasados recorrió el país junto a las otras cuatro finalistas del Reinado haciendo labores sociales.
En septiembre, por ejemplo, viajó a Bielorrusia a representar al país en el concurso de Miss Intercontinental.
Ella no duda en decir que su participación en Señorita Colombia fue la mejor experiencia de su vida, aunque acepta que la 'embarró' en la forma en que respondió. "Esa noche los nervios me traicionaron, me enredé y no supe explicarlo", recuerda.
Lo que quiso decir, agrega, "es algo muy bonito y es el complemento de todos, más allá del género, si es entre mujeres u hombres. No creo que fuera tan tonto lo que dije, si hubiera sido así no le hubieran puesto ese título a un libro", dice.
El espectáculo que se generó en torno a ella nunca le afectó. Asegura que este episodio sólo quedó en los medios de comunicación, pues su realidad es completamente diferente. Ha vivido tranquila y muy alejada de los rumores.
A sus 21 años, Velásquez quiere recuperar la vida que llevaba antes de ser reina.
Retomará sus estudios de Ingeniería Administrativa en la Universidad Nacional, que cursó hasta quinto semestre, se entrenará para participar en competencias de triatlón y tomará clases de actuación y presentación.
Lo negativo que pudo haber sido para ella este episodio, lo usará a su beneficio, pues ya que todo el mundo conoce su frase, piensa apropiarse de ella y, tal vez, convertirla en la marca de una empresa que piensa crear próximamente con la asesoría de su familia y amigos.