Chris Brown: "La industria me puede besar el culo"

El cantante Chris Brown no termina de levantar cabeza tras la agresión a Rihanna. El ataque no sólo parece haberle afectado en lo personal, sino que también está pasando factura a su carrera musical. Brown acaba de despedirse de Twitter, después de que las principales tiendas de Estados Unidos hayan decidido no vender su nuevo disco para castigarle. Cinco años de libertad condicional y 180 horas de servicio a la comunidad no ha sido la única pena que ha recibido el rapero Chris Brown por haber agredido a la que hasta entonces era su novia, la cantante Rihanna. Además, los mayores establecimientos estadounidenses le han castigado no sacando a la venta su último trabajo Graffiti.
La respuesta del rapero no se ha hecho esperar. "Estoy harto de esta mierda. Los grandes almacenes están boicoteando mi CD. No quieren venderlo y encima mienten a los clientes. ¿Qué más tengo que hacer?", "No pienso morderme la lengua con este asunto" o "La industria me puede besar el culo", son algunos de los mensajes que Brown ha escrito en Twitter.
El lunes, tras pasarse el fin de semana despotricando contra aquellos que le castigan por haber maltratado a su ex novia, se despidió de la red social Twitter. Tal y como publica Contact Music, el cantante escribió: "Quiero agradecer a mis fans todo el apoyo. Os quiero a todos. Adiós", para acto seguido borrar su cuenta.
Éste no entiende porqué se le sigue mortificando por el ataque a Rihanna, ya que ha pedido perdón públicamente, se ha arrepentido y ha aprendido de la experiencia. Éste tiene claro que no piensa pasarse la vida pagando por un sólo error cometido.
"Tengo sólo 20 años. Se trata de un error que cometí, pero una vez que no lo he negado y no he huido de ello, no voy a dejar que esto destroce mi vida". El cantante insiste en que lo ocurrido le ha servido para convertirse en "ejemplo" de lo que no se debe hacer y ayudar a la gente a "no seguir su mismo camino". Lo que para éste es más que suficiente para no tener que pasarse el resto de su vida con la cabeza agachada.