La inyección desplazó a la píldora en materia de anticoncepción

Menos embarazos adolescentes,

más mujeres solas con sus hijos

De acuerdo con la Encuesta Nacional de Demografía y Salud de Profamilia, el 32 por ciento de los niños vive sólo con la mamá.
Por primera vez desde 1990 se detuvo la tendencia creciente de los embarazos adolescentes en Colombia. De acuerdo con los resultados de la quinta Encuesta Nacional de Demografía y Salud (ENDS 2010), presentada ayer, el porcentaje de mujeres entre los 15 y los 19 años que están o han estado embarazadas se redujo un punto (del 20 por ciento en el 2005 se pasó a 19 por ciento en el 2010).
La Encuesta, llevada a cabo por Profamilia con 51.447 familias de todo el país, y cofinanciada por el Ministerio de la Protección Social, el Instituto Nacional de Salud y Usaid, mostró, además, que el 20 por ciento de las mujeres en este grupo de edad se declaran insatisfechas con el cubrimiento de sus necesidades de planificación familiar.
La ENDS, considerada uno de los referentes más importantes en materia de medición de aspectos de demografía y salud sexual y reproductiva, también encontró que las tasas de fecundidad (es decir, el número promedio de hijos por mujer) siguieron bajando. De cerca de siete hijos por cada colombiana en la década de los 60, el promedio bajó a 2,1 por mujer.
CAMBIO FAMILIAR
Pero no sólo la familia ha cambiado en el número de hijos. Según la ENDS, más de la mitad de los hogares están disueltos y la crianza de los hijos es responsabilidad de la madre, los abuelos o el padre.
El 43 por ciento de los hogares son nucleares completos (conformados por padre, madre, hijo o hijos y parejas sin hijos); el 12 por ciento, nucleares incompletos (falta el padre o la madre); el 14 por ciento son hogares de familia extensa completa, que viven con hijos solteros o pueden ser otros hijos de la pareja, y el 14 por ciento de la mujeres están separadas o divorciadas.
De acuerdo con la encuesta, el 56 por ciento de los niños y niñas viven con el papá y la mamá, el 32 por ciento sólo con la mamá, el 3 por ciento con el papá y el 7 por ciento con ninguno de los dos.
Los investigadores resaltan que le número de niños y niñas que viven con ambos padres disminuyó en los últimos 15 años, al pasar del 66 por ciento al 56 por ciento.
Otra cifra que refleja la realidad de la familia es que en 15 años aumentó en un 10 por ciento el número de hogares que están bajo la responsabilidad de las mujeres. El país pasó del 24 por ciento -en 1995- al 34 por ciento a familias a cargo de madres solteras en esta última medición.
La investigación muestra, además, que los colombianos creen menos en el matrimonio y prefieren la unión libre. De 1990 al 2010 se redujo del 32 al 19 por ciento el matrimonio formal y creció del 20 al 33 por ciento las relaciones en unión libre.
Aunque mejoró la cobertura en vacunación, el 20 por ciento de los menores de dos años en el país aún tienen incompleto su esquema de vacunas.
Gabriel Ojeda, director de la Encuesta, destacó el hecho de que la cobertura en salud llegó al 88 por ciento.
El maltrato no cede
Los colombianos siguen maltratando duramente a las mujeres y a los niños. El 37 por ciento de mujeres casadas o en unión libre ha recibido agresiones físicas por parte de sus compañeros (2 puntos menos que en el 2005), siendo el control extremo la peor forma de violencia. El zarandeo y los empujones (33 por ciento) son la forma más común de maltrato físico. Al 27 por ciento les pegan con la mano y al 12 por ciento las patean o arrastran. Y el 10 por ciento afirmó haber sido violadas por sus propios compañeros sentimentales.
El 26 por ciento reconoció recibir maltrato verbal por parte de sus cónyuges, siendo las más afectadas las mayores de 40 años.
La inyección desplazó a la píldora en materia de anticoncepción
Exactamente 50 años después de su llegada a Colombia, la píldora ha dejado de ser el método anticonceptivo hormonal preferido por las mujeres colombianas.
Según la Encuesta Nacional de Demografía y Salud (ENDS), el primer lugar en esta categoría lo ocupa actualmente la inyección, método usado por el 8 por ciento de las colombianas (3 por ciento más que hace cinco años), mientras que la píldora, usada por el 6,5 por ciento de las mujeres (0,6 por ciento menos que hace cinco años), bajó al segundo lugar. Los implantes, preferidos por el 3 por ciento de las mujeres, se mantuvieron en el tercer puesto.
La preferencia por la inyección como método anticonceptivo y de planificación familiar es mayor entre las mujeres jóvenes entre entre los 15 y los 34 años.